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LEONOR DE AQUITANIA

Iris Speroni*

Los plebeyos exigimos cosas mínimas como una moneda estable, para ahorrar y para hacer cuentas.

 

Leonor de Aquitania (1122-1204), mujer bella, culta, riquísima, con una fuerte personalidad, independiente, corajuda e inteligente, fue duquesa de Aquitania y Guyena por derecho hereditario. Se casó con el rey de Francia, con quien tuvo dos hijas. Los esposos participaron de la Segunda Cruzada. Luego se divorciaron (no pregunten).

Poco después Leonor se casó con el heredero al trono de Inglaterra, diez años más joven que ella y muy buen mozo. Por un tiempo vivieron un romance apasionado y tuvieron ocho hijos, cinco varones y tres niñas.

Uno de los varoncitos fue Ricardo Corazón de León. De adulto resultó ser un hombre muy culto, de buen porte (1,96 m de alto), gran contextura, entre rubio y pelirrojo, como su madre, y de ojos claros. Gran y valiente guerrero.

Ricardito decidió él también ir a su propia cruzada, como lo hizo su mamá. Le fue muy bien, excepto por la vuelta. Los vientos desviaron su buque, el cual encalló en Corfú. Eligieron volver a pie vía Europa Central. Fue secuestrado por el duque de Austria (a pesar de una regla papal que daba paso franco a todos los cruzados en la Cristiandad) y luego vendido al emperador de Alemania, quien pidió rescate a doña Leonor.

 

El sistema impositivo medieval era de abajo hacia arriba y lleno de distintos impuestos. Desordenado y caótico. Los recaudadores se hallaban a la base de la producción y una parte se lo quedaban y el resto se lo subían al estrato superior.

El rey le pedía sumas fijas (y servicios en especie) a los condes y duques, éstos a su vez a los marqueses y barones y de ahí a los señores menores, que se lo exigían a los arrendatarios y éstos a sus siervos. Y el dinero subía de vuelta toda la escalerita.

La Edad Media se vio en conflictos impositivos permanentes con revueltas periódicas que eran sofocadas, a veces con negociaciones, otras a degüello. A los diezmos y tributos sobre la producción se sumaban otras gabelas como peajes, permisos para las ferias comerciales y arrendamientos varios.

La gran diferencia de los normandos (como Leonor) es que eran muy buenos recaudando impuestos. Desde un punto de vista administrativo, eran superiores a todos sus contemporáneos de la Cristiandad.

 

El monto del rescate fue monumental, de 100.000 marcos, equivalente a cinco veces las rentas anuales de Inglaterra. Leonor se puso la campaña recaudatoria al hombro y exprimió hasta las piedras. Puso impuestos gravosísimos a todos sus súbditos y se llevó todo el oro y plata de las iglesias. Finalmente logró juntar el dinero necesario (cuyo precio final aumentó en ese lapso) y rescató a su hijo. Con sus 72 años y rodeada de su séquito, cabalgó a su encuentro.

Existen numerosas biografías de Leonor de Aquitania, una mujer excepcional. Recomiendo la de Jean Flori, para el que le entusiasmen estas cosas.

Impuestos y monedas

Toda persona, naturalmente, intenta pagar la menor cantidad de impuestos posible. Lo hace únicamente por miedo a represalias, ya fueran, en su momento, del señor feudal u hoy de la AFIP, Rentas o algún juez tributario.

Los kirchneristas, entre ellos la actual vicepresidente, se quejan en público, de que la población busca “el dólar” y que deben encontrar formas de forzar a que la población use el peso.

Pertenecen a la escuela de economía política de la facultad de ciencias económicas de la UBA, replicada en todo el país; es el pensamiento dominante de la UCR capital, la que ha tenido el BCRA bajo su dominio desde 1983 hasta hoy, excepto un pequeño interregno bajo Carlos Menem.

Cuando las personas huyen del peso, en realidad, eluden pagar el impuesto inflacionario.

Cuando las autoridades, con caras serias, pasean por los canales de TV y con aire solemne enumeran las bondades del uso del peso y maldicen el gusto popular por el dólar; en realidad lo que quieren es que no huyamos del impuesto inflacionario.

La vicepresidente, en numerosas oportunidades, se lamentó de tener que lidiar con una economía bimonetaria y todos los sufrimientos que a ella, como gobernante, le acarrea la tozudez de la población, que no se deja robar o trata de limitar el daño.

