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INQUIETANTE Y PERTUBADOR

F. Javier Blasco*

El pasado 8 de julio, el presidente Sánchez se desahogó con dicha frase calificativa al aludir a las noticias que saltaban a la prensa inculpando al Rey Emérito Juan Carlos I en un caso de fraude a Hacienda por la no declaración de impuestos sobre ciertas comisiones o donaciones por el AVE a la Meca y su traspaso a una señora despechada quien, a pesar de haber logrado un pastizal, se ha dedicado a largar al mayor y más fétido representante de las llamadas cloacas del Estado. Perla la de Sánchez, que coronó con un “agradecimiento a la Casa Real por poner distancias” con el caso y en el tema.

Frases ambas nada justificables para un Presidente del Gobierno por no respetar en la figura de Juan Carlos I, la presunción de inocencia y por inmiscuirse directamente en un caso que está siendo investigado por la justicia; cosas que siempre repudia en los demás, proclama y exige a todos sobre todo, en los casos que afectan a su partido, al gobierno o a personas allegadas a su ideario.

Tampoco es de recibo que él, como Presidente del Gobierno agradezca nada al Jefe del Estado. En dicho agradecimiento, queda de manifiesto un encubierto deseo y sentimiento de superioridad sobre Felipe VI, cosa más que probada por muchos de sus gestos y totalmente reprobable en su persona dado el cargo que ostenta.

Para darle el justo peso y valor al tema, debemos encajarlo en el escenario o contexto donde se produjo; lo hizo, aprovechando la rueda de prensa conjunta con el Primer Ministro italiano de visita oficial en España, y ante los medios internacionales que la cubrían. Pretendiendo de esta forma y con gran apariencia de naturalidad, mostrar con dos frases —tremendamente calculadas y mendaces— una situación y sensación de control total, así como una parcialidad y una superioridad sin igual.

Por si esto último no hubiera quedado bien claro, en la misma rueda de prensa y cambiando de tercio, se le ocurrió deslizar un mensaje nítido a España y a Europa, al menos. Con él que quiso dejar bien claro que nunca le ha pasado por su cabeza hacer ningún tipo de pacto con el Partido Popular, ni siquiera en los momentos más graves y difíciles para España. Mensaje externo en clave interna, que dice mucho de su arrogancia, egocentrismo y falta de visión de Estado. Que muestra que se encuentra sobrado, que no piensa cambiar de política y que todo lo que afirma y pregona de forma dura contra la oposición al acusarles de remar en sentido contrario, es falso, como casi todo lo que hace y dice en su vida de truhan.

Semana negra para su popularidad y maldad personal en la que ha ido sumando una serie de actos poco recomendables para alguien que ostenta la presidencia de un gobierno que dice ser plenamente democrático; como por ejemplo, el desprecio a los difuntos y familiares de los más de cuarenta y cuatro mil fallecidos durante la pandemia del COVID-19 al no asistir a la misa funeral oficial, celebrada —con la presidencia de la Familia real en pleno— y organizada por la Iglesia católica española en su honor, alegando posteriormente en su defensa, que aquello no era un funeral de Estado. Con su postura y poco apego pisa de nuevo, a unos fallecidos, que él aún no reconoce en su número real, a los que se ha resistido a honrar y de los que, en muchos casos, de su horrenda y solitaria muerte, el gobierno en pleno se intenta desmarcar.

Santa Misa celebrada en recuerdo de todas las víctimas del COVID-19 en la Catedral de la Almudena con la presencia del Rey Felipe VI, la Reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Foto: EFE

Hecho feo, chulesco y burlesco tanto en su persona como en la del nefasto vicepresidente Iglesias, personaje siniestro y amenazador sin igual, que cada día se va implicando en más temas a cual más fétido y vulgar. Temas, de los que veremos si el gobierno y con todos sus execrables resortes de “protección jurídica” a su entero y personal servicio podrán, algún día, librarle completamente.

