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Antes de aplaudir el acuerdo con la UE, conviene mirar el Brexit

Iris Speroni*

Millones de ingleses pugnan por huir de la socialdemocracia que los ha empobrecido (como a nosotros)

Los ingleses intentan escapar de una pesadilla.

La prensa nacional e internacional y opinadores varios hablaron sobre el Brexit. Sólo se escuchó la voz del establishment quien trató de ignorantes y palurdos a las 17.410.742 personas que votaron distinto a lo que los dueños del poder querían. La voz ausente fue la de las personas. Nadie nos dijo por qué los británicos se querían ir. 

Tras el tratado Mercosur-Unión Europea es relevante escuchar a los detractores de la Unión Europea.

EL BREXIT

Grupos de presión pidieron por años en Gran Bretaña un referendo para reconsiderar la decisión de estar en la Unión. 

En las elecciones generales del 2015, el partido gobernante (conservador) prometió llamar a un referendo con el fin de zanjar la cuestión, lo que le hizo ganar cómodamente. Cameron convocó la consulta.

El gobierno y los principales líderes de la oposición hicieron campaña a favor de quedarse en la UE. El gobierno le envió un libro a cada votante con la lista de bondades de la UE. La BBC, la mayoría de los medios de prensa, actores, artistas en general y la totalidad de la Academia (los profesores universitarios) hicieron campaña por permanecer. Sobre la fecha se sumaron el gobernador del Banco de Inglaterra, la directora del FMI, el secretario general de la ONU, el director del BM, líderes europeos, Obama, los presidentes de bancos privados internacionales y grandes consultoras. 

Extraño fue que los sindicalistas británicos se acoplaran al FMI y al BM.

La élite auguró a la población las siete plagas de Egipto si no se doblegaban a su voluntad. Predijeron aislamiento geopolítico, descenso de actividad económica y desocupación. 

El establishment perdió. ¿Por qué?

LISTA DE AGRAVIOS

El ingreso a la CEE/UE le produjo a millones de británicos la caída de su nivel de vida. Peor aún: perder la esperanza. Listaré agravios.

Gran Bretaña tiene balanza comercial negativa con el resto de la Unión. GB exporta mayormente fuera de la UE. Exportan el doble a Bangladesh que a Dinamarca. 

Las razones que dan son que Alemania manipula el tipo de cambio con el fin de favorecer sus propias exportaciones y genera competencia desleal con exenciones impositivas, créditos blandos y subsidios a la exportación.

GB se queja de la manipulación del mercado de alimentos. En la década del sesenta la CEE implementó el Plan de Soberanía Alimentaria. La excusa fue autoabastecerse de alimento, a cualquier costo, para no repetir las hambrunas de la guerra -como si un país en conflicto pudiera sembrar y cosechar-. El efecto fue que subsidian a la industria de maquinaria agrícola y química de Alemania. Los Estados le dan plata a sus agricultores para que estos se lo entreguen a Bayer o Claas. 

Sectores de GB estuvieron siempre en contra porque los obliga a comprar alimentos caros al continente europeo en vez de baratos a sus ex-colonias (Canadá/Australia/Nueva Zelanda) o a Estados Unidos, Argentina, Uruguay. Alimentos caros significa menor nivel de vida de la población, repetido en esta columna ad nauseam (1). 

* Pesca: Entrar a la UE significó para GB la prohibición de pescar en sus propias aguas. El negocio quedó para los españoles. Sumergió en la pobreza a familias enteras en Escocia e Inglaterra; paralizó puertos. Expulsar los pesqueros españoles fue parte de la campaña Brexit. Los gobernantes británicos que entregaron su pesca son los que reabastecen en Puerto Argentino a los buques piratas españoles que depredan el Mar Argentino. Sobre este punto volveré.

* Siderurgia: La UE había conminado a GB a cerrar las plantas por ser contaminantes. El plan se suspendió por el resultado del referendo. Propietarios y trabajadores de acerías sostienen que se enfrentan con competencia desleal alemana. El tema acero está relacionado con el deseo de una Fuerzas Armadas única.