El cepo cambiario es un mecanismo que defiende al mercado de dólares a mitad de precio del ingreso de la plebe y que quede circunscripto únicamente a los elegidos. Esto crea una sociedad muy injusta, donde una parte (muy pequeña) de la población, accede a un botín de U$D 88.446 millones anuales los cuales compra a mitad de precio, y otros que deben pagar el precio pleno. Asimismo, esos dólares a mitad de precio son arrebatados por el gobierno a otros conciudadanos, quienes se ven expoliados de su riqueza y capital.

A lo que se suma el multimillonario impuesto inflacionario y las infinitas trabas que impone el gobierno para impedir que las personas se protejan del mismo.

Este gigante expolio del pueblo argentino por parte de sus autoridades-interventores, en el que son cómplices por igual los partidos gobernantes (FdT/UP-UCR/JxC), alternadamente por comisión u omisión, según el momento, es lo que ha cristalizado la pobreza, la caída del nivel de vida de la población en todos los estratos sociales, la falta de inversión y la desesperanza.

Tanto el dinero del que se apropian mediante la compra de divisas a mitad de precio, como el del impuesto inflacionario, cuyo destino es pagar los intereses de Leliqs (U$D 150 millones diarios) es repartido entre pocos: 1) los gobernantes, porque nadie trabaja gratis, y 2) los mal llamados “amigos” que son básicamente sus patrocinadores y cómplices.

La consecuencia para la población es la ausencia de crédito, de inversión, de trabajo, sueldos miserables y la imposibilidad de efectuar inversiones familiares, como el techo propio.

El statu quo es, hoy por hoy, un negocio demasiado grande como para perderlo. Toda negativa a ser expoliados es y será castigada.

La rebelión de los plebeyos

Nosotros, los de a pie, somos quienes no tenemos acceso a dólares a mitad de precio, ni vivimos de cobrar impuesto inflacionario y sufrimos por la falta de inversión, crédito y trabajo en nuestro país.

Cada tanto los plebeyos nos rechiflamos y queremos la destrucción de las herramientas de nuestros tormentos; llámese la eliminación de la inflación, la eliminación de las distorsiones en el mercado cambiario (vulgarmente denominado “cepo”) y exigimos cosas mínimas como una moneda estable, para ahorrar y para hacer cuentas (unidad de cuenta), la existencia de crédito con tasas de interés razonable. Una estabilidad mínima para poder darle de comer a la familia y soñar un futuro.

Hasta eso nos niegan. Y lo hacen porque el botín es demasiado grande para abandonarlo.

No lo harán pacíficamente. Si fueran inteligentes, bajarían sus pretensiones y comerían y dejarían comer; pero ese tren ―el de la razonabilidad― ya pasó hace mucho tiempo. Ahora están en medio de una orgía desenfrenada, que sólo finalizará como sucede en La Caída de los Dioses, de Luchino Visconti.

Por lo tanto lo único que nos queda es echarlos y poner en orden un poco la casa.

Lo que hay que hacer

Necesitamos una unidad de cuenta, para firmar contratos, para contabilizar inventarios y liquidar impuestos, para valorizar salarios y cuentas a pagar y cobrar. Por suerte tenemos muchas opciones:

    1. Dolarizar. Esto es nominar en dólares los precios de las cosas.
    2. Libre intercambio de divisas entre privados, cada uno a su gusto (esto último está previsto en Código Civil).
    3. Adoptar o el peso oro o el peso fuerte como unidad de cuenta y para nominar contratos (no para cancelar las transacciones). Puedo firmar un contrato de alquiler en peso oro/fuerte; no necesito cláusula de actualización, se paga según el valor del peso oro/fuerte al día de cancelación. Es útil para cualquier cuenta a cobrar, ya sea mercadería entregada a un supermercado o para los tamberos para el litro de leche entregada a la usina. Es particularmente recomendable para la liquidación impositiva (presentar DDJJ en moneda fuerte).