Para finalizar la semana horribilis solo faltaban una serie de declaraciones, soltadas a modo de globo sonda, por las que trataba de resucitar un hecho que es imposible llevar a cabo sin la concurrencia del principal partido de la oposición, como es la revisión de la inviolabilidad del Jefe del Estado, el Rey mientras este ejerza el cargo. Porque para ello, es preciso una revisión de calado de la Constitución, lo que supone disolver las cortes, ganar las elecciones, aprobar de nuevo dichos cambios en las nuevas cortes y ser sancionados mediante un referéndum nacional. Por lo que todos saben que no es más que ganas de mover el rabo, tratar de quitarle seguidores a Podemos y aparentar que es todo un auténtico revolucionario.

No se puede asegurar a ciencia cierta que todas estas palabras, frases, gestos y hechos por si solas o en conjunción, hayan tenido una gran y directa influencia en el fallido nombramiento de la Sra. Calviño cómo Presidenta del Eurogrupo el pasado jueves 9 de julio. Hecho y momento de gran vergüenza para el gobierno de Sánchez por haber mostrado una nefasta estrategia diplomática, un exceso de confianza, un selectivo acercamiento a los países más grandes y un grave desprecio de los pequeños y a los partidos de centro derecha, sin tener presente que dichos países tienen el mismo peso a la hora de depositar su voto y que son además los que ponen y pondrán las principales pegas a la hora de que la UE nos vaya a financiar. Vender la piel del oso, con desprecios y postureos, antes de cazarlo, suele tener malas consecuencias para el cazador, ya que puede hasta resultar ser cazado, como ha sido el caso.

Situación que, seguramente, tiene sus bases en otros muchos aspectos, actos, desprecios y salidas de patas de banco, así como en las graves repercusiones ya probadas de la alianza social-comunista al establecer un gobierno apoyado en partidos regionalistas, separatistas y filoterroristas, muy poco preparado, totalmente desnortado, incoherente, anacrónico y que marcha por un camino completamente equivocado y contrario a los demás para ir hacia ningún lado y menos, para salir de la grave crisis económica en la que ese mismo gobierno nos ha metido por su falta de previsión, mirar para otro lado y dada su pésima gestión de una crisis sanitaria, derivada de una pandemia global, que, a su vez, ha colocado a España en los peores podios en materias tales como el número de muertos, personal sanitario contagiado y los más pésimos indicadores económicos que solo prevén una gran dificultad para nuestra recuperación.

Todo influye, nada pasa desapercibido, máxime cuando muchos saben que por parte de los protagonistas del “pacto del abrazo”, nada ocurre por casualidad o es fruto de un desliz poco madurado. Los muchos cientos o miles de asesores que les rodean y las directrices marcadas por el mercenario de la propaganda que domina y dirige las cloacas Moncloa, hacen que todo esté pensado, aparezca en el momento que estimen más oportuno y que su nueva versión, cambio o replica esté calibrada, ensayada y preparada para surgir si fuera necesario.

Lo de Calviño, es un claro aviso a navegantes; los mismos que nos denegaron su apoyo, son los que tiene bien hechos sus deberes, se han sacrificado previamente y no están dispuestos a que sean sus conciudadanos los que paguen con sus impuestos los excesos y las alegrías de los países gobernados por descerebrados, gastadores a manos llenas y totalmente despreocupados por lo que pueda venir mañana.

Estoy plenamente convencido que el proceso que se inicia ahora mismo y que será el que nos saque o no del abismo, no va a ser un camino plano y lleno de rosas como muchos imaginaban, ya que el poder de los más fuertes dentro de la UE no es hoy, ni mucho menos, tan grande como lo fue antaño, lo que hace pensar en que el proceso negociador será a cara perro y ya veremos cómo y en qué acaba este desaguisado.

Los charcos en los que se mete el gobierno son cada vez mayores, ya he perdido la cuenta del número de subvenciones, apoyos o planes de refuerzo a la economía y diversos sectores que como si fuera el más poderoso del mundo y no el más endeudado, firma y aprueba por doquier con todo su desparpajo, aunque tarde y sin dinero para financiarlos.

