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EL PLÁSTICO: DE BENDICIÓN A MALDICIÓN

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Hasta hace poco raramente hablábamos del plástico como un problema ecológico, ahora se habla mucho. Los expertos han verificado que los plásticos representan casi el 4% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Eso es casi el doble de las emisiones del sector aviación. Y así es: los plásticos contribuyen más al calentamiento terrestre que el conjunto de aviones que sobrevuelan el planeta. ¿Cómo es eso posible? La respuesta es que el plástico está hecho de petróleo, gas o carbón. Eso significa que, en cada etapa de su vida, el plástico contribuye al cambio climático.

El plástico permanece por cientos de años o más. Desafortunadamente, solo el 9% del plástico que se produce se recicla; la mayoría termina en vertederos o en el medioambiente. De hecho, 8 millones de toneladas de plástico ingresan por las vías fluviales cada año. Todo ese plástico está comenzando a aparecer en lugares inesperados (y no deseados) desde el agua del grifo hasta la comida. El “smog” de los microplásticos en los océanos neutraliza o elimina pequeños organismos que son la base de muchas de nuestras comidas, lo que podría tener serias implicaciones para el sistema alimentario de la humanidad (https://ecologycenter.org/).

Algunos de mi generación recordarán la frase del señor Robinson en la película “El Graduado” (1968) cuando el joven universitario encarnado por Dustin Hoffman le pregunta —mientras retozaba en la piscina— a qué debería dedicarse para ser exitoso, ya que acababa de concluir sus estudios superiores.

Escuetamente Robinson le dijo “plásticos, joven, plásticos”. En esa época comenzaba el ultra exitoso ciclo del plástico; se inició lo que parecía una nueva era de fáciles utensilios que desplazarían para siempre vidrio, papel y hojalata. Algo de eso ocurrió a lo largo de estos más de 50 años, pero al mismo tiempo el planeta terminó inundado por un material que ha creado trastornos enormes. En los mares el plástico está matando especies piscícolas y vegetación marina. En la parte terrestre del globo el plástico está afeando todos los paisajes habidos y por haber, sin contar la de suyo nefasta contribución de este material al efecto invernadero. 

Ha llegado la hora de despertar, hay que maximizar el reciclaje del plástico, dejar de fabricarlo o inventar otros materiales menos dañinos. El proceso será difícil, la industria del plástico es poderosa y extendida, pero por algún lugar hay que comenzar. Lo primero será obligar que tiendas y supermercados retornen al uso del papel. Asimismo, propiciar el reciclaje y el canje de botellas, en lugar de dejar que cada cual las deseche o almacene donde quiera. La lucha contra la contaminación ambiental es parte de la guerra contra el cambio climático. Y el plástico, de ser un producto benéfico y cómodo, ahora es el gran villano.

Hoy en día se está generando más basura plástica que nunca y reiteramos, poca cantidad se recicla. Dado que el plástico y sus ingredientes están impregnando océanos y vías fluviales, invadiendo los cuerpos humanos, deteriorando el medioambiente y perjudicando la vida silvestre, el Centro de Ecología —en paralelo con institutos afines— recomienda eliminar drásticamente los plásticos para siempre y hacerlo tan pronto como sea posible. Así están las cosas.

*Ex canciller, economista y politólogo. Miembro del CEID y de la SAEEG. www.agustinsaavedraweise.com

Tomado de El Deber, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, https://eldeber.com.bo/158295_el-plastico-de-bendicion-a-maldicion

 

EL DRAMÁTICO CASO DEL KURDISTÁN

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Por el tratado firmado en la ciudad francesa de Sèvres en agosto de 1920 entre la perdidosa Turquía y las naciones aliadas de la Primera Guerra Mundial (salvo Rusia y Estados Unidos) el Imperio Otomano perdió la mayor parte de sus posesiones y se decidió crear en Anatolia Oriental un Estado para los kurdos. En 1922 la Sociedad de las Naciones reiteró este propósito, pero la rebelión de Kemal Ataturk —que derrocó al Sultanato— dio por tierra con varias estipulaciones del acuerdo, entre ellas la vinculada con la creación del Kurdistán. Como el tratado no fue totalmente ratificado algunas cosas se cumplieron, otras no y luego la dinámica mundial siguió su curso, dejando en el camino varios asuntos del pasado, entre ellos la reivindicación ancestral de un pueblo aprisionado entre cuatro países, nuevamente ignorada en 1923 cuando se concluyó otro acuerdo en Lausana (Suiza) que estableció los límites de la Turquía moderna y ya no mencionó el tema kurdo. Durante los siguientes 86 años cualquier movimiento de los kurdos para establecer un Estado independiente ha sido brutalmente sofocado, en particular por los turcos, cuyas acciones del pasado han sido francamente genocidas y las del momento presente ostentan tenebrosa similitud, generando preocupación en la comunidad internacional.

El Kurdistán está enclavado entre el sureste de Turquía, norte de Siria, norte de Irak y el noroeste de Irán. Los kurdos han procurado crear un Estado independiente sobre la base de algunas o todas las áreas con población kurda. Ante la oposición de quienes controlan sus territorios ancestrales optaron por negociar autonomía. En algunos casos tuvieron éxito, en otros sufrieron horribles tragedias en Irak y en Turquía.