* Agravios económicos británicos: Alto costo de la energía, (la UE manipula qué energía se puede usar y cuál no; dilapidó miles de millones de euros en energías alternativas en vez de petróleo, uranio y carbón), alto costo de alimentos y de vivienda, pérdida de trabajos calificados y reemplazo por precarizados, pérdida de industrias tradicionales que se mudaron a Asia, giros netos a la UE por miles de millones por año y los componentes económicos de la inmigración. 

Parte de la población ve a la inmigración -promovida por la patronal- como competencia desleal en el mercado laboral. Presiona hacia abajo los sueldos y obliga a una flexibilización laboral de hecho, por aceptar trabajar fuera de convenio (rigurosos en Gran Bretaña). 

Los gobernantes atrajeron 250.000 inmigrantes anuales, sin hacer viviendas, escuelas ni hospitales a la par de las nuevas necesidades. La población local compite por los servicios públicos con los recién llegados y los alquileres se encarecieron.

ALEMANIA DESEA

Consideraciones no económicas. Alemania desea un ejército europeo. Parte de los británicos se niegan: «No ganamos la guerra para que los alemanes nos den órdenes». La Justicia Europea revisa las decisiones de la justicia ordinaria. Parte de la población repudia la asfixiante regulación soviética de la UE.

La campaña Brexit se basó en que no exista ninguna ley, ningún tribunal, ninguna reglamentación por sobre la Nación Británica.

¿Quiénes quisieron irse de la UE? 

* Millones de ciudadanos de a pie, porque el status quo les perjudica. 

* Sectores minoritarios de los partidos conservador y laborista. 

* La mayoría de las bases laboristas, gente del norte: mineros, obreros de la industria pesada y astilleros, pescadores.

* Poblaciones rurales, pequeños comerciantes, dueños de pequeñas fábricas y talleres,

* Miembros de las FFAA y de seguridad.

* Una fracción de empresarios que creen que GB podría exportar al mundo el doble o triple que actualmente si no fuera por la UE cuyas reglamentaciones suben artificialmente sus costos. El mercado europeo lo dan por perdido; «Es una cancha inclinada» (SIC). 

¿Quiénes a favor de quedarse? Toda la dirección de los partidos tradicionales, los empleados públicos, los artistas y la Academia (con millonarios subsidios), la prensa, el personal del sector financiero, gran parte de los extranjeros, el sindicalismo. 

Recomiendo Brexit The Video (2); la voz no oída. Tener en cuenta que es propaganda parcial.

PEOR NO PUEDE SER

Desconocemos la letra chica del acuerdo Mercosur-UE. El 52% de las exportaciones argentinas (3) a la UE son pellets de soja y pescado (licenciatarias españolas). Peor no puede ser. El riesgo es que los europeos desplacen nuestras modestas exportaciones al mercado brasileño, ya deficitario (4). 
Comunicado Oficial de la UE sobre el Acuerdo UE-Mercosur (5): El comunicado menciona dos veces los derechos indígenas y tres el Acuerdo de París. 

El acuerdo es contingente al respeto de los derechos de los pueblos indígenas. ¿En serio? ¿Se referirán a los celtas? ¿O el pueblo indígena europeo es el cristiano? En ese caso ¿cada vez que profanen una iglesia en Francia podremos suspender importaciones francesas o multarlos? ¿O los europeos son los únicos dueños de la virtud y pretenden custodiar que los malos americanos no den latigazos al buen salvaje? ¿Tendremos que complacer cualquier capricho pseudoindígena -apellidado Jones o Wallace- cuyo único aval de indigenidad es Amnistía Internacional (títere de la UE)? ¿Qué ha firmado esta gente?
* Gobernancia del Océano: Habla de gobernancia del océano. ¿Será el puntapié inicial para que le cedamos la soberanía del Mar Argentino? ¿Qué ha firmado esta gente?

