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HARDPOWER: LAS COSAS, EL TRABAJO Y LA POBLACIÓN

Iris Speroni*

Frente a esta apología de la Muerte con la que somos bombardeados, lo verdaderamente disruptivo, revolucionario, contestatario e irreverente es apostar a la Vida.

 

En los últimos años hemos sido bombardeados por la liturgia de un nuevo credo, con epicentro en el WEF/FEM, Davos, y toda una red de difusión que incluye Naciones Unidas, los medios masivos de comunicación, las grandes empresas y las burocracias de las naciones de Occidente.

En vocabulario marxista: la superestructura. Sistema integrado por autoridades (ejecutivo, legislativo, judicial), el conjunto de leyes y normas, las manifestaciones de prensa, de entretenimiento o artísticas, el  discurso en los centros de estudios.

Luego están las cosas (estructura). 

Te prometo tristeza, soledad, pobreza y muerte

El nuevo credo le plantea a la plebe un mundo horrible y desesperanzador. “No tendrás nada y serás feliz”. Plantean un mundo donde uno debe asesinar a sus fetos y a sus padres cuando éstos se vuelven ancianos, no estar en pareja, practicar el onanismo, vivir de prestado —siempre y cuando autoricen usar el dinero—, no ser dueño de un techo, con un trabajo precario, con la amenaza permanente de terminar en la calle o bajo un puente; y por último, comer inmundicias.

Putin señaló en WEF (Foro Económico Mundial) hace unos años, que los presentes controlan Occidente; el 12% de la población mundial. Mientras los sacerdotes de la nueva religión elucubran sus nuevas pócimas, el resto del mundo está en otra (el 88% restante).

Un futuro venturoso posible

La Nación Argentina está mal. Sufre su propio tratado de Versalles, lo que traté en IMPERIO AUSTRAL (*). El correlato es un pueblo sufrido: desocupación, subocupación, trabajo precario, pobres servicios de salud y educación, mala alimentación —por falta de dinero y por falta de calidad en los alimentos—, mal vestidos y calzados, sometidos a la violencia anárquica de los delincuentes comunes, con mal servicio de transporte.

Las dos coaliciones por ahora mayoritarias, TdF y JxC, no tienen plan alguno para el país excepto continuar el sistema actual, vigente desde las últimas décadas y eventualmente emparchar lo que no dé para más, financiado con altos impuestos y endeudamiento. No tienen programa alguno para ninguna de las áreas de gobierno.

La tercera opción que amanece, que tiene a Milei como cara visible, ha expuesto su eventual solución para el problema de la inflación (clausurar la moneda propia). Desconocemos —o yo desconozco— sus propuestas en los rubros restantes: defensa, administración de justicia, seguridad, educación, salud, vivienda, infraestructura de transporte, energía, relaciones exteriores, etc.

Qué es hoy ser revolucionario

Frente a esta apología de la Muerte con la que somos bombardeados, lo verdaderamente disruptivo, revolucionario, contestatario e irreverente es apostar a la Vida. Es apostar a tener un futuro como Nación, como comunidad, como familia y como persona.

Toda propuesta debe tener dos componentes: uno real y físico y otro intangible. Hoy el tema serán algunos objetivos tangibles a proponer a la sociedad [1] (*).

La Revolución – Las Cosas

El país debe subir su población a 100 millones de personas lo antes posible. Para que la gente quiera formar una familia debe contar con: expectativas de un futuro mejor, posibilidades de prosperar. Traduciré esto a cosas concretas.

    • Que una familia con un único ingreso acceda a la vivienda propia. Para ello hacer lo contrario a los últimos años [2]. La propuesta es: a. distribuir población por todo el país —donde la tierra es más barata—, b. que haya oportunidades para que la familia pueda comprar terreno y hacerse su propia casa o comprar una de las decenas de miles abandonadas en todo el país y remozarlas [3]. Nada más revolucionario hoy que una familia posea su propio hogar, con un único ingreso y sin hipotecarse toda la vida.
    • Que toda familia con un único ingreso acceda a su propio vehículo barato, de bajo mantenimiento, de repuestos de precio módico y reparación fácil y económica. En caso de los hogares con más de un vehículo ofrecer que al menos uno de los dos sea analógico
    • Pleno empleo.
    • Buen salario promedio. Objetivo U$D 1.400 mensuales.
    • Estímulo a familias numerosas:
      • Pago estatal por hijo a la totalidad de la población (no únicamente a los más humildes).
      • Pago estatal por nacimiento.
      • Pago adicional por niño por arriba de cuatro hijos.
      • Pago estatal por escolarización.
      • Salario familiar [4] —de alto monto— por cónyuge en los casos en que a) estén legalmente casados y b) uno de los dos cónyuges no trabaje. Para la totalidad de los trabajadores y no como actualmente para los de bajos ingresos.
      • Plus en caso de educar en casa (homeschooling).
      • Créditos hipotecarios para compra/ampliación de vivienda.
      • Créditos hipotecarios para parejas jóvenes.

Inmigración. Con buenos salarios, la inmigración desde países limítrofes continuará. La propuesta a otros grupos no será el dinero (no podríamos igualar los ingresos de Francia o Alemania) pero sí ofrecer libertad: libertad para criar los hijos, practicar el cristianismo, tener vivienda y auto propio [5].

Ocupar el territorio

Art. 75 inc. 19 de la Constitución Nacional: “…Proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio; promover políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones…”.

Recuperar el FFCC. Requiere invertir en vías, comunicaciones, material rodante, locomotoras. Poseemos lo más valioso: la propiedad de los terrenos de la traza.

Un plan de riego en las ⅔ de la superficie del país hoy árida. Parte para que sean tierras destinadas a la agricultura y ganadería, otra parte a bosques de madera nobles —para ser explotados económicamente dentro de algunas décadas—, cultivos de secano, árboles de frutas secas. Requerirá población para trabajar las nuevas áreas o brindar servicios a ellos (docentes, personal médico y paramédico, policías, personal de FFCC, comercios, etc.).

En cuanto a la construcción (obra civil) están las obras de riego en sí, más todas las mejoras en los campos (alambradas, molinos, aguadas, silos, graneros, cobertizos), las viviendas en los campos y en los pueblos, más la infraestructura en los pueblos.

Esto permitirá que la población se instale donde los terrenos son más baratos que en los actuales centros urbanos.