Les cuento la que más me gusta: un mix de las últimas dos: contratos en pesos fuertes u oro y publicación diaria de valuación del mismo, tanto para contratos entre privados como para la liquidación (no el pago) de impuestos. Dejar como monedas de cancelación: el peso actual que convivirán con un conjunto de monedas (todas las monedas del Mercosur, yuanes, yenes, dólar, euro). Las deudas se cancelan en divisa o en pesos actuales, según la cotización del día. Libre comercio de divisas sin intervención del BCRA. Los bancos podrán tener cajas de ahorro en diferentes monedas. No se podrán emitir cheques en divisa, ni los bancos podrán prestar dinero en divisa excepto el capital propio (para evitar otra crisis del 2001; que pierdan de la suya). El Estado Nacional y los estados provinciales y municipales sólo podrán cancelar sus obligaciones en pesos actuales y cobrarán los impuestos (excepto los aduaneros) en pesos.

En cuanto a las Leliqs, hay que terminarlas para que nunca más se pague un interés por letras del BCRA. Con eso deberíamos terminar con uno de los enormes negocios de los amigos del poder.

Degollados estos dos grandes males que sufrimos los plebeyos, podremos empezar a respirar. Sólo nos quedarían: terminar con la deuda externa, acumular oro en el Tesoro y pertrechar a las Fuerzas Armadas.

En cuanto a nosotros, estamos cansados de pagar el rescate de Ricardo Corazón de León todos los santos años, sin que el príncipe aparezca nunca. Para mí que le mexicanearon el rescate a doña Leonor.

Queremos que nos queden unos pesos en el bolsillo, para ahorrar, construir el rancho, mandar los chicos a la escuela, comer asado cuando vamos a ver el TC, comprar un fitito o un Renault 4, e irnos una semana a Santa Teresita. Esto es: la felicidad.

Y recuerden, todos las decisiones deben pasar por dos filtros: la felicidad del Pueblo y la grandeza de la Patria.

 

Varios temas ya los traté antes. Les paso los artículos, por si no los han leído y les despierta curiosidad.

 

¿Cómo es el tema de las LELIQs?

LA otra IFE

http://restaurarg.blogspot.com/2021/01/la-otra-ife.html

¿Cómo es eso del impuesto inflacionario? ¿Cómo me cobran un impuesto con la inflación?

Seis latitas de atún

http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/seis-latitas-de-atun.html

¿Cómo es eso de que compran dólares a mitad de precio? ¿Quién pone la diferencia? ¿Quién se lo queda? ¿Cuánto nos perjudica?

El tamaño del botín

http://restaurarg.blogspot.com/2021/02/el-tamano-del-botin.html 

2022: el año que no estuvimos en peligro

http://restaurarg.blogspot.com/2023/02/2022-el-ano-que-no-estuvimos-en-peligro.html

¿Qué son el peso oro y el peso fuerte?

Unidad de cuenta

http://restaurarg.blogspot.com/2022/05/unidad-de-cuenta.html

 

Lecturas recomendadas

Todas las de @intialpert sobre los intereses de las Leliqs.

Les paso las últimas:

Un alarde de mala praxis

http://restaurarg.blogspot.com/2023/08/un-alarde-de-mala-praxis-monetaria.html

Los pesos crecen, crecen y crecen

http://restaurarg.blogspot.com/2023/08/los-pesos-crecen-crecen-y-crecen.html

Pesos al borde del naufragio

http://restaurarg.blogspot.com/2023/08/pesos-al-borde-del-naufragio.html

 

Artículo publicado el 02/09/2023 por Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/09/leonor-de-aquitania.html.

NOS DESPRECIAN

Iris Speroni*

Les cobraron medio mes de alquiler a las personas más vulnerables de la Argentina, esto es, quienes no tienen techo propio.

 

Actualmente se encuentran disponibles los datos de recaudación de la AFIP correspondiente a los meses enero-julio del corriente año 2023.

En ese lapso, gobierno federal recaudó $ 21.254.362.780.425,60. Esto es veintiún y un cuarto de billones (continentales) de pesos.

O lo que es lo mismo, un montón de dinero.

Si sacamos de esta cifra la recaudación de la Seguridad Social (porque no es dinero del gobierno, sino de los trabajadores activos y pasivos), hablamos de $ 15.045.074.487.843,40. Esto es quince billones de pesos.

La composición de la recaudación

Elaboración propia en base a datos de la AFIP.

Elaboración propia en base a datos de la AFIP.