Las querellas y demandas que por decenas le vienen llegando, de momento las van soslayando; pero llegará el día en que el muelle de protección se romperá de tanto tensarlo y entonces, será incluso la propia justicia europea la que ponga orden en tanto mamoneo y excesivo quebranto.

Las chulerías no son nada baratas; en esta vida todo se paga, aquellos que se ufanan de sus gestos o actos aunque vayan contra tiros y troyanos acaban finalmente mordiendo el polvo, incluso con mayor dureza y escarnio. Lo malo de todo esto es que, en nuestro caso, seremos los españoles los que pagaremos la factura y el dolor recaerá sobre nuestros bolsillos y espaldas. Mientras tanto, estos dos dictadores y tiranos pasarán a engrosar las filas de los muchos ex dirigentes que, al estilo de Zapatero, pululan por el mundo sacando pingües beneficios, a costa de defender a capa y espada causas perdidas en países que, habiendo sido otrora muy ricos y prósperos, ahora nadan y retozan en la miseria, la pobreza, la desesperación y el paro. Por eso me atrevo a decir, sin ningún reparo, que TODO esto sí que es INQUIETANTE y PERTURBADOR, señor Sánchez.

* Coronel de Ejército de Tierra (Reserva) de España.  Diplomado de Estado Mayor, con experiencia de más de 40 años en las FAS. Ha participado en Operaciones de Paz en Bosnia Herzegovina y Kosovo y en Estados Mayores de la OTAN (AFSOUTH-J9). Agregado de Defensa en la República Checa y en Eslovaquia. Piloto de helicópteros, Vuelo Instrumental y piloto de pruebas.

Miembro de la SAEEG.

Artículo publicado en https://sites.google.com/site/articulosfjavierblasco/inquietante-y-pertubador

9 DE JULIO

Juan José Santander*

 

Es el nombre de un tango, uno de los tres o cuatro que mis padres salían a bailar, y creo que anterior a la avenida homónima tan desmesurada como dos o tres aspiraciones argentinas afortunadamente todas relativamente recientes, porque quienes tomaron la decisión de ser independientes en el salón de la casa de aquella ilustre señora tucumana que lo cedió al efecto, con sus columnas salomónicas de pórtico y la sencillez que la arquitectura colonial iberoamericana supo tener en ciertos casos, respondían a la necesidad de no ser considerados y tratados según los usos del derecho de guerra como rebeldes sino como beligerantes legítimos. Hoy día diríamos: no como una organización terrorista sino como combatientes por la libertad.

No todos estábamos ahí: mi querida Santa Fe natal no estaba y tampoco algunas otras provincias que respondían a Artigas, tan admirable en otras cosas.

Había toda índole de propuestas: testas coronadas por borbónicas o por su estirpe inca; predominó la república y fuimos —seguimos siéndolo— las Provincias Unidas del Sud que canta nuestro Himno Nacional, reducido, ay, ahora, a un tarareo desentonado de su magnífica introducción instrumental sin palabras, como corresponde a las bandas estentóreas que la vociferan.

República hoy, ay, de nuevo, tan deteriorada como sus símbolos.

Ante la desgracia que nos ha salvado de caer en las fantasías de excepcionalidad que han solido y suelen aquejarnos, seamos capaces de tener la entereza de aquellos hombres que frente a los poderosos del mundo y en beneficio aun de quienes no se presentaron a prestar su voz o su sostén, quisieron, proclamaron solemnemente y pronunciaron la palabra

INDEPENDENCIA

que es más que un nombre de avenida.

 

* Diplomático retirado. Fue Encargado de Negocios de la Embajada de la República Argentina en Marruecos (1998 a 2006). Ex funcionario diplomático en diversos países árabes. Condecorado con el Wissam Alauita de la Orden del Comendador, por el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, M. Benaissa en noviembre de 2006). Miembro del CEID.

