70 AÑOS DE LA REPÚBLICA POPULAR CHINA

Agustín Saavedra Weise*

 

Imagen de qgadrian en Pixabay

El 1º de octubre se celebrará el 70º aniversario de la fundación de la República Popular China (RPC), proclamada en la plaza Tiananmen por Mao Tse Tung, tras vencer en la Guerra Civil a su rival nacionalista Chiang Kai-shek. Mao expresó en esa célebre ocasión: “China al fin se ha puesto de pie”. Tras la histórica visita a Beijing del presidente Richard Nixon y de su secretario de Estado (Canciller) Henry Kissinger, la República Popular China recuperó el asiento como miembro permanente con derecho a veto en las Naciones Unidas y con su nueva legitimidad se insertó en la comunidad mundial. Atrás quedaron los miles de años de dinastías imperiales y sucesivas ocupaciones territoriales por potencias extranjeras. Los dos últimos casos (Macao y Hong Kong) fueron debidamente atendidos, hoy ambas regiones son parte plena de la República Popular China.

Desde el histórico aforismo de Deng Xiaoping “no importa de qué color sea el gato con tal de que sepa cazar ratones”, pronunciado en momentos de crisis tras el fracaso de la “revolución cultural”, la República Popular China inició un período de pragmatismo político con progresiva apertura hacia el exterior y hacia las economías de mercado, lo que le ha brindado espectaculares tasas de crecimiento en las últimas décadas, transformando así al milenario dragón del Oriente. Pasada la era de Mao y una vez fallecido éste, los líderes principales del cambio cualitativo chino han sido Deng Xiaoping, Jiang Zemin, Hu Jintao y Xi Jinping, actualmente al mando. Ellos produjeron la metamorfosis para que una sociedad campesina obnubilada por bolsones de pobreza y hasta algunas hambrunas, pase a encontrarse entre las naciones más poderosas y de mayor crecimiento, al mismo tiempo que dotó a su población de mejores condiciones de vida. Asimismo, la República Popular China cuenta hoy con sofisticadas fábricas de alta productividad y un sorprendente liderazgo en algunas áreas de alta tecnología. El Partido Comunista Chino (PCC) que gobierna al país, aglutina personas aptas para ocupar puestos de responsabilidad. Se ha creado una clase de funcionarios preparados y eficientes. Es por eso que el PCC cuenta con una buena base de legitimidad. Y no es para menos, ha logrado transformar al milenario país en potencia universal.

Hay problemas y los habrá. Por otro lado, la República Popular China enfrenta en estos momentos el embate de la “guerra comercial” impulsada desde Washington por Donald Trump. Asimismo, persiste una tensa situación geopolítica en el Mar Meridional y el tema de Taiwán (o de “las dos Chinas”) sigue sin resolverse. Empero, pienso que surgirán soluciones constructivas para esos escollos. Si bien Rusia y la República Popular China se han aliado para contrarrestar el poderío norteamericano, es un hecho que la gama de intereses económicos existente entre la República Popular China y EEUU es intensa; ello contribuirá en la búsqueda de acuerdos y no exacerbará los conflictos de la hora. Un sólido intercambio entre partes siempre ha sido semillero de la paz y creo que así será en la relación sino-estadounidense.

La República Popular China cumple 70 años y mira orgullosa al resto del planeta. Tiene razones para hacerlo, aunque persisten problemas. Cabe destacar —al concluir— que mediante su comercio e inversiones globales la República Popular China coopera con muchas naciones emergentes, Bolivia entre ellas.

*Ex canciller, economista y politólogo. Miembro del CEID y de la SAEEG. www.agustinsaavedraweise.com

Tomado de El Deber, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, <https://www.eldeber.com.bo/opinion/70-anos-de-la-Republica-Popular-China-20190928-9113.html>