Como se puede comprobar, la mayor fuente de ingreso del gobierno federal es el IVA. No es el mal llamado impuesto a las ganancias (el salario no es ganancia), no es el impuesto a los bienes personales.

IVA – Impuesto al Valor Agregado

Es un impuesto con la particularidad de que lo pagan únicamente las personas físicas. En criollo, los seres humanos. Las empresas no pagan IVA. Así que el 44% de los ingresos del Estado ―al menos, ya lo veremos (*)― proviene de las compras de supermercado, calzado, luz y teléfono, útiles escolares, cargar nafta y el pago de los honorarios de la kinesióloga.

Así que cuando alguien le diga que el gobierno “cuida” el precio de los alimentos, o que el Estado gasta en tal o cual cosa porque “da” derechos o “protege” a la población, debe saberse que gran parte viene de los bolsillos más débiles.

Cuando el Estado paga intereses por bonos del Tesoro (**) ya sea a fondos de inversión extranjeros o al BAPRO, el 44% de los intereses proviene de las personas que compran una pizza. Debemos razonar de igual manera frente a los despilfarros del Ministerio de la Mujer o los canapés de la ministra de Trabajo.

El IVA es un impuesto que no todos los países tienen. Los que sí, como los europeos, no gravan a los alimentos. En realidad, casi ningún país del mundo paga IVA o ningún otro impuesto sobre la comida. Acá se da la paradoja que los recitales de Dua Lipa o Luis Miguel no pagan IVA pero sí lo hace una lata de tomate. Esto para tener una dimensión del desastroso sistema impositivo que nuestros gobernantes nos supieron, quisieron y pudieron dar.

Ingresos Aduaneros

Los ingresos aduaneros son del 9% de la recaudación total. Si alguien sostiene: “no se pueden quitar los derechos de exportación – DEX”, lo que en realidad quiere decir es “no quiero quitar los derechos de exportación”. Las razones son varias y dignas de hablar en otro momento.

Debemos aclarar que no constituyen una parte significativa de la recaudación total y que los ingresos aduaneros ―si respetamos el espíritu de Alberdi― deberían provenir de las importaciones exclusivamente y no de las exportaciones; al revés de lo que sucede. Dicha anomalía (que los ingresos por aranceles de exportación sean mayores que los correspondientes a la importación) lo postulé en EL MISTERIO DE LA ADUANA.

Si llegáramos a tener un comercio exterior robusto, obtendríamos altos ingresos aduaneros aún si aplicáramos alícuota cero a las exportaciones y aranceles bajos a las importaciones.

Resto de los impuestos

Existen innumerables impuestos que la AFIP agrupa como puede. Son impuestos a los combustibles, al tabaco, uno muy gracioso que se llama “adicional de emergencia cigarrillos”, internos que van desde impuestos al alcohol, a las gaseosas ―si uno decide no tomar cerveza o vino, le cobran por tomar Coca-Cola―, a las alfombras (sí, lo puso el nunca suficientemente vituperado Machinea), a las entradas de cine, a la promoción cooperativa y mil cosas más. Algunos rubros alcanzan el 0,0146% del total. Todos los agrupados en “Resto” constituyen el 0,37% de los ingresos

Traduzco: arruinan la vida de miles de personas, que destinan tiempo a completar formularios interminables, para recaudar monedas.

Numerosas personas han denunciado la existencia banal de innumerables impuestos. Pocos llaman la atención sobre la carga pública que implica para los contribuyentes las horas de trabajo dedicadas a llenar decenas y decenas de formularios. Uno, pero no el único, que lo ha reclamado, es el candidato Milei.

Sin embargo, quiero resaltar que hará un mes, la vicepresidente de la Nación y ex presidente, Cristina Fernández, en un discurso a sus conmilitones, remarcó que existían decenas de impuestos de los cuales el costo administrativo para el fisco es superior a la recaudación. Más allá que uno lamente que no lo haya pensado en sus ocho años de gobierno o en sus tres años y medio de ocupar la segunda magistratura del país, debemos celebrar su epifanía. Lo valioso de las declaraciones de la líder del Frente de TodEs, es que se pueden invocar sus palabras al momento de decidir la supresión de impuestos absurdos y pedir el voto a los diputados de su subgrupo político.