Una buena infraestructura de comunicaciones permitirá que personas que trabajan en forma remota se instalen en zonas rurales o semirurales y puedan combinar su trabajo actual con la atención conjuntamente con su cónyuge de pequeñas fincas [6].

En los últimos 15 años se perdieron 100.000 familias productoras agropecuarias. Un objetivo debe ser, primero, recuperarlas, en segundo lugar, ampliar el número original del año 2000. En resumen: darle acceso a 200.000 nuevas familias a la producción agropecuaria. Los modos pueden ser: facilitar la compra de tierras (acrecentar hectáreas para explotaciones existentes, acceso a hijos para que armen su propia explotación, facilitar el acceso a la propiedad a trabajadores y contratistas rurales, nuevos emprendimientos en tierras ganadas al riego).

Movimientos poblacionales fomentados desde el Estado: la primera parte es ofrecer servicios públicos en zonas que hoy carecen de ellos o si existen son de inferior calidad que en los centros urbanos. Asimismo nuevas oportunidades de trabajo que vienen de la explotación de tierras hoy áridas que pasarán a ser rentables. La segunda parte es el traslado de todas las actividades públicas federales que no sean los ministerios [7], como ANSES, PAMI, todos los Institutos, consejos, comisiones [8] [9].

Promover el traslado de matrimonios jubilados (con un premio mensual en la jubilación) a pequeñas localidades del interior de PBA y el resto de las provincias o volver a la provincia natal. Esto liberará viviendas en Capital y GBA para alquiler.

El gran movimiento de empleados públicos, junto al salario familiar (que un cónyuge no trabaje fuera de la casa) llevará a a) baja de demanda de vivienda en la Ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires, b) baja global de empleados públicos (habrá familias que preferirán que uno de sus miembros renuncie y se quede con la familia), c) mayor demanda doméstica en el interior del país.

Incentivar la construcción de viviendas unifamiliares para alquiler.

Ahorro

Se procurará que las familias ahorren y que el ahorro nacional esté en manos de las familias. Complementariamente se incentivará que las familias se capitalicen mediante:

    • la compra de vivienda
    • la compra de parcelas rurales (aunque sea 1 hectárea para el momento de retiro).
    • la compra de su vehículo
    • la instalación de pequeños comercios/talleres/compra de maquinaria.

El ahorro será:

    • fomentar el ahorro familiar en oro, plata y monedas duras.
    • cuentas de ahorro previsional en oro, plata y monedas duras.
    • cuentas de ahorro por indemnización por fin del contrato laboral (despido causado, despido no causado, renuncia, jubilación, muerte, invalidez) en oro, plata o monedas duras.

El Estado acuñará pesos oros y los hará accesibles a la población.

La Argentina no necesita crédito para crecer. Puede basarse en el propio ahorro que posee la población. El Estado debe generar las condiciones para que las familias quieran invertir su ahorro en: instalar/ampliar/mejorar negocios comerciales, instalar industrias/talleres, mejorar sus parcelas rurales, construir viviendas para uso propio o renta. Invertir en transporte. 

Hoy existe un enorme ahorro familiar dormido por desconfianza del pueblo en las autoridades (a mis ojos totalmente justificado). Esto produce enormes pérdidas en el PBI del país [10].

Pleno empleo y buenos salarios

¿Cómo pasar de una economía con trabajo 50% informal y salarios de hambre a una pujante, con pleno empleo y mejores salarios?

El motor de la economía debe ser la exportación. Poner como objetivo 500 mil millones de dólares (cinco veces los volúmenes actuales).

Esto se logrará:

    • Liberar el tipo de cambio. Que los derechos de exportación sean solamente una tasa aduanera de baja alícuota. Eso estimulará el aumento de volúmenes de producción.
    • Ampliar la frontera agrícola (triplicarla) mediante el riego en Gran Chaco (Formosa, Chaco, norte de Santa Fe, este de Salta y Santiago del Estero); Patagonia, Cuyo, Andes norte (La Rioja, Catamarca, oeste de Salta y Jujuy).
    • Transformar las exportaciones agrícola de forraje (tortas y pellets de soja) y combustible (aceite de soja) a alimentos. Carnes de cerdo, vacuna, aviar, caprina, ovina; lácteos (objetivo U$D 4.000 MM anuales en quesos); acuicultura, fruticultura, cultivos de secano, embutidos, productos especializados.
    • Aumentar las exportaciones industriales [11].

Para aumentar las exportaciones hay que liberar el tipo de cambio. Para que no afecte el ingreso de las familias se deben retirar todos los impuestos sobre los alimentos.

Energía

El interior del país hoy sufre de falta de potencia. Eso obliga a iniciar equipos obsoletos que encarecen el valor del KWh.

Lo ideal es que las empresas que sean electricidad-intensivas se ubiquen cerca de las grandes generadoras (Chocón, Yacyretá, Atucha, Salto Grande, Piedra del Águila). En caso contrario, procurar que tengan su propia fuente.

Fomentar la generación de electricidad por biodigestores en todo el país. Buscar la autonomía y no depender obligatoriamente del sistema interconectado nacional. En los casos en que se pueda, incluso que la propia vivienda unifamiliar sea autónoma. Cambiar el paradigma. Mantener la interconectividad de un sistema único para todo el país; pero al mismo tiempo estimular la autonomía y autogeneración.

Dicho esto, debe de haber un único precio del KWh en todo el país. Igual producto, igual precio.

Fomentar el uso de biodiésel en la generación eléctrica y para uso vehicular (camiones, automóviles diésel y locomotoras). Ídem con alconafta.

En cuanto a Vaca Muerta y cualquier otro yacimiento, debe promoverse que las empresas inviertan y ganen plata pero la prioridad debe ser el autoabastecimiento. Más teniendo en cuenta que se planifica un enorme incremento de la producción y los volúmenes de exportación.

El país debe respetar los precios internacionales para determinar los precios domésticos. Para no golpear la capacidad de compra del salario familiar eliminar todo impuesto sobre combustible y sobre servicios hogareños y comerciales de gas y electricidad.

Transporte

No quiero abundar. FFCC, flota fluvial y marítima, fomentar el aumento de la flota de camiones para cuentapropistas, vehículos de carga pequeños para comercios y talleres y cuentapropistas. Rehabilitar astilleros. Invertir en el canal Magdalena y recuperar el Paraná. Aerocargas en el país y para colocar exportaciones. Un país grande necesita un buen sistema de transporte (y barato) para conectarnos.