Fotos: Ente Autárquico Tucumán Turismo

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LA ACTIVIDAD PESQUERA ARGENTINA NO TIENE FUTURO SIN LAS AYUDAS DE LA COMPETENCIA INTERNACIONAL

César Augusto Lerena*

Las empresas pesqueras que exportan valor agregado y ocupan mano de obra argentina deben recibir las ayudas con las que son beneficiadas todas las empresas pesqueras del mundo.

Seguramente, como un resabio de nuestras épocas de gloria, los argentinos solemos ser más papistas que el papa y, aun así, creyéndonos muy creativos, tomamos al pie de la letra los mandatos de los países desarrollados que, en lo económico, productivo e industrial, tienen aviesos intereses en su favor.

Orgullosos de ser el “granero del mundo” adherimos a las consignas del libre mercado y, dejamos de lado —y hasta miramos como consignas de cabotaje— todo intento de proteger nuestra industria nacional y, así, terminamos vendiéndoles commodities al mundo, regalándoles nuestra mano de obra y comprándoles gatitos de la suerte “Maneki-neko” que, si levantan la pata derecha, traen dinero y fortuna ¡Somos vivísimos los argentinos!

El mundo pregonaba la economía de mercado, aunque la Unión Europea (UE) y Estados Unidos (USA) subsidiasen desde siempre la producción agropecuaria y alimentaria y establecieran políticas proteccionistas a través de la imposición de barreras arancelarías y no arancelarias, preferencias, cupos, salvaguardias, precios de entrada y otras restricciones destinadas a impedir el ingreso de productos con alto valor agregado que compitieran con los de sus productores o industriales.

Inconsistentes argumentos sanitarios, bajo el formato de directivas, sirven de pretexto, para impedir el ingreso a sus mercados, aunque —en el caso de los alimentos y de los productos pesqueros argentinos— en la mayoría de las empresas industriales y exportadoras se elaboran en infraestructuras y con procedimientos de mejor calidad y sanidad que las de la UE y USA y las normativas sanitarias argentinas son absolutamente equiparables a las Directivas de la UE o a las reglas de USA y, de hecho, los productos pequeros ingresan a los mercados más exigentes del mundo, cosa que no ocurre con las carnes.

Paralelamente a ello, los excedentes subsidiados de la producción de la UE y USA se destinan a la exportación, en muchos casos con reembolsos, con los cuales, compiten en otros mercados con los mismos exportadores que se ven impedidos a ingresar a esos países sus productos terminados. Un verdadero cuento de la buena pipa. ¡Así cualquiera adhiere a la economía de mercado! Mientras ello ocurre, toda política en la Argentina que fuese destinada a proteger la industria nacional siempre es tildada de bananera, bajo el argumento de intentar sostener una industria poco competitiva y sin la calidad de lo importado. Es probable, que en algunos casos pueda ser cierto, aunque es necesario separar la paja del trigo y, en especial, poner al Estado, no como socio principal de la empresa por la altísima carga impositiva y burocrática que sufre la producción, sino como palanca de desarrollo, apoyo financiero y tecnológico. Es muy difícil competir en el mundo, cuando la inflación en la UE es del 1,45% y USA 2,44% anual y en la Argentina supera el 44%, además de que las exportaciones cargan con una carga impositiva insostenible.

¿Ahora, nadie refiere a la desglobalización y multilateralismo agonizante y, al avance de los nacionalismos de la mano de Trump? ¿La Subsecretaría de Pesca analiza lo que ocurre en el mundo?

Veamos cómo se maneja el sector pesquero español subsidiado por la Unión Europea y el gobierno español: por un lado, se oponen al Pacto Verde de la Unión Europea, que reduciría en un 30% las áreas de captura en aguas comunitarias y que restringiría en estas mismas aguas, las capturas con redes de arrastre de fondo. Pretenden, al mismo tiempo, seguir pescando en aguas británicas del Atlántico Nordeste y, en el Área de Malvinas de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) Argentina, ocupada en forma prepotente por el Reino Unido (RU), y que estas capturas ingresen a la UE sin arancel alguno.