La mezquindad de los políticos argentinos

Nuestros políticos gravaron la transferencia de inmuebles con un 1,5% del valor de la transacción. La recaudación por este impuesto es del 0,0855% del total. Es decir, le generan una barrera más a una persona que quiere acceder a la propiedad ―como si los salarios de hambre no fueran obstáculo suficiente―. Si alguno de ellos llegara a retrucar que no se cobra en la primera vivienda, díganle que es un cínico y mentiroso, porque sí lo debe pagar el vendedor y por supuesto, lo va a cargar al precio de venta.

La razón por la que la nefasta ley de alquileres fue votada por unanimidad es porque forzaba al pago de un impuesto del 1,5% sobre el valor del contrato, con la particularidad de que se debía pagar en su totalidad en el momento cero, aún si después hubiera una precancelación. Si el contrato es a 36 meses, entonces el impuesto es del 1,5%x36 el valor de un mes de alquiler, 54%, un poco más que medio mes de alquiler adicional, que va al fisco federal.

Los diputados ―representantes del Pueblo de la Nación― dieron apoyo a esta ley, porque le sacaron medio mes de alquiler a las personas más vulnerables de la Argentina, esto es, quienes no tienen techo propio. Son muy malas personas. Insensibles a los sufrimientos del pueblo. Les deseo toda suerte de calamidades; por la simple razón de que ellos las arrojan a baldazos sobre todos nosotros.

Impuestos a futuro

Propongo:

  • eliminar IVA a los alimentos, forraje, combustible y servicios públicos, con el fin de abaratar el costo de vida de las personas.
  • reducir a una alícuota del 10% de IVA al resto de los productos. El incremento de recaudación vendrá por mayor nivel de actividad.
  • eliminar las exenciones de pago de IVA. Nadie deberá estar exento.
  • que ganancias cuarta categoría se empiece a pagar a partir de que el sueldo del contribuyente alcance el nivel del magistrado (juez o fiscal) mejor pago del país.
  • alícuota de ganancias para las empresas del 15% y del 10% para las personas físicas.
  • eliminar todo el chiquitaje impositivo, en particular lo que hace al acceso a la vivienda propia.
  • los aranceles aduaneros deben enfocarse en la importación y recaudarse en divisa, así como IVA y Ganancias aduaneros.

Toda la recaudación en divisa deberá destinarse a la cancelación de deuda pública en divisa y a la compra de pertrechos militares.

Para la felicidad del Pueblo y la grandeza de la Patria.

 

Fuentes

AFIP Estadísticas

https://www.afip.gob.ar/institucional/estudios/serie-anual/

Lecturas recomendadas

Decime cuánto me querés

https://restaurarg.blogspot.com/2023/01/decime-cuanto-me-queres.html

Eliminar la coparticipación federal

https://restaurarg.blogspot.com/2023/05/eliminar-la-coparticipacion-federal.html

El misterio de la Aduana

https://restaurarg.blogspot.com/2023/02/el-misterio-de-la-aduana.html

Seis latitas de atún

https://restaurarg.blogspot.com/2022/04/seis-latitas-de-atun.html 

Deuda pública

https://restaurarg.blogspot.com/2022/08/deuda-publica.html

El Conde Drácula

https://restaurarg.blogspot.com/2021/09/el-conde-dracula.html

 

Notas

(*) Los impuestos internos, por lo general, también sólo los pagan las personas físicas, como el tabaco (las empresas no fuman), o las bebidas alcohólicas o las gaseosas.

(**) El Estado federal tiene deuda financiera de varios tipos. Una, son los bonos del tesoro, que pueden estar nominados en pesos o en divisa. Los intereses y otros cargos se solventan con la recaudación del gobierno federal. Otra, es la deuda del BCRA, mediante Leliqs y remuneración de encajes. Se paga con inflación (SEIS LATITAS DE ATÚN, https://restaurarg.blogspot.com/2022/04/seis-latitas-de-atun.html). Por último hay préstamos directos de otros gobiernos o de organismos multilaterales. Ver DEUDA PÚBLICA https://restaurarg.blogspot.com/2022/08/deuda-publica.html ).

 

Artículo publicado el 26/08/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/08/nos-desprecian.html

AHORRO

Iris Speroni*

Reducir significativa y sostenidamente la deuda pública, tanto en pesos como en divisa, permitirá liberar recursos para otros usos.