Costos e Impuestos

El país sólo necesita que el estado deje tranquila a la gente. No necesita subsidios a las empresas, ni subsidios a la energía ni nada.

Las empresas necesitan:

    • que el Estado elimine adelantos impositivos (sin retenciones, sin percepciones, sin otros adelantos).
    • pocos impuestos.
    • bajas alícuotas
    • Cero impuestos a alimentos, combustibles, servicios de gas y electricidad.

Las familias necesitan para elevar su nivel de vida:

    • Buenos servicios públicos (seguridad, salud, educación, transporte, administración de justicia)
    • Alimentos de calidad y sin impuestos. Buen sistema de comercialización de alimentos.
    • Acceso a la vivienda y a la calidad de hábitat (aire y agua pura), vegetación.
    • Salario medio de U$D 1400 y 100% legal.
    • Posibilidad de trabajo independiente (oficios, capital para talleres/comercios, profesión).
    • Eliminar todo impuesto al trabajo, ya sea en relación de dependencia o independiente.
    • Eliminar ganancias cuarta categoría.
Aumento de la producción

La locomotora de la nueva economía serán las exportaciones.

El segundo motor será la obra civil. La ocupación de territorio, la construcción de millones de viviendas, la inversión en infraestructura de transporte, energía y comunicaciones, las nuevas ciudades. Mejorar toda la inversión en instalaciones educativas y centros de salud.

Por último, el país debe volver a invertir en defensa.

La producción aumenta por dos razones: un incremento de demanda y un aumento de oferta que la acompañe.

La demanda de bienes y servicios de un país se produce por: exportaciones, inversión, gasto doméstico (cuando yo compro una remera) o gasto público (cuando el ministerio compra un paquete de fideos). De estos cuatro motores de la economía elegimos dos: exportaciones e inversiones.

Otro tema diferente es la oferta. Este modelo propone que a) la inversión sea privada, b) la financiación sea de la propia familia, autofinanciación; usar los propios ahorros. Nada de subsidios del Estado, nada de crédito blando, nada de darle lugar a los De Mendigurens de la vida.

El aumento de oferta requiere mayor capital: un nuevo comercio o un aumento de stock en comercio existente, una nueva máquina, una nueva instalación (consultorio odontológico para servicios de odontología), personal apto, dinero para capital de trabajo (comprar insumos).

Los argentinos tenemos miles de millones de ahorro inactivos a resguardo de la rapiña estatal. Mover ese dinero e invertirlo requerirá: a) expectativa de tiempos mejores, b) estabilidad política y monetaria, c) baja/modificación de impuestos, d) libertad de trabajo (eliminar trabas regulatorias).

Habrá personal para algunas tareas y para otras no. El aumento de demanda de trabajo implicará: aumento del salario promedio, capacitación de las personas, estimular la inmigración de gente capacitada. Sobre educación se hablará otro día.

Por hoy, terminamos. El próximo es sobre softpower: seguridad, salud, RREE, educación/formación/instrucción pública, administración de justicia, impuestos, arte, prensa.

 

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas

[1] El equipo de Donald Trump elaboró una lista de objetivos tangibles para elevar a consideración de los votantes en 2024. Por Edward Ring, DEFINIR LAS PRIORIDADES DE UNA NACIÓN.

[2] En los últimos años la única propuesta de los gobiernos fue construir casas con las siguientes consecuencias: a) el ritmo de construcción fiscal es inferior al de las necesidades de la población, b) da lugar a arbitrariedades por ser los políticos quienes asignan un bien escaso, c) como toda obra pública da lugar a sobreprecios, d) los funcionarios apuestan a la macrocefalia, esto es hacen infraestructura (cloacas, tendido eléctrico) y viviendas en capital y gran Buenos Aires en lugar de ofrecer mejores condiciones en el interior de PBA y en el interior del país.

En menor medida y esporádicamente, existe oferta de créditos hipotecarios sin criterio geográfico. El efecto fue sobrevalorar las propiedades en ciertos barrios de Buenos Aires y otras ciudades grandes y la proliferación de edificios de ocho pisos y departamentos pequeños en ciudades como La Plata, Río Cuarto y casi todas las capitales del interior. Destruyeron el patrimonio arquitectónico de esas ciudades, en su mayoría con construcciones de una planta clásicas, de la belle époque o art nouveau. Confinaron a decenas de miles de familias a vivir en un departamentito, sin posibilidad de expansión.

[3] Esto requiere:

  1. a) habilitación de nuevos materiales y nuevas técnicas de construcción (madera, bambú, adobe, estructuras metálicas, bloques, laminados varios, fibra de carbono, distintas opciones de aberturas/techos/pisos, otros); 
  2. b) baja de los costos impositivos de los materiales de construcción;
  3. c) impedir que fabricantes cartelizados o monopólicos establezcan precios por encima de los internacionales;
  4. d) generar infraestructura para el desarrollo de nuevos barrios en todo el país: conectividad (fibra óptica y satélite), electricidad, agua corriente y cloacas sólo si es necesario – no soy una cloacalista fanática tipo Banco Mundial -, caminos y FFCC; infraestructuras sociales: escuela, hospital, comisaría, club.
  5. e) Procurar en lo posible que las casas sean autosustentables: aislamiento frío calor, techos altos, ventanas con persianas, aislamiento en paredes/pisos/techos, paneles solares y/o generador eólico individual. Cocina económica alternativa a la de gas o eléctrica.
  6. f) Procurar que todas las viviendas sean: unifamiliares, con jardín al frente y en el fondo lugar para parrilla, horno de barro, huerto, gallinero, lugar para que la superficie cubierta aumente con la familia (para más dormitorios).
  7. g) asegurar que los vecinos no les roben los materiales al que está construyendo una casa. Esto hoy es un verdadero problema.

[4] El objetivo es estimular que uno de los cónyuges se dedique a tiempo completo al hogar de ser su voluntad.

[5] Cuando a los europeos les prohíban los autos y salir de un radio de 2 km de sus casas, varios serán los que quieran dejar sociedades sofocantes y venir a un lugar en el que se sientan cómodos. Con una economía pujante, podemos ser un centro de atracción para los cristianos que pasarán a ser perseguidos en Occidente. Para eso hay que arreglar la seguridad (la paz interior) y la administración de justicia. El resto, la gente se las arregla.