Durante el medioevo los kurdos formaron débiles emiratos por separado, sin lograr agruparse en lo que podría haber sido un solo país. La nación kurda quedó así dispersa y dominada por otras etnias. El colonialismo franco-británico tampoco ayudó en lo que hace a Kurdistán; los acuerdos Sykes-Picot de 1916 no resolvieron nada. La invasión norteamericana (2003) para derribar a Saddam sí fortaleció al gobierno regional kurdo en la parte septentrional iraquí. Estando así las cosas, se llegó al presente. Los kurdos de Siria y sus valientes mujeres fueron factótum en la derrota del ISIS (Estado Islámico) pero EEUU le pagó mal a sus corajudos aliados: los dejó indefensos en manos del cruel enemigo histórico. Con Irán indiferente, Siria devastada e Irak semi destruido y casi dividido, la única oposición dura de los kurdos es Turquía, históricamente responsable de múltiples matanzas de ese sufrido pueblo. Por las alianzas de Ankara con la OTAN, EEUU y la Unión Europea siguen reticentes ante las aspiraciones kurdas. Hoy las cosas podrían cambiar. Frente a la política anti kurda de Erdogan —presidente turco en ejercicio— realidades geopolíticas han creado nuevas situaciones que deberán ser consideradas.

Es casi imposible que los kurdos recuperen la integridad de su tierra ancestral, pero bien podrían acomodarse en el norte de Siria y norte de Irak a los efectos de crear un país soberano, que además sería gran baluarte contra el “yihadismo”. Con el tiempo, tal vez sea factible lograr arreglos con turcos e iraníes para repatriar kurdos y hasta adquirir parcelas territoriales. Todo es posible o tal vez no, dada la ebullición típica de esa parte del globo, pero el Kurdistán merece un Estado soberano; eso está fuera de duda alguna.

*Ex canciller, economista y politólogo. Miembro del CEID y de la SAEEG. www.agustinsaavedraweise.com

Tomado de El Deber, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, https://www.eldeber.com.bo/157614_el-dramatico-caso-del-kurdistan

EUROPA DESCONFÍA CADA VEZ MÁS DE LA OTAN

Agustín Saavedra Weise*

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La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) es una alianza militar hoy compuesta por 29 países de América del Norte y Europa. Nació el 4 de abril de 1949 con doce miembros: Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Holanda, Noruega, Portugal, Gran Bretaña y Estados Unidos. En 1952 ingresaron Grecia y Turquía; luego se unieron Alemania Occidental (1955) y España (1982).

La OTAN, a fines de 1991, propuso un nuevo plan de seguridad para EEUU y sus aliados europeos, teniendo en cuenta que se había desplomado el telón de acero que pesaba sobre los países de la región bajo la órbita comunista de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, que los unió forzadamente mediante el Pacto de Varsovia. Al extinguirse la URSS y fragmentarse en 15 estados, inclusive se pensó que la OTAN ya no era necesaria; el enemigo principal había sido eliminado sin disparar un solo tiro. A la Federación Rusa —heredera del sitio de la URSS en el Consejo de Seguridad y principal parte de la extinta fuerza rival— se le prometió que la OTAN no se extendería hacia el este, pues el “peligro comunista” había desaparecido. No fue así, la alianza continuó su expansión y prácticamente ha cercado a Rusia, recreando en el siglo XXI el viejo fantasma del “corralito” sufrido por la URSS durante los largos años de la Guerra Fría. Al sentirse amenazada, Rusia ha reaccionado de diversas maneras y la tensión —bajo diferentes circunstancias— continúa, en lugar de haberse eliminado para siempre. Esta es una crítica muy justificada que se le hace a la OTAN: haber alejado a Moscú en lugar de alentar un esquema de cooperación mutua.

Otra crítica usual a la OTAN es la “comodidad” europea, ya que EEUU lleva el peso del financiamiento. Ese contexto está cambiando desde que Donald Trump expresó que los europeos deben aportar más al sostenimiento de la alianza, pero como al mismo tiempo las contradicciones del presidente estadounidense han sembrado desconfianza, persiste una situación de impase.

Ante este incierto panorama, dos importantes miembros (Francia y Alemania) están escudriñando la posibilidad de una OTAN propia desligada de EEUU. Al respecto de lo expresado, hace poco el presidente francés Emmanuel Macron emitió una severa advertencia sobre el futuro de la OTAN, diciendo que los países europeos ya no pueden confiar en EEUU para su defensa. Macron dijo que Europa se encuentra “al borde de un precipicio” y necesita comenzar a pensar estratégicamente como un poder geopolítico autónomo, dado que de no hacerlo el viejo continente corre el riesgo de no ser capaz de controlar su destino. Es más, Macron manifestó con crudeza que la alianza atlántica actualmente tiene “muerte cerebral”, dado que no existe coordinación con Washington.

El mandatario galo también criticó duramente la acción ofensiva de un miembro de la OTAN (Turquía) contra los kurdos en Siria, acción ejercida sin previo consenso entre los miembros de la alianza y en un área conflictiva donde se juegan muchos intereses.

En la OTAN, pese a sus siete décadas, crece la desconfianza mutua. Habrá que ver lo que le deparará el futuro a esta controvertida organización.

 

*Ex canciller, economista y politólogo. Miembro del CEID y de la SAEEG. www.agustinsaavedraweise.com

Tomado de El Deber, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, https://www.eldeber.com.bo/156901_europa-desconfia-cada-vez-mas-de-la-otan