 

Los habitantes de la República Argentina nos sentimos agobiados por el peso de la deuda nacional. La misma está emitida tanto en divisa como en pesos.

La deuda —externa o no— es una excusa servida en bandeja, para que los gobernantes tomen decisiones aparentemente arbitrarias. Le sirve a los tenedores de deuda, le sirve a los gobernantes para ceder ante sus pretensiones. Es una historia muy vieja, incluso anterior al nacimiento de la República.

La deuda también es un gran negocio. Cada vuelta de renegociaciones, canjes, emisiones, es una oportunidad para ofrecer y recibir sobornos por contratar comisiones de asesoramiento, estructuración, colocación, etc. También nada nuevo, desde Rivadavia a hoy. Existen innumerables casos presentados ante la Justicia, que siempre quedan en vía muerta.

El Ministerio de Economía de la Nación brinda informes periódicos y en algún momento, tiempo atrás, analicé la DEUDA PÚBLICA.

Entiendo que la Argentina, si quiere ser la octava potencia mundial y la líder del IMPERIO AUSTRAL, debe rescatar su deuda soberana en su totalidad y no endeudarse nunca más. Para lograrlo existen varias estrategias posibles, que escribiré en algún otro momento, o nunca, porque hay cosas que deben guardarse en el pecho.

Lo que sí debemos imperiosamente hacer es recuperar la capacidad de ahorro a nivel público y privado. En esta segunda categoría, hay que facilitar la construcción de estrategias de ahorro tanto para las empresas como para las personas.

Recuerden que tenemos sólo dos objetivos: la grandeza de la Nación y la felicidad del Pueblo.

Ahorro

Estrategias de ahorro del Estado

El Estado recauda en pesos en todos los casos. Propongo desdoblar la moneda de cobro de impuestos.

  • Que la recaudación aduanera sea en divisa. Que puede ser tanto en dólares como en la moneda de la transacción siempre y cuando esté limitada a una cartera posible. Propongo que las monedas admitidas sean:
    • Dólar,
    • Euro,
    • Real,
    • Yen,
    • Yuan,
    • Guaraní,
    • Peso Uruguayo,
    • Boliviano,
    • Rupia,
    • Rublo.

Se recaudarían en divisa tanto los aranceles aduaneros como los adelantos de impuestos asociados a la importación (IVA e Impuesto a las Ganancias). Ambos son proporcionales al valor del bien, por lo que son de fácil cálculo.

La recaudación total de la AFIP por todo concepto, incluida la Aduana, para el 2022, fue de 21.540.626.249.362,20 pesos.

Los ingresos aduaneros sumaron 2.456.761.931.898,75 pesos (línea 6 del cuadro). A esta cuenta habría que sumar el IVA aduanero y Ganancias aduaneras por 2.569.895.693.257,44 pesos, (líneas 1 y 2 del cuadro). Por lo cual, la recaudación en divisa pudo haber sido del 23% del total [1].

Fuentes: AFIP y Banco Nación.

De haberse aplicado mi propuesta de recaudación en divisa, el Estado Nacional hubiera recaudado 36.100.568.213,95 U$D en divisa en 2022. Sí, treinta y seis mil millones de dólares. Imaginen si el gobierno hubiera podido cancelar o no vencimientos de deuda externa. En dos años nos sacamos de encima al FMI.

    • En el 2022, la Argentina exportó 2.959 millones de dólares en oro y plata. Esta industria paga derechos de exportación, más otros impuestos (pocos, debido al código aduanero). Propongo cobrar en especie los impuestos existentes, esto es, en oro y plata. Si la totalidad de los impuestos por cualquier razón fueran del 10%, estamos frente a oro y plata equivalente a 296 millones de dólares.
      El resto de la recaudación continuaría en pesos, como actualmente.

Destino propuesto de la recaudación aduanera e impositiva

    1. La recaudación aduanera en divisa tendrá por únicos destinos:
      1. Repago de deuda externa nominada en divisa,
      2. Compra de armamento para las FFAA. Ahí tendremos el submarino que solicita César Shaffer.

2. La recaudación en oro y plata proveniente de la minería tendrá por único destino acumular reservas en metales preciosos y se prohíbe cualquier otro uso, por ejemplo, el pago de deuda.