[6] Actualmente el problema no es sólo la concentración en Capital y GBA sino en cada capital de provincia (en algunos casos el 50% de la población).

[7] Los ministerios deben permanecer en la Capital Federal (la que ésta sea) por orden constitucional.

[8] Se debe tomar el recaudo de que no se instalen en ciudades hoy grandes. Ningún sentido tiene despoblar la capital federal (Buenos Aires) para repetir el error de macrocefalia en Rosario o Córdoba. Se deben ubicar en ciudades pequeñas de provincia y diseminados en distintas provincias.

[9] También trasladar los departamentos informáticos de los grandes bloques burocráticos separados del principal. Ejemplo: si traslado la ANSES a Rawson, mando informática a La Rioja. Exigir que el backup de los bancos privados esté al menos a 1.500 km de la capital, en pequeñas localidades.

[10] Ejemplos de pérdida de producción por falta de capital. En Mendoza todos los años se pierden toneladas y toneladas de fruta por el granizo. Se solucionaría con mallas antigranizo. Los productores o no tienen capital para esa inversión o no ven el retorno de la misma con los actuales precios (1. si exportan el BCRA se queda con la mitad, 2. las bodegas amenazan con importar uva chilena comprada con dólar a mitad de precio). En la última gran helada en la Patagonia se perdieron millones de cabezas ovinas. ¿Por la helada? No, porque no tienen cobertizos para los animales. Y no lo tienen por la baja inversión de las explotaciones que trabajan apenas por arriba del punto de equilibrio. Podría decir lo mismo con los limones o las cerezas. Existen infinidades de explotaciones que podrían multiplicarse con mayor inversión de capital. Para eso hay que generar las condiciones.

[11] Actualmente Argentina exporta el 90% de su producción de aluminio. ¿Por qué no exporta aberturas de aluminio? a) por tipo de cambio retrasado, b) por los impuestos que inhiben el procesamiento industrial de los lingotes de aluminio. Se puede trasladar este ejemplo a cientos de productos. Argentina podría ser líder en calzado, marroquinería, talabartería, muebles de cuero, interiores de vehículos (la lista es infinita). Podemos ir rubro a rubro y encontrar numerosas posibilidades.

Lecturas relacionadas

Imperio Austral

http://restaurarg.blogspot.com/2023/04/imperio-austral.html

Definir las prioridades de una nación

https://restaurarg.blogspot.com/2023/04/definir-las-prioridades-de-una-nacion.html

 

Artículo publicado el 08/04/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/04/hardpower-las-cosas-el-trabajo-y-la.html

APRIETAN Y AHORCAN

Iris Speroni*

Los que se llevan todo son quienes empujan a la Argentina una y otra vez al borde del precipicio.

Artículo publicado el 25/03/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/03/aprietan-y-ahorcan.html.

 

Esta semana fuimos testigos de un (nuevo) sablazo a los fondos previsionales por parte del gobierno. Como si el dinero le perteneciera y no fueran cuentas separadas.

Semejante barrabasada a dos meses de la finalización del año 2022 donde Argentina tuvo el mayor volumen de exportaciones de toda su historia, por más de 88 mil millones de dólares (2022: EL AÑO QUE NO ESTUVIMOS EN PELIGRO).

No sólo eso.

Este régimen, mediante la agencia paraestatal de recaudaciones denominada BCRA, se apropió del 50% de dicha cifra mediante el desdoblamiento del tipo de cambio.

Aun así, terminó el año y en lugar de tener 88 mil millones de dólares en el BCRA (o en su defecto 44 mil millones) como reserva, tienen cero —«fortalecimiento de reservas»—.

Como si esto fuera poco, durante el año 2022 el estado nacional, mediante la agencia oficial de recaudaciones impositivas, la AFIP [1], recolectó la cifra de tributos más grande de la historia argentina por 21.540.626 millones de pesos o lo que es lo mismo por 21,5 billones (continentales) de pesos.

Esta última semana de marzo 2023 va a ser de suma zozobra para todos nosotros. Las próximas, probablemente, también.

Argentina, una vez más, está al borde de otra hiperinflación y un nuevo default. Observamos que los países limítrofes, integrantes como nosotros del Mercosur, prosperan. Paraguay, Bolivia, Uruguay y Brasil han aprovechado la oportunidad que nos dio – a todos nosotros – la economía internacional. PBUB viven en conjunto los siguientes fenómenos: crecimiento de su PBI, reinversiones de sus ganancias, mejora del salario real de la economía, desarrollo, aumento de las reservas, reducción de la deuda pública, ausencia de inflación [2]. ¿Por qué en Argentina no es igual?

¿Cómo se explica que estemos tan mal cuando la gente, a pesar de todas las barreras que pone el gobierno, trabaja, estudia y trata de vivir un poquito mejor?

Quienes nos gobiernan

Los desequilibrios que nos infligen nuestros gobernantes en forma periódica son adrede. No son “cosas que pasan”.

Quienes gobiernan:

    • provocan inflación,
    • contraen deuda pública,
    • deciden gastar por encima de la recaudación tributaria,
    • abandonan el mantenimiento de las obras existentes,
    • se desprenden de activos inmobiliarios públicos,
    • sobregravan impositivamente al sector más productivo de la economía; con ese acto frenan a todo el país,
    • desestimulan las exportaciones,
    • sobreestimulan las importaciones,
    • propician la mudanza de industrias a Brasil,
    • sobrepagan a los proveedores públicos,
    • no controlan las concesiones públicas,
    • fomentan la economía informal y la desocupación.

Son las consecuencias de actos conscientes de gobierno.

La corrupción como excusa

Corrupción: Por sobornos de contratistas del Estado o de concesionarios públicos o por vender bienes públicos a precio vil.

Esa explicación no convence.

Nada hace pensar que lo mismo (en diferentes grados) no ocurra en Brasil o Paraguay o Bolivia o Uruguay. De hecho conocemos numerosos escándalos entre funcionarios públicos y empresarios en Brasil o Paraguay. Aun así, ambos países progresan, aumentan las reservas de sus bancos centrales, repagan su deuda pública y no tienen inflación.

Reinversión de ganancias

EQUILIBRIO INESTABLE: «Este sistema actual de exacción de la riqueza de unos argentinos por una coalición podría durar indefinidamente, si la ganadores tuvieran mesura».