La UE delega la supervisión de sus virtuosos requerimientos en ONGs (Amnistía Internacional/Greenpeace). El cipayaje nacional se postra ante ellos.

Los ingleses intentan escapar de esta pesadilla. Lo harán porque millones de personas saben que el status quo los perjudica y cuentan con un grupo de empresarios quienes financiaron la gesta.
Huir de la socialdemocracia, cada vez más sovietizada, brinda una euforia similar a un escape de Alcatraz.

(1) http://www.laprensa.com.ar/468205-Falacias-repetidas-por-el-Sr-Piumato.note.aspx

(2) https://www.youtube.com/watch?timeÑcontinue=4&v=UTMxfAkxfQ0

(3) http://http://www.laprensa.com.ar/478075-Los-impuestos-el-lastre-que-frena-la-iniciativa-exportadora.note.aspx

(4) http://www.laprensa.com.ar/471450-Ha-llegado-el-momento-de-irnos-del-Mercosur.note.aspx

(5)http://https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/en/ipÑ19Ñ3396

* Licenciada de Economía UBA, Master en Finanzas, Ucema. Posgrado Agronegocios, Agronomía UBA.
** Tomado de La Prensa, Argentina, http://www.laprensa.com.ar/478353-Antes-de-aplaudir-el-acuerdo-con-la-UE-conviene-mirar-el-Brexit.note.aspx

EL CARIBE EN LA GUERRA DE INDEPENDENCIA DE ESTADOS UNIDOS

José E. Muratti Toro*

A las 4:00 de la tarde del sábado 29 de abril de 1780, un cortejo fúnebre salió de la Mansión Ford, al final de la calle Morris en Morristown, Nueva Jersey, donde residía el General George Washington. En el ataúd yacía el diplomático cubano Juan de Miralles Trailhon, vestido con un “espléndido” traje de gala escarlata bordado con encajes de oro, reloj de oro con diamantes del que pendían varios sellos, relucientes anillos de diamantes en los dedos, medias de seda blanca, zapatos con hebillas incrustadas con piedras preciosas, y una peluca terminada en trencilla cubierta con un sombrero tricornio con adornos dorados.

El féretro se balanceaba con la ondulación propia de las procesiones fúnebres, sobre los hombros engalanados con las chaquetas azules de cuatro oficiales de artillería. Martha Dandridge Washington y Catherine Littlefield Greene, indumentadas con tafetanes de seda negra, seguían al cortejo presidido por los generales George Washington, Baron Von Steuben, Henry Knox, y el Dr. James Thatcher, médico militar quien documentó el evento.

Les acompañaban los congresistas John Mathews, Nathaniel Peabody, el Dr. Philip Schuyler, padre de Elizabeth Schuyler quien se convertiría en la esposa de Alexander Hamilton, y Francisco Rendón, secretario de Miralles junto a un desaliñado contingente del ejército continental cuyos uniformes colgaban sobre sus hombros como abrigos dos tallas más grandes tras el hambre sufrida en el peor invierno de toda la Guerra de Independencia de las Trece Colonias.

Un suave viento frío movía las copas de los olmos y los algarrobos a ambos lados del camino polvoriento que conduce hasta el cementerio presbiteriano que más tarde se denominaría Evergreen. Cada sesenta segundos un cañonazo resonaba sobre los campos entre Morristown y Camden haciendo temblar a los dos cientos hombres del séquito, de una milla de largo, que acompañó al comerciante y nunca confirmado “ministro plenipotenciario” del gobierno español. Este principal aliado de las Trece Colonias desde antes de la declaración de guerra de España contra Gran Bretaña, junto al gobernador de Louisiana, Bernardo de Gálvez, hizo posible el triunfo del ejército continental en Yorktown, el 19 de octubre de 1781.