3. La recaudación en pesos se destinará a los gastos corrientes e inversiones en cabeza del Estado.

A esto se le suma mi propuesta de cancelación inmediata de las LELIQs, una verdadera vaca en brazos que sostenemos todos.

Reducir significativa y sostenidamente la deuda pública, tanto en pesos como en divisa, permitirá liberar recursos para otros usos (inversión pública) y básicamente, ser libres de la injerencia externa.

Compraremos libertad.

Debemos desconfiar de quien propone endeudarnos con el FMI o el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo. Habitualmente, como vendedor ambulante de tren, el político de turno querrá contarnos las bondades de contraer ese crédito (hacer un hospital, desarrollar un barrio, extender cloacas). Es una trampa. Son instituciones intrínsecamente corruptas y sólo pretenden controlar las decisiones soberanas del país. Si queremos algo, ahorremos y lo construimos. Si necesitamos más plata, exportemos más.

Ahorro de las familias y empresas

Familias

Será obligatorio el uso del peso para el Estado, el que deberá saldar sus obligaciones y cobrar los impuestos domésticos —no aduaneros ni mineros— en pesos. Con ese dinero se pagarán proveedores, sueldos, jubilaciones, beneficios sociales e intereses de la deuda nominada en pesos.

En cambio, los particulares deben tener total libertad para comprar y vender cualquier divisa de su gusto y hacer contratos en la misma (lo que es permitido por el Código Civil). Los bancos aceptarán abrir cajas de ahorro (no cuentas corrientes) en las monedas listadas en un principio. No se podrán emitir cheques en divisa (para no generar argendólares) y los bancos podrán prestar dinero en divisa únicamente si es capital propio o para operaciones de comercio exterior (adelanto de exportaciones).

Esto permitirá que los trabajadores, y cualquier otro particular, ahorre ya sea en divisa, ya sea en metálico (oro o plata).

Adicionalmente, habrá un ahorro compulsivo, que podrá quedar bajo la administración de la ANSES, nominado en divisa o en metálico (oro o plata), correspondiente al PAGO ANTICIPADO DE LA INDEMNIZACIÓN.

Actualmente la UIA ha presentado una propuesta de indemnización con la que no estoy de acuerdo, porque creo que cercena derechos adquiridos. Tengo una propuesta que creo es mejor para los trabajadores y para las PyMes.

Reconozco que la ley actual presenta varios defectos: deja desprotegido al trabajador en caso de quiebra; aún si el empleador es solvente, los juicios llevan tiempo y en ese período el trabajador se encuentra desamparado; y en el caso de las PyMes, la resolución judicial es impredecible, lo que puede afectar la continuidad de la empresa. 

Así que con el fin de dar previsibilidad a las familias y a las empresas, propongo que los montos indemnizatorios actuales se mantengan (preaviso, un mes por cada año de antigüedad, vacaciones y aguinaldo), pero con las siguientes modificaciones: se pagará en todos los casos y no solamente por despidos sin causa, esto es: despido con causa, sin causa, jubilación, renuncia, accidente, muerte y cualquier otra. Será por el total. Con el fin de garantizar la disponibilidad de la indemnización, el empleador entregará al ANSES el 8,33% del salario todos los meses (un mes por cada año de antigüedad), lo que será contabilizado en una cuenta del trabajador como un ahorro. 

El trabajador instruirá al ANSES si con ese dinero quiere comprar oro, plata, divisa y cuál o una cartera de las opciones anteriores, lo que quedará depositado en una cuenta de inversión a su nombre. Tendrá ese dinero disponible al momento de la desvinculación. 

Al momento del efectivo despido/renuncia/jubilación, el empleador se limitará a pagar preaviso, aguinaldo y vacaciones.

Esta propuesta es en realidad el pago anticipado de la indemnización por desvinculación, con el ANSES como depositario hasta el efectivo momento.

En contrapartida el ANSES comprará divisas, oro o plata según la demanda de los trabajadores. En el caso del metálico podrá acumularse en las bóvedas del Banco Nación y auditarse (por trabajadores sorteados al azar) en forma diaria. 

Eso será ahorro en moneda dura, pero también ahorro acumulado, en particular en metálico, en territorio nacional.