Un país produce tanto como sus factores de producción le permiten. Teorizó sobre este punto Juan Bautista Alberdi. Son tres: tierra, capital y trabajo.

Todos los años, los factores se reducen: la tierra pierde nutrientes, las máquinas sufren desgaste, los trabajadores no calificados, los artesanos y los profesionales se jubilan.

Por lo tanto todos los años la sociedad debe reponer esos factores para mantener el producto. Si se reinvierte menos que el desgaste, un país pierde factores [3].

Si se reinvierte lo mismo que el desgaste ocurrido, se mantiene el nivel de producción. Pero si aumenta la población, entonces lo que le toca a cada uno es un poco menos.

Para mantener la producción promedio por habitante, hay que invertir para que los factores (tierra, capital, trabajo) aumenten al mismo ritmo que el crecimiento de la población.

Si un agente externo (ej. el Estado o los ladrones a mano armada) se queda con toda o parte de la rentabilidad, entonces comercios, industrias, familias no pueden reinvertir en lo que cada uno hace. Si el estado, el dinero que saca a las familias, no lo reinvierte en mantener bienes públicos (ej. FFCC, hospitales), éstos se pierden paulatinamente.

Baja la producción, somos todos más pobres.

Si el Estado le da todo ese dinero que le saca a la población a unos pocos (funcionarios venales, contratistas del Estado, proveedores del Estado, concesionarios, capitalistas de amigos) y estos lo convierten en moneda dura y lo sacan del país o lo gastan en banalidades (ej. el ministerio de la mujer, filmar películas que nadie ve, Télam, intereses), entonces el país consistentemente pierde capital, cada vez produce menos, es cada vez más pobre.

Es un tobogán de reducción permanente.

Finalmente, quienes se apropian de la riqueza, llega un punto en el que no tienen nada más que quitarle a la población. En ese caso lo que hacen es endeudar el país, para tener un tesoro para llevárselo. Toman el dinero prestado, se lo llevan a sus cuentas personales y nos dejan la cuenta a pagar.

¿Por qué sucede esto último? Porque el monto del robo anual es mayor que la rentabilidad anual de la economía, por lo que comprometen – también – la rentabilidad futura.

El tamaño del expolio es lo que explica que el Estado se haya quedado con 44 mil millones de dólares de las exportaciones y con 1,6 billones de pesos de derechos de exportación durante 2022 y llegado mediados de marzo de 2023 no tenga dinero para hacer frente a los compromisos: porque se llevaron más que las cifras consignadas.

Los perdedores de este juego somos los de siempre: los trabajadores, los que hacen changas en negro, los jubilados, las clases medias que tratan de sobrevivir, los que tienen un taller o un comercio, las pymes, algunas empresas grandes, todos los que producen para exportar (industria, servicios, agropecuario). Toda esta gente muerde fuerte y prosigue: trabaja, estudia, sobrevive.

Somos quienes damos estabilidad a la Argentina: por el simple hecho de estar ahí. Conducir una ambulancia, sembrar maíz, recoger huevos, reparar un automóvil, expender nafta, reponer mercadería, jugar un deporte, ir a la cancha, mantener el pasto de dicha cancha, llevar a los hijos a entrenar o a la escuela o al conservatorio de música, dar clases, alimentar a los animales. Todos los que contribuyen a que haya módico orden y normalidad.

Luego están los que administran la Argentina y los amigos del poder. Los que se llevan todo. Son quienes empujan a la Argentina una y otra vez al borde del precipicio —en forma absolutamente innecesaria—. Todos ellos, los únicos beneficiarios del sistema, con su codicia desbocada, provocan una y otra vez el caos.

Porque, como dije en diciembre de 2019: «Hoy la República Argentina es inestable no por los que pierden, sino, paradójicamente, por quienes ganan».

Hay que echarlos.

Porque necesitamos orden, paz, unión, estabilidad para crecer, prosperar, capacitarnos, invertir, crear, cuidar a nuestras familias. 

Mientras que aquellos, quienes provocan el caos permanente, estén al frente de la Nación, nada bueno lograremos.

Hay que echarlos.

 

Notas

[1] El BCRA es la agencia paraoficial de recaudación de impuestos federales; la AFIP es la agencia oficial de recaudación de impuestos federales.

[2] Más allá de los actuales problemas de Bolivia de las últimas dos semanas.

[3] Las formas de perder factores son infinitas: a. repongo odontólogos pero la formación es inferior, b. no hay suficientes peritos mercantiles nuevos para cubrir los puestos administrativos, c. hay disturbios en zonas turísticas que interrumpen rutas, destruyen posadas, etc., d. no se mantienen las vías férreas, e. no se compran nuevos vagones de subte, f. no se repone la fibra óptica/cables de luz/cañerías de gas que se rompen, g. no se hace el mantenimiento de las generadoras de electricidad por lo cual hay que aumentar los márgenes de seguridad (reducir la producción máxima), h. roban una vez por semana en la panadería del barrio, i. asesinan trabajadores en las paradas de colectivo.

 

Referencias

AFIP. Recaudación 2022

https://www.afip.gob.ar/institucional/estudios/serie-anual/ 

 

Notas relacionadas

2022: el año que no estuvimos en peligro

http://restaurarg.blogspot.com/2023/02/2022-el-ano-que-no-estuvimos-en-peligro.html

Equilibrio Inestable

http://restaurarg.blogspot.com/2019/12/2020.html 

EL ELEFANTE SE COME EN PEDACITOS

Iris Speroni*

Cómo deshacer la bomba de LELIQs sin que nos explote en la cara. El resultado a obtener será acabar con la inflación.

 

La pretensión de este artículo es derribar un par de mitos que circulan por la radio, TV y prensa escrita respecto a la inflación, las LELIQs y el déficit público.

Desarrollaré puntos que comencé a tratar en MIS PESOS, TUS PESOS, NUESTROS PESOS.

    • Uno de los mitos es que no hay forma de deshacer la gigantesca bola de nieve que son las LELIQs. Si lo hacemos, estallará el universo; nos vamos a morir todos; catástrofe. Consecuencia de esa premisa falsa: nadie desarma las Leliqs —que perviven desde el segundo mandato de Cristina Fernández— con la pseudoesperanza de dejar el problema al próximo mandatario. Falso, se puede desarmar aquí y ahora.
    • El segundo de los mitos es que el culpable de la inflación es el gasto público. Según esta premisa, el estado gasta más de lo que puede, y por eso: 1. el BCRA se ve obligado a emitir para financiar el gasto público; 2. el estado se ve obligado a endeudarse para financiar el gasto público. La consecuencia de este argumento es que la inflación y la deuda pública son el resultado del excesivo gasto. Falso: gastan mucho porque quieren. Hay inflación porque quieren. Endeudan al país porque ése – y no otro – es el objetivo político de todos ellos.