Tres años y cuatro meses después de que el holandés Johannes de Graaf, gobernador de la colonia holandesa de San Eustaquio, al este de Puerto Rico, disparase once salvas a manera de saludo a un buque de la recién formada marina de guerra de las Trece Colonias que se abasteció de armas y municiones para su revolución, un cubano, nacido en Alicante, cuidado en su lecho de muerte por Martha Washington, era honrado en las más solemnes exequias fúnebres dedicadas a un extranjero por el ejército continental bajo el mando de quien se convertiría en el primer presidente de los Estados Unidos de América.

La Guerra de Independencia daría un giro hacia la victoria sobre el hasta entonces invencible ejército británico, luego que el gobernador español del territorio de Luisiana, Bernardo de Gálvez, con una flota armada en La Habana, conquistara Manchac, Mobila y Panzacola, las principales fortificaciones navales de Gran Bretaña en Luisiana, Georgia y Florida, impidiendo que llegaran refuerzos al ejército de Lord Cornwallis estacionado en Yorktown.

El triunfo de los revolucionarios obedeció tanto al valor del ejército continental, como al sitio de las fuerzas navales francesas bajo el General De Grasse en Yorktown, así como a la desarticulación de las fuerzas navales británicas en el Golfo de México y el Atlántico, por las armadas combinadas de Francia y España.

Sin embargo, el rol del Caribe y de España en la mayoría de las narraciones sobre la Guerra de Independencia que se publican en los EEUU, brilla deslumbrantemente por su ausencia. Esta exclusión solo resulta comprensible desde la decisión concertada de historiador tras historiador de clasificarla como lo suficientemente intrascendente como para excluirla de una de las revoluciones más importantes en la historia de la humanidad. Posiblemente esta Guerra de Independencia es uno de los acontecimientos más documentados de la historia. Una búsqueda electrónica en Google, en abril de 2017, generó unas 24.0 millones fuentes de información en inglés y 1,840,000 en castellano. Sin embargo, en las principales 24 historias de los Estados Unidos que se utilizan a nivel escolar y universitario del país, España es mencionada una vez y el Caribe, ninguna.

Lejos de representar un error o un desatino, esta exclusión obedece a la cosmovisión que los Estados Unidos han desarrollado de su pasado convertido en la doctrina de un excepcionalismo que le distancia del resto de las naciones e imperios. La revolución de las Trece Colonias, incontrovertiblemente se convirtió en el vórtice de la sustitución del imperio monárquico-religioso por el imperio de la ley. Pero su triunfo no fue exclusivamente propio sino el esfuerzo colectivo con los dos principales adversarios de Gran Bretaña hasta ese momento y hasta un siglo más tarde.

La Declaración de la Independencia estadounidense fue, sin lugar a dudas, el principal catalítico de las revoluciones que convirtieron a la mayoría de colonias del mundo en repúblicas independientes de los imperios que las conquistaron. Además, sirvió de fundamento para la narrativa de democratización que colocó a los Estados Unidos en un sitial ejemplarizante para las demás naciones que se concibieron como tales a partir del siglo XIX. Toda vez que su narrativa se documentó y diseminó con propósitos de aleccionar y distinguirle de las demás naciones de la modernidad, toda exclusión de acontecimientos y co-protagonistas se desprende de la decisión premeditada de convertir dichas aportaciones en irrelevantes. Hay exclusiones que son accidentes. Esta no es una de ella.

Entre 1775 y 1781,España y Francia aportaron sobre veinte millones de libras tornesas amén de cientos de miles de armas, municiones, uniformes, alimentos y medicinas al ejército continental. El 5 de agosto de 1781, el almirante de Grasse zarpó de Cap François, Haití, y se detuvo en Cuba, donde recibió 1.2 millones de libras tornesas recaudadas por las “damas de La Habana”, mediante donativos y la venta de sus joyas. Con este dinero de Grasse pagó los jornales de sus marineros y las tropas francesas y, el 6 de septiembre en Virginia, Washington pagaría sus tropas que se hallaban al punto de insubordinación toda vez que hacía meses que no habían cobrado.