Para tener una idea de montos, la masa salarial aportante al ANSES fue de 1.376.515.368.812,81 pesos en noviembre de 2022. De esos montos 1.027.820.288.528,23 pesos corresponden al sector privado. El 8,33% de esa cifra es 85.617.430.034 pesos cuyo equivalente los trabajadores en conjunto podrían ahorrar en divisa, oro o plata. O dicho de otra manera, el conjunto de trabajadores argentinos formales podrían ahorrar en oro el equivalente a 171 MM U$D mensuales = U$D 2.226 millones anuales, equivalente a nuestra producción anual de oro y plata. O dicho de otra forma, los trabajadores podrían comprar todo el oro y plata que se produce en el país, sin que salga ni un gramo. Y sin que las mineras pierdan dinero, ya que lo venderían a precio internacional.

Esta propuesta también es conveniente para los empresarios, porque si bien deberán erogar los costos de indemnización antes de que la desvinculación se produzca, tendrán dos ventajas: a) el monto es previsible, b) es deducible de impuestos.

Empresas

El Estado habilitará el peso oro o el peso fuerte (plata), ambas monedas vigentes, la primera por una ley de 1881 y la segunda en la Constitución, como unidad de cuenta y serán fijados los parámetros (por ejemplo los mínimos no imponibles impositivos) en dicha unidad monetaria. Los balances de las empresas podrán presentarse a la AFIP en alguna de dichas monedas y sobre dichos valores se determinarán los impuestos a pagar.

Las empresas podrán guardar sus excedentes en divisa, oro o plata a su gusto. Podrán cancelar obligaciones en divisa mediante transferencias bancarias. No podrán emitir cheques en divisa.

Asimismo se eliminarán los adelantos impositivos (excepto los aduaneros). Esto dará mayor capital de trabajo a las empresas, lo que les permitirá compra de suministros, cancelación de deudas o ahorro dinerario.

Conclusiones

Argentina, para volver a ser soberana, y empezar nuestro camino hacia el IMPERIO AUSTRAL, deberá sacarse de encima la deuda externa y acumular, tanto en manos de sus habitantes, como de las empresas y de los estados, ingentes cantidades de metálico.

Las familias propietarias son familias que defienden el sistema de propiedad. El ahorro en manos de las personas es un reaseguro para los tiempos difíciles. En realidad lo es para todos, empresas y estados incluidos.

Hasta tanto no se estabilice el valor del peso, el Estado deberá usar una unidad de cuenta, que puede ser tanto el peso oro como el peso fuerte.

Recomiendo la lectura de este fallo (gracias, Fabeluke).

Las soluciones están a disposición de los gobernantes, sin grandes modificaciones de las leyes actuales.

Nuestro objetivo debe ser:

    • Reventar el BCRA de reservas de oro, plata y divisas.
    • Tener cero deuda soberana.
    • Tener estabilidad monetaria que nos permita prosperar y levantar el salario real de la población.
    • Estimular las exportaciones.
    • Tener divisas suficientes para pertrechar a nuestras FFAA, porque lo que se viene, no va a ser fácil.
    • Ser felices.

 

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Lecturas relacionadas

Deuda pública

http://restaurarg.blogspot.com/2022/08/deuda-publica.html

Imperio Austral

http://restaurarg.blogspot.com/2023/04/imperio-austral.html

Argentina necesita un submarino nuclear

http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/argentina-necesita-un-submarino-nuclear.html 

El elefante se come en pedacitos

http://restaurarg.blogspot.com/2023/03/el-elefante-se-come-en-pedacitos.html 

A indemnizar en pesos argentinos oro

https://www.diariojudicial.com/news-95314-a-indemnizar-en-pesos-argentinos-oro

 

Nota

[1] En anteriores oportunidades propuse eliminar los derechos de exportación, al sólo efecto de imitar a Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia, y fomentar las exportaciones. En ese caso, únicamente tendríamos una tasa de estadística sobre todo comercio, más los aranceles de importación y los adelantos impositivos motivados por importaciones.

Si se aplicara eliminar los derechos de exportación y dejar sólo una tasa aduanera de 1% sobre las mismas, la recaudación podría haber sido alrededor de los U$D 25 mil millones, con los volúmenes de exportación actuales. Si liberáramos el tipo de cambio y elimináramos las DEX podemos esperar un crecimiento sustancial de las exportaciones hasta llegar en poco tiempo a U$D 300 mil millones actuales.

 

Artículo publicado el 01/07/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/07/ahorro.html