Empiezo por el mito 2, ¿por qué emite el BCRA?; dejo lo mejor para el final: ¿cómo deshacer la bola de nieve de Leliqs y otros?

El destinatario de la emisión

«En el acumulado de 2022, el financiamiento neto mediante AT totalizó $620.051 millones (0,8% del PIB), en tanto que la emisión neta de letras del Tesoro suscriptas por el BCRA sumó USD3.995 millones (0,8% del PIB)».

https://www.opc.gob.ar/operaciones-de-deuda-publica/operaciones-de-deuda-publica-diciembre-y-acumulado-2022/ 

Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), durante todo el 2022 el BCRA financió a la Nación en $ 620.051 millones en forma de adelantos y además subscribió bonos del tesoro emitidos en dólares por U$D 3.995 millones. A tipo de cambio BNA del 31/12/2022 (175,25 $/U$D) equivale a $ 700.123.750.000. Ambos conceptos suman: $ 1.320.174.750.000. A estos números faltan los dividendos del BCRA girados al Tesoro Nacional. Sabremos el monto cierto de estas tres cifras cuando el BCRA publique su balance anual.

¿Cuánto pagó el BCRA de intereses de LELIQs a los bancos? Bueno, también necesitamos los números definitivos. Haré una aproximación.

Al 17 de marzo de 2023 el BCRA debía en concepto de LELIQs más otros papeles remunerados, la suma de 11.687.297.000.000 pesos que devengan un interés diario de 24.860.699.533 pesos (*).

Los pagos a los bancos han sido crecientes durante el año (cada día se pagó más que el anterior). El punto medio entre el 18/03/2022 (**) y el 17/03/2023 es de 15.232.852.396 pesos (no es exacto). En 365 días se pagaron intereses de LELIQs y otros por $ 5.559.991.124.540.

En ese caso el Estado Nacional se lleva en un año el equivalente a lo que los bancos se llevan en 86 días. O lo que es lo mismo (365/86= 4,24), el BCRA le dio a los bancos cuatro veces más que al estado. De cada 5 pesos, le dio 1 al estado nacional.

Entonces, les pregunto, queridos lectores: ¿por qué emite el BCRA? ¿Para financiar al Estado o para financiar a los bancos?

El problema no es el gasto público [1], sino que el BCRA emite para darle dinero a los bancos mediante LELIQs, encajes remunerados y otros instrumentos.

Emisión monetaria del BCRA

https://www.bcra.gob.ar/Pdfs/PublicacionesEstadisticas/panhis.xls 

Como pueden ver en el cuadro, la circulación monetaria a febrero 2022 era de 2.686.579 millones de pesos y a febrero 2023 de 4.087.141 millones de pesos.  Es un aumento de 1.400.562 millones de pesos, que exceden los $ 620.051 millones entregados al tesoro nacional; de hecho sólo el 44% de la emisión fue a manos del Estado.

Lo emitido no alcanza para pagar diariamente los intereses de Leliqs, por lo que semanalmente se capitalizan y hacen que la deuda se incremente.

Los pedacitos del elefante

La razón que las autoridades monetarias aducen ante el público para mantener en permanente crecimiento el monto de Leliqs (ex Lebacs) es que si se deshace esta operatoria, todo ese dinero iría al dólar, el valor de la divisa se dispararía y los precios de la economía estallarían. Híperinflación, catástrofe, muerte. ¿Es verdad?

Veamos.

En primer lugar, en Argentina hay inflación con un precio de dólar controlado por el gobierno (que manipula tanto el oficial como el paralelo). El precio de la divisa ha crecido menos que la inflación y aun así ésta persiste. El precio de la divisa como razón de inflación es un argumento debilitado cuando no irrisorio.

Segundo punto: si mañana el estado devuelve todo el dinero de las Leliqs ¿iría ese dinero a comprar dólares? Si es así, ¿cuánto del total tendría ese destino? Acá es donde debemos cortar al elefante en pedacitos.

Ya dejé en claro que creo que el aumento del valor de la divisa no es el motor de la inflación. A mí no me preocupa que el dólar esté alto. Me preocupa/quiero: 1. que el Estado argentino no emita dinero y/o deuda; 2. que los impuestos sean razonables para no desfinanciar a las familias y empresas (para felicidad del Pueblo y para la grandeza de la Patria).

El estado mediante el BCRA debe Leliqs y otras obligaciones a los bancos. A su vez ese dinero los bancos se lo deben a alguien. ¿A quién?

El BCRA emite un informe periódico denominado, Informe de Estabilidad Financiera. En el gráfico 16 de Informe de Estabilidad Financiera – Diciembre de 2022, con datos a septiembre del mismo año, publican el fondeo de los bancos. En criollo, a quién pertenece el dinero que los bancos tienen y luego prestan – o no – a terceros (Estado, familias, empresas). Afirma: «A septiembre casi la mitad del fondeo total correspondía a depósitos del sector privado en moneda nacional (49,9%)…».

¿Cómo se lee este cuadro? Segunda columna desde la izquierda con la leyenda “sep-22”.

    • En rojo están los depósitos a la vista del sector privado. El 23,9% del origen del dinero que los bancos tienen proviene de los saldos en las cajas de ahorro (pagan 1% ó 2% interés anual) o de las cuentas corrientes (0% de interés) que depositan personas o empresas.
    • El otro 25% – color coral o rosa fuerte (aclaro para los varones) —viene también de familias o empresas— pero sí pagan algún interés (plazos fijos).
    • El 8,4% en verde está en moneda extranjera. No se puede ir a dólar, porque ya está en dólar.
    • El 11,7% en color crema son depósitos en moneda nacional del sector público (estado nacional, provinciales, municipales, organismos estatales). Ese dinero se va a ir al dólar sí y sólo sí el estado así lo resuelve.
    • Otros pasivos – Dios sabe.
    • PN, color celeste por 17,9%. Es el dinero propiedad de los bancos. Ese dinero puede estar en pesos o divisas (hay regulaciones al respecto).