Además de ello, están promoviendo que el gobierno español, induzca al consumidor a adquirir productos españoles, en perjuicio a los exportadores argentinos, descalificando las importaciones, sin evaluar, que por lo menos 2 Kg/per cápita anual del consumo español es de origen argentino, a lo que debiéramos sumar lo que nos roban en el Área de Malvinas y los migratorios argentinos en la Alta Mar.

Pero para las Entidades Europêche y CEPESCA y la Asociación Europea de Organizaciones de Productores Pesqueros (EAPO) todo es poco, y con el argumento del COVID-19, nuestro conocido Javier “Paz y Bien” Garat le solicitó a la Directora General de la DG Mare, Charlina Vitcheva, “que haga la vida más fácil a los pescadores, que ya tienen que cumplir con demasiadas normativas y burocracia, de tal complejidad, que obstaculiza las operaciones diarias de pesca; rebajen el IVA a los productos pesqueros al 4%; les garantice igualdad de condiciones (¿?) para asegurar la competitividad de la flota de la UE; le expresan al mismo tiempo, la satisfacción del sector por las medidas paliativas adoptadas por la Comisión, abogando por un rápido desbloqueo de 500 millones de euros de fondos adicionales para la pesca y, le recordó también, a la citada directora, que solicitaron a la Comisión Europea que sea sensible y lo más flexible posible en la aplicación del plan plurianual recientemente adoptado para el Mediterráneo occidental, de manera que no se agraven las consecuencias socioeconómicas causadas por esta pandemia”. Adonde interviene el favor y las dádivas, se allanan los riscos y se deshacen las dificultades, diría el español Miguel de Cervantes Saavedra. ¿Y los nuestros? Arréglate como puedas.

Podríamos sintetizar de esta manera el accionar del empresario pesquero español: captura en forma subsidiada e ilegal nuestros recursos pesqueros; importa productos pesqueros de bajo valor agregado y se queda con nuestro empleo; industrializa en forma subsidiada; vende a los empresarios radicados en la Argentina buques financiados y a baja tasa fabricados en España y, se lleva los recursos argentinos de la ZEE Argentina o los migratorios y asociados en Alta Mar al menor costo posible. Recibe subsidios para fomentar el consumo interno. Todo sigue como en el siglo XIX, salvo que no nos traen esclavos de África para abaratar los costos de materia prima.

Ahora, veamos, que se hace en la Argentina y empecemos por los derechos y otros impuestos. ¿Está el subsecretario de Pesca abocado a resolver el problema de competitividad de la actividad?

¿Quién establece los derechos y demás impuestos en la Argentina? ¿El competidor extranjero?

A la captura se le cargan derechos y nuevamente se grava con derechos la exportación. Es decir, una doble imposición, sobre una misma materia prima. Es muy razonable que se cobren derechos a la captura porque el recurso es del Estado, pero, a la exportación, no hace más que desalentarla y quitar competitividad a las exportaciones, agregándole impuestos.

Se otorgan luego reintegros, que más que reembolsos parecen una suerte de devolución parcial de los derechos de exportación. Pero, mientras estos se pagan prácticamente al contado, los reintegros se acreditan más allá de los 180 días. Una fórmula imperfecta que no genera el valor agregado esperado (con el consecuente empleo) y, además, es —en muchos casos— de aplicación virtual, porque no resuelve la falta de competitividad de los productos argentinos para facilitar el ingreso a los mercados, ante el costo interno y la tremenda carga impositiva que acompaña a las exportaciones nacionales.

Por otra parte, en una actividad, donde sus productos se destinan en un 90% a la exportación, es un despropósito, que el combustible utilizado en los buques para las operaciones de extracción del recurso, se graven con impuestos.