El dinero suministrado por los “generosos” cubanos además se utilizó para pagar por los carretones y suministros con los cuales alimentar el ejército combinado de 5,700 norteamericanos, 3,200 milicianos, los 7,800 franceses de Rochambeau y las 3,000 tropas traídas por de Grasse desde el Caribe que sumaban unos 19,700 soldados y las mujeres, niños y otro personal de apoyo que acompañaban las tropas.

Las aportaciones de Cuba y de Juan de Miralles, uno de sus más prestigiosos comerciantes, así como la del gobernador de Luisiana, Bernardo de Gálvez, a la causa de la independencia de las Trece Colonias, comparan favorablemente con las del marqués de La Fayette, Jean-Baptiste Donatien, Conde de Rochambeau y el almirante François-Joseph Paul, Marqués de Grasse, de Francia, quienes han sido retenidos como exclusivos colaboradores de las colonias continentales en la mayoría de los relatos sobre la Guerra de Independencia de los Estados Unidos de América.

Toda ideología, sobre todo cuando no se le reconoce como tal, suele normalizar más efectivamente una visión de mundo que, por familiar y cónsona con el conocimiento legitimado por la academia, ser reviste de verosimilitud, resistiendo consistentemente la mirada crítica de sus premisas y sus cánones.

En un presente en el que el presidente de los Estados Unidos ha protagonizado una celebración militar de su independencia, mientras miles de hispanos viven en condiciones infrahumanas en lo que en 1781 era territorio español, resulta doblemente ofensivo que se criminalice a los descendientes de quienes hicieron posible el triunfo de su revolución.

 

* Oriundo de Hormigueros, estudió en la UPR-RP, CUNY, SUNY y actualmente en el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe. Ha trabajado en educación superior, desarrollo organizacional, relaciones públicas y las Asociaciones de Industriales, Industria Farmacéutica y Productos de Puerto Rico. Su cuento «La víbora del desierto de Kavir» ganó el primer premio en el certamen de El Nuevo Día en 2012. Su libro ‘La víbora del desierto de Kavir y otros cuentos’ obtuvo el segundo premio del Instituto de Literatura Puertorriqueña. En abril creó “Plaza de la Cultura”, un espacio de gestión cultural en Plaza Las Américas. En junio de 2014 fue electo presidente del PEN Club de Puerto Rico.

Tomado de El Nuevo Día (Puerto Rico), https://www.elnuevodia.com/opinion/columnas/elcaribeenlaguerradeindependenciadeestadosunidos-columna-2503670/

Los impuestos, el lastre que frena la iniciativa exportadora

Iris Speroni*

La alta carga tributaria representa un obstáculo difícil de salvar a la hora de venderle al mundo. La Argentina exporta dos tercios de su producción de aluminio. El tercio restante se utiliza para la producción de bienes intermedios. Se exportan productos semielaborados pero en menor proporción que materia prima.

Argentina es exportador de aluminio para la industria, pero el alto nivel de impuestos hace poco probable la venta de productos finales.

Hace ocho años que el país no crece y cuatro que decrece. Los motivos son una asfixiante carga impositiva que quiebra familias y empresas y un tipo de cambio retrasado artificialmente que impide la exportación.

En estos últimos años creció la exportación de servicios informáticos, fruto de una inversión de décadas en la formación de recursos humanos a costa de los contribuyentes. Rápidamente el gobierno les puso aranceles a la exportación del 10%. Nadie debe prosperar excepto los políticos y sus protegidos. Toda actividad económica lícita por fuera del grupo selecto será aniquilada. Resistirse es fútil.

ALUMINIO

La Argentina exporta dos tercios de su producción de aluminio. El tercio restante se utiliza para la producción de bienes intermedios (perfiles, cables de electricidad, tubos, laminados), con los cuales, a su vez, se elaboran productos finales. Tanto la materia prima como los productos intermedios tienen competencia de productos importados, desde 5% a 50%, según el segmento.