Voy a traducir esta larga explicación. De todo el dinero que los bancos reciben (“fondeo”), una parte se la prestan al estado (LELIQs y bonos del tesoro) y otra se la prestan a privados (financiación saldo tarjeta de crédito, compra de motos en cuotas, financiación de empresas para capital de trabajo o inversiones), cartera de inversiones (ONs y acciones que cotizan en bolsa).

Lo único que nos preocupa de todo esto ahora son las LELIQs. El 23,9% del fondeo viene de cuenta corriente y caja de ahorro de empresas y personas (rojo). Si se cancelaran las LELIQs y este dinero volviera a sus propietarios originales, ¿éstos comprarían dólares? En realidad no. Tienen los pesos disponibles porque los necesitan a la brevedad. El trabajador que va a comprar sus U$D 200 mensuales, ya los compró cuando cobró. El resto se queda en pesos porque lo necesita durante el mes. La empresa, el comercio, el consorcio de copropietarios que tiene dinero en cuenta corriente, es porque lo quiere tener en pesos para usarlo dentro del mes: (pago de sueldos, mercadería, proveedores, impuestos, servicios). Si hubiera querido comprar dólares, ya lo hubiera hecho.

Por lo tanto, diría, que el 23,9% (rojo) de las LELIQs, si se redimieran (si se pagaran en efectivo), no irían a dólares.

 

Depósitos a plazo del sector privado por 25,1% (rosa fuerte). Ése dinero sí puede ir al dólar si el BCRA mañana les pagara todos los pesos juntos. Es dinero a plazo, como inversión (probablemente para defenderse de la inflación). Ahora bien, las empresas tienen el dinero a plazo (o en Fondos Comunes de Inversión que a su vez invierten en plazos fijos) como forma de contrarrestar el impacto de la inflación en su capital de trabajo [2]. ¿Si el BCRA redimiera las LELIQs (si cancelara su deuda) en efectivo, cuánto de ese dinero iría a comprar divisas? Una parte sí, probablemente. Pero otra parte no, porque ese dinero tiene como destino pagar proveedores, impuestos y salarios; por lo que la empresa necesita esos pesos en algún momento entre mañana y los próximos 60 días. Si realmente fuera dinero atesorado (para pagar dividendos, por ejemplo), ya hubiera comprado dólares —o hubieran comprado futuros en ROFEX— y los tendría depositados en dólares en su cuenta corriente (8,4% del fondeo total – color verde). Con lo cual diría que sólo una fracción de ese monto de efectivo iría a comprar dólares. ¿Cuánto? No lo sé. Pero con un estudio de las obligaciones de pagos de las empresas (elegir las 20 más grandes del país), uno puede hacerse una idea de cuánto dinero iría a dólar y cuánto se usaría en pesos en el desenvolvimiento normal de las actividades familias y empresas. Supongamos que la mitad (es demasiado, pero con margen de seguridad), va a dólar.

Del resto de los ítems, excepto “otros”, por 9,4%, ninguno es un problema. Paso a justificar: 8,4% ya está en divisa. 11,7% pertenece al estado, por lo que el mismo estado dispone si va o no a dólar. 17,9% pertenece a los bancos y su destino está fuertemente regulado por el BCRA.

Por lo cual, de mi gigantesca bola de nieve de LELIQs mi problema se reduce a no saber qué puede pasar con “otros” por 9,4% y una porción de los depósitos a plazo fijo de personas y empresas. Supongamos la mitad de eso, 12,5%.

9,4%+12,5%= 21,9%. Mi enorme problema ya se redujo a un quinto del mismo; con amplias posibilidades de a su vez ser gestionarlo.

Señores, si no se quiere desarmar la bomba de LELIQs es simplemente porque no hay voluntad.

Una vuelta de tuerca más al “fondeo”

El gráfico 17 del informe del BCRA citado nos cuenta un poco quiénes son los privados que ponen su dinero en los bancos. El 44% son las familias (cuenta sueldo, jubilaciones, dinero personal, etc.). 12% son PyMes. 22% grandes empresas.

 

20% son FCI. En general éstos colocan gran parte de sus carteras en plazos fijos que a su vez van a LELIQs (el detalle está en poder tanto de la CNV como del BCRA). Es el refugio general para defenderse de la inflación, tanto para empresas como para las personas físicas. Es donde los particulares ponen la recaudación por facturación hasta el momento que haya que pagar sueldos o impuestos y no perder la carrera contra la (alta) inflación. Si bien una parte de este monto podrá terminar en dólares, el resto, claramente, sus propietarios lo necesitarán en algún momento de los próximos 90 días para hacer frente a sus obligaciones. Por lo cual, nuevamente, el dinero que iría a divisas es mínimo.

Respecto al 34% que tienen depositado PyMes y grandes empresas, cabe la explicación anterior. Una parte del dinero recibido por la cancelación definitiva de las LELIQs pudiera ser distraída en atesoramiento (dólares) pero la mayoría irá a las obligaciones comerciales en las próximas semanas. Lo que quisieron atesorar, ya lo hicieron (8,4% —en verde—).

Puede haber dinero especulativo (alias carry trade alias bicicleta financiera) en LELIQs u otros bonos del Tesoro en pesos de corto plazo. Se denomina así a quienes vienen, traen dólares, los venden por pesos, colocan esos pesos a altas tasas a corto plazo, rezan todos los días para que justo en ese momento no haya una maxidevaluación y el día de vencimiento deciden si renuevan o si dejan de jugar a la ruleta rusa y compran dólares con los pesos obtenidos [3]. Si se desarman las LELIQs la única alternativa que queda para estas operaciones serán los bonos del Tesoro en pesos a corto plazo [4]. Nos ocuparemos de eso otro día.

Propuestas

Sugiero que el gobierno —éste o el próximo— desarme para siempre las LELIQs y cualquier otro engendro del infierno similar.

Sugiero que el gobierno – éste o el próximo – no nos corra más con el cuco de “el dólar se va a disparar”. Ya estamos todos grandes.

Sugiero que el gobierno —único responsable de la bicicleta financiera— no vuelva nunca más a usar este artilugio.

Propuestas Operativas

No aconsejo un nuevo plan BONEX por las razones explicadas anteriormente. Gran parte del dinero prestado al BCRA proviene de depósitos a la vista de gente y empresas que necesitan esos fondos para sus pagos habituales en el correr del mes.