Y los costos no terminan. El autocontrol de los establecimientos industriales en el mundo tiene al menos 25 años. En algunas recorridas a plantas industriales que realicé en Europa nunca encontré un inspector; precisamente, porque aplican sistemas de autocontrol; desde 1989 los planes HACCP en Estados Unidos. Aquí se implementaron, pero no eliminaron la burocracia y entonces conviven con controles relativos oficiales que encarecen la industria en forma cada vez más gravosa. Así la actividad sufre las tasas municipales por servicios que no se prestan y de SENASA y servicios aduaneros, a la que se le agregan a los altos costos de energía y agua. También, el costo de administración de la Subsecretaria de Pesca y del Consejo Federal Pesquero, que es notablemente más alto que el aplica Chile, que exporta en dólares 3,5 veces más que Argentina y del Perú que exporta en dólares 1,7 veces más que la Argentina.

A su vez, mientras el mundo tiene un consumo anual de productos pesqueros del orden de 21 kg per cápita, nuestro país, no llega a los 6 kg. Y, no solo es una cuestión económica, sino sanitaria, ya que el pescado junto a leche materna tiene una proteína de altísimo valor biológico. En España, se consumen 25,5kg per cápita y, sus empresarios solicitan la baja del IVA al 4% para favorecer el consumo.

En síntesis, un bajo consumo de pescados y una Argentina que exporta impuestos y, así, no puede esperarse, que compita en el mundo contra empresas subsidiadas, que disponen de crédito para financiar el capital de trabajo, la reinversión en desarrollo tecnológico, la construcción y la reparación de buques. Aun así, en esta situación desfavorable, la Argentina exporta productos pesqueros a la UE por un valor de 790 millones de dólares (37% del total de las exportaciones pesqueras), a China 475 M de dólares; a USA 150 M; a Japón 100 M; a varios países de Suramérica 190 M; a Tailandia 66 M, etc.

Frente a este escenario el gobierno argentino debería:

  1. Encomendar el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) los estudios pertinentes para determinar científicamente el origen en Zona Económica Exclusiva (ZEE) Argentina de las especies de dominio del Estado Nacional que migran al área de Malvinas de la ZEE Argentina y a la Alta Mar.
  2. A través de la Cancillería y todo el cuerpo diplomático especializado tomar las medidas pertinentes para que todas las capturas que se realicen sobre especies de dominio de Argentina, incluyendo a las localizados en la ZEE Argentina, en el área de Malvinas de la ZEE Argentina o aquellas migratorias en la Alta Mar sean tipificadas originarias de Argentina.
  3. Eliminar de las exportaciones los impuestos (entre ellos los cargados al combustible que son centrales en la captura) y otorgar los reembolsos que fueran necesarios a las exportaciones de productos pesqueros, para equilibrar el cobro de aranceles a la importación y desalentar la pesca ilegal en el Atlántico Sur. Estas desgravaciones y reembolsos deberían estar directamente relacionadas al mayor valor agregado y a la mayor ocupación del personal afectado a la industria; regularizar el personal no registrado y, reducir los costos del Estado a través del otorgamiento de subsidios al desempleo o al empleo, como los Programas de Recuperación Productiva (REPRO) y, muy especialmente, debe profundizarse en la captura de los recursos migratorios en la Alta Mar. Todo ello, por cierto, podría interpretarse como una medida de excepción, pero no lo es, ya que, por ejemplo, las empresas petroleras que operan en Argentina en la extracción de petróleo y gas recibieron subsidios del Estado por U$S 24 mil millones entre 2008 y 2019 según el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPYPP).

“En su noche toda mañana estriba: de todo laberinto se sale por arriba” (Leopoldo Marechal).

 

* Experto en Atlántico Sur y Pesca. Ex Secretario de Estado, ex Secretario de Bienestar Social (Provincia de Corrientes). Ex Profesor Universidad UNNE y FASTA. Asesor en el Senado de la Nación. Doctor en Ciencias. Consultor, Escritor, autor de 24 libros (entre ellos “Malvinas. Biografía de Entrega”) y articulista de la especialidad.

 

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