Se exportan productos semielaborados pero en menor proporción que materia prima. Resulta irónico. Nuestro país invirtió fuertemente para que existiera producción de aluminio argentino (una inversión privada con soporte estatal en infraestructura y créditos) con el objetivo estratégico de ser autosuficientes y abastecer a la Fábrica Militar de Aviones.

Con la intervención socialdemócrata desde Alfonsín a la fecha, FMA se cerró, nuestro aluminio sirvió para que Embraer hiciera aviones (con subsidio y crédito estatal brasileño) y para abastecer a la atrasada industria automotriz brasileña que nos venden su caros y malos autos.

El Banco Mundial dio créditos para que la Argentina instalara generadores eólicos. Con ese dinero se compran aspas a Brasil. La Argentina poseía tecnología para generadores eólicos en la década del «70. Ahora importamos aspas.

La Argentina exporta lana de vicuña a Canadá que la convierte en abrigos de u$s 5.000 la prenda. El 50% de las exportaciones a la Unión Europea están compuestas por harina y pellets de soja y pesca.
¿Por qué se exporta aluminio y no aberturas de aluminio? ¿Por qué se exportan pellets de soja y no carne de chancho? ¿Por qué se exporta madera y no aberturas o muebles o instrumentos musicales?

¿Por qué se exporta lana sucia y no tela de casimir o sweters? No es por salarios altos porque exportamos productos sin elaborar a países desarrollados con salarios el doble de los nuestros. No es por falta de capital. Los Argentinos tienen ahorros en el exterior equivalentes a un PBI.

RAZONES

Entonces ¿por qué no podemos convertir acero en una sembradora y exportarla a Hungría? ¿Por qué no podemos vender aberturas de aluminio a Estados Unidos? ¿Por qué no podemos exporta casimir 50% mohair y 50% merino a Italia? La diferencia entre exportar y vender al mercado interno es la carga impositiva. No tanto el monto sino el momento en que deben abonarse.

Si Aluar exporta un producto que vale 100, cobra ese dinero menos los derechos de exportación (ahora en 10%) y mal y tarde cobrará algún reintegro de IVA por sus insumos.

Si vende localmente agrega impuesto a los ingresos brutos, IVA e impuesto al cheque. Pagaderos inmediatamente, aunque cobre después. Con una tasa de interés del 80% anual, el costo financiero del IVA es de 4% de la venta si cobra a 90 días. Sumemos: 5% de IIBB y 4% costo financiero de IVA y 0,6% de impuesto al cheque.

El comprador, supongamos que esté en el Gran Buenos Aires, tiene 1.300 kilómetros en camión por la Ruta Nacional 3. Podría ir en barco desde Puerto Madryn a Bahía Blanca y ahí por el Ferrocarril Roca, o en barco hasta Ensenada, pero sólo el 10% de la carga se mueve por tren. El flete sale el doble por el costo impositivo. El camión y las cubiertas tienen un 100% de sobrecosto impositivo (50% camión, 50% impuestos). Peaje, tributo al Club de la Obra Pública, club del cual el presidente es socio.

El fabricante de perfiles tiene entonces: 5% de IIBB en el precio del aluminio, 21% de IVA, 4% de costo financiero sobre IVA, 1,2% de impuesto a las transacciones financieras más flete. Ya pagó más que quien importó el aluminio de Aluar (además el flete marítimo es más barato que el terrestre).

Nuestro fabricante efectúa la conversión de aluminio en perfiles. Requiere electricidad (con IIBB, IVA y 20,5% de recargo impositivo), mano de obra (con 30% de cargas sociales), maquinaria con aranceles de importación, tanto la máquina como los repuestos y el IVA de la máquina pagado por adelantado. Todo eso lo tiene que recargar a su producto. Luego le vende perfiles a un fabricante de aberturas.