Lo mismo respecto del 25% de dinero a plazo entregado a los bancos por personas físicas, PyMes, grandes empresas o fondos comunes de inversión. Es el capital de trabajo o las disponibilidades de todos ellos, que necesitarán en algún momento entre esta semana y los próximos 60 ó 90 días. Imponer un bono a mediano o largo plazo significaría cortar la cadena de pagos de toda la economía. Sugiero redimir las LELIQs con disponibilidades inmediatas. Eventualmente, para empresas, y como caso extremo, con un plan de pagos semanal con no más de 60 días en total. Y sólo si hiciera falta, cosa que no creo.

Respecto al estado (11,7% en crema) [5]

Darles a los organismos estatales un bono que venza el 11 de diciembre de 2023 para que la próxima administración decida cómo actuar. Caso por caso se puede pre-cancelar este nuevo bono si hubiera que hacer frente a alguna obligación particular (pienso en el INVAP o similares que puedan tener un vencimiento específico no corriente).

Respecto al dinero propio de los bancos (17,9% en celeste): el BCRA regulará cuánto podrán convertir a dólares y cuánto no.

En resumen: propongo redimir las LELIQs en su totalidad en dinero contante y sonante.

Eventualmente, una pequeña fracción del total, en ocho pagos semanales para empresas [6]. No hacerlo implicará cortar los pagos de la economía.

Capital de trabajo de PyMes y profesionales independientes: propongo una intervención de la secretaría de comercio por 90 días que obligue a las grandes empresas oligopólicas u oligopsónicas a pagar dentro de los 7 días a sus proveedores PyMes y servicios personales (sistemas, abogados, contadores, personal contratado). Pienso en las usinas lácteas y los tambos, las PyMes que proveen a supermercados y cobran a 90 días; los profesionales a los que les duermen sus facturas. El objeto de esta medida sería acelerar la circulación por la cadena de pagos y evitar que las empresas grandes se vean tentadas a comprar dólares por 60 días “a ver qué pasa”. Por el contrario, atomizaría en toda la economía la decisión de pasar a dólar o no. La consecuencia final es que el estado redimiría la deuda para recomponer la cadena de pago de las empresas y familias; no para que los gerentes financieros se ganen un bono de fin de año.

Consecuencias
    • Se apagará el gran motor de la inflación que es la deuda diaria del BCRA. Bajará la tasa de interés de la economía, que será la resultante entre oferta y demanda del sector privado y no un piso arbitrario impuesto por la autoridad monetaria.
    • Se acabará la gigantesca transferencia de riqueza entre familias y PyMes a jugadores con más espaldas. Una tasa mínima alta impuesta por el estado implica: a. inflación; b. alto costo de financiación para capital de trabajo (PyMes) y para saldo de tarjeta de crédito (familias). Ambos castigan a los eslabones más débiles de la Argentina: la inflación a quienes viven de un ingreso fijo (beneficiarios planes sociales, empleados, jubilados y pensionados); las altas tasas de interés a quienes deben financiarse por encima del 100% anual lo que en principio les come el capital de trabajo y finalmente los lleva a la quiebra.

Por todo ello, pero principalmente por la fijación de una demencialmente alta tasa de interés como piso de la economía, es que este juego del infierno debe terminar.

 

Notas

[1] El déficit fiscal y el exceso de gasto es un problema en sí mismo. No porque obligue a emitir pesos o deuda sino porque es un desperdicio de recursos que estarían mejor en poder de las familias en lugar de estar en las manos de funcionarios para que estos gasten en banalidades o para que se queden con una parte y lo atesoren en sus patrimonios personales.

[2] Es una lucrativa fuente de dinero para algunas empresas. Mediante el artilugio de demorar pagos a proveedores, quedarse unos días con el dinero, tienen ganancias nominales, que pueden o no ganarle a la inflación. Lo que es una ganancia para algunos es quitarle el capital de trabajo a pymes y profesionales autónomos. Ejemplo: los 45 días que tardan las usinas lácteas en pagarle a los tamberos. Con las tasas actuales de inflación resulta en una matanza generalizada de pymes. Las grandes empresas a veces deberían evaluar los pro y contras entre una ganancia momentánea y la posibilidad de quedarse sin proveedores por toda la eternidad.

[3] Durante el principio del gobierno de Macri vinieron fondos de inversión a jugar a esto. No sé hoy cuánto dinero puede haber en esta condición, pero imagino que las autoridades monetarias poseen esa cifra. No creo que hoy sea mucho.

[4] Desaconsejo fuertemente que el estado nacional en la forma del Tesoro Nacional, traslade el carry trade alias bicicleta, esto es, el procedimiento descripto, a los bonos del Tesoro de corto plazo. Cortar las LELIQs es para cortar este mecanismo, no para trasladar el problema desde una dependencia del gobierno a otra.

[5] Muchachos: ¿cobran impuestos por adelantado para luego poner el dinero a rendir en el banco (11,7% del total)? No legislen si han bebido. Le quitan el capital de trabajo a comercios, pymes, grandes empresas. Cobran por adelantado el impuesto a las ganancias a los trabajadores. Luego van y lo ponen a plazo en Banco Nación o Banco Ciudad o Banco Provincia. Realmente habría que colgarlos a todos por hacernos infelices. Recuerden: por la felicidad del Pueblo y la grandeza de la Patria.

[6] Soy sumamente renuente a este procedimiento. Lo considero innecesario por todo lo antepuesto.

Referencias

Oficina de Presupuesto del Congreso. Operaciones de deuda pública

https://www.opc.gob.ar/operaciones-de-deuda-publica/operaciones-de-deuda-publica-diciembre-y-acumulado-2022/

BCRA, Informe de Estabilidad Financiera – Diciembre de 2022, https://www.bcra.gob.ar/PublicacionesEstadisticas/IEF0222.asp

 

Lectura relacionada

Mis pesos, tus pesos, nuestros pesos

http://restaurarg.blogspot.com/2022/07/mis-pesos-tus-pesos-nuestros-pesos.html

 

Citas

(*) Fuente: Ricardo Inti Alpert en base a datos del BCRA, 17 de marzo de 2023.

(**) Fuente: ídem anterior, 18 de marzo 2022.

Artículo publicado el 18/03/2023 por Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/03/el-elefante-se-come-en-pedacitos.html