Este tiene acumulado: 2 capas de IIBB, 2 capas de impuesto al cheque, el costo financiero del adelanto impositivo en ambos casos, el costo impositivo del flete de ambos tramos, más los impuestos sobre la electricidad y contratación de personal.

Cuando venda sus aberturas deberá abonar ingresos brutos, impuesto al cheque y pagar el IVA meses antes de cobrar su producto. Ya tiene acumulado 15% de IIBB, 3,6% de Impuesto al cheque, 21% de IVA, impuestos sobre los tres tramos de flete, impuestos del 20,5% sobre la electricidad, impuestos sobre el empleo de personal y el costo financiero de adelantar impuestos (paga IIBB e IVA al momento de emitir la factura, no al momento de cobrar), y además ya pagó el costo financiero de Aluar, de la fábrica de perfiles, más el propio (12%).

Aunque fueran eficientes, profesionales, con buen diseño y calidad, ¿a quién le podrán exportar un producto cuya composición es 50% de impuestos? Es por esto que podemos exportar aluminio puro y no perfiles de aluminio.

Consecuencias adicionales: por la carga impositiva, las empresas abaratan costos. Reducen la calidad. Retrasan la renovación de maquinaria. La consecuencia es ocho años de estancamiento del PBI, decrecimiento en los últimos cuatro.

ESTRATOS

Hay una capa de impuestos por cada paso en el proceso de elaboración: 1) aluminio, 2) perfiles, 3) aberturas. Para poder exportar productos terminados (desde queso parmesano a aberturas de madera o helicópteros) se necesita cambiar el sistema impositivo. No sólo las alícuotas, sino pagar el impuesto luego de la cobranza de la venta y no al momento de comprar los insumos.

Actualmente se han pagado fortunas antes de vender el primer fumigador, el primer cinturón, el primer simulador de vuelo. Si los impuestos se gravan sobre la venta final y sobre las ganancias cobradas entonces podemos aspirar a exportar productos elaborados.

Ahora sólo se puede exportar aluminio y calamar y no carteras o casimir de mohair/merino. Porque el porcentaje de impuestos de los primeros dos productos es infinitamente inferior al de los dos últimos. La primarización de las exportaciones argentinas es la consecuencia del sistema impositivo armado por la casta política argentina. El diseño impositivo y la determinación del tipo de cambio son responsabilidad del Congreso de la Nación.

La Argentina necesita que el país tenga pleno empleo. Exportar productos elaborados aumenta la necesidad de mano de obra. El pleno empleo sube el valor del salario.

PROPUESTAS

1- Eliminar los impuestos a los ingresos brutos, a los sellos, a las transferencias bancarias, y todo impuesto de cualquier clase sobre combustibles, energía eléctrica y gas.

2- Eliminar todo impuesto sobre forrajes y alimentos.

3- Bajar el IVA al 10% que se cobrará sobre todos los productos excepto alimentos, forrajes, combustibles, gas y electricidad que pagarán 0%.

4- Eliminar IVA a la maquinaria y a los barcos.

5- Eliminar los derechos de exportación.

6- Eliminar todo adelanto impositivo, percepción, retención, ganancia mínima presunta.

7- Irse del Mercosur.

8- Eliminar peajes.

9- Mejorar los Ferrocarriles y tener flota fluvial y marítima.

10- Mejorar los puertos.

11- Convivir con un tipo de cambio alto sostenido.

12- Eliminar los impuestos al trabajo.

Los primeros seis puntos son de resolución inmediata. Un crecimiento de exportaciones de productos semielaborados y terminados implica más trabajo y prosperidad.

* Licenciada de Economía UBA, Master en Finanzas, Ucema. Posgrado Agronegocios, Agronomía UBA.
** Tomado de La Prensa, Argentina, http://www.laprensa.com.ar/478075-Los-impuestos-el-lastre-que-frena-la-iniciativa-exportadora.note.aspx