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EL SECRETO DE LA PROSPERIDAD

Iris Speroni*

Es imposible activar el mercado interno cuando el salario promedio es U$D 300 mensuales.

El motor de la prosperidad

Argentina necesita arrancar su camino hacia el lugar donde todos vivamos mejor.

Los motores posibles para que un país crezca son pocos:

    • mercado interno,
    • exportaciones,
    • inversiones.

Los libros de texto de economía agregan el Estado como motor de la economía, pero en realidad es un agente más, si bien más grande, el cual incursiona en algunas de estas tres propuestas. El famoso “cavar pozos y taparlos” de Keynes. Es un ejemplo del primero, donde se pagan sueldos y esas personas van al almacén, con lo cual mueven el mercado interno. Si el Estado decide hacer una nueva Atucha o una nueva represa, es el Estado, como agente, que incursiona en el tercer punto, inversiones. Y si el Estado vende reactores nucleares vía el INVAP, entonces exporta. Con lo cual, volvemos a que tenemos tres soluciones posibles para salir del estancamiento, que son las nombradas.

Con esto cerramos la parte técnica.

¿Cuál de las tres deberíamos elegir para arrancar el motor? ¿Se puede con las tres a la vez? ¿Cómo sería?

Los últimos gobiernos (Cristina Fernández, Mauricio Macri y Alberto Fernández) quisieron mover la economía en base a incentivar el mercado interno. Y la forma de hacer —¡pardiez!— fue mediante emisión monetaria. Por eso Cristina Fernández cambió la carta orgánica del BCRA, por eso Mauricio Macri duplicó los planes sociales, por eso Alberto Fernández … Dios sabe qué quiso hacer el actual presidente.

Lo que sabemos es que esto no funciona. Porque es un mercado de pobres donde A le vende a B y nadie tiene una moneda. Es imposible activar el mercado interno cuando el salario promedio es U$D 300 mensuales. Nadie que tiene esos ingresos vive bien en ningún lugar del globo. ¿Por qué sería distinto acá?

Lo explico de otra manera. El gobierno y los amigos del gobierno (léase la UIA) tienen dos alternativas: que la gente gane bien (¿U$D 1000?) y que el kilo de carne salga 6 U$D ó que la gente gane mal y abaratar el precio de la carne con diferentes artilugios, como prohibir la exportación (nunca mediante eliminar impuestos). ¿Cuál eligen? Mantener pobre al pueblo.[1]

Entonces, pretender que el motor de la economía sea el mercado interno con salarios de hambre es contradictorio per se. Es inoperante y destinado al fracaso.

Fracaso en el que incurrieron los tres gobiernos y la razón por la que estamos cada vez más pobres.

Por lo tanto, eliminado el abusado mercado interno nos queda la inversión y/o las exportaciones como motor para arrancar la economía.

¿Exportar o invertir?

Cualquiera de los dos sirve. Pero seamos realistas, ¿quién va a invertir con la macroeconomía hecha un desastre, con todos los precios relativos distorsionados y con un BCRA que se apropia de la mitad del valor de las exportaciones y/o con una inflación de 110% anual por lo menos?

No sólo eso. Los políticos argentinos traicionan a la madre, mucho más a los comunes.

Los criadores de cerdos invirtieron consistentemente en los últimos años, al punto que la producción aumentó al 8% anual en el último lustro. De pronto, los políticos autorizan la importación de carne porcina de Brasil, con un subsidio público del 50% (cotización artificial de la divisa), a pesar de los problemas bromatológicos de la carne brasileña. Generan una competencia desleal, con importaciones a mitad de precio, mientras entregan mercadería sub par a la población.

Por lo que creo que se debe arrancar por las exportaciones y rogar que las inversiones empiecen una vez que se acomode la macro.

Exportar

¿Qué es lo que podemos exportar? Siempre sostengo que podríamos llevar las exportaciones a U$D 300 mil millones ó U$D 500 mil millones en poco tiempo, pero específicamente ¿qué podríamos exportar?

En primer lugar, hay que poner en orden la macroeconomía.

Cero inflación, permitir el libre uso de divisas para las transacciones entre privados, dejar libre la cotización de dólares, euros, yuanes, reales, rupias, rublos. Dejar de emitir letras del BCRA y por lo tanto, que el estado no determine la tasa de interés de la economía. Que los privados se presten el dinero a la tasa que quieran.

Eso va a acomodar un poco las cosas.

Ahora bien, parto de la hipótesis de que el tipo de cambio está manipulado por el BCRA. Si el BCRA dejara de intervenir en el mercado cambiario, lo esperable es que el tipo de cambio sea libre y naturalmente más alto. Eso, automáticamente hará más competitiva toda nuestra producción y por lo tanto más exportable.

Evolución de las exportaciones

De estos cuadros se desprenden dos conclusiones:

    • El saldo comercial acumulado durante el gobierno de Alberto Fernández fue de U$D 62.499 millones. Ese dinero deberían ser las reservas mínimas del BCRA. Deberíamos todos nadar en la abundancia.
    • Las exportaciones anuales crecieron un 50% en sólo tres años y sin ninguna ayuda por parte del Estado y, por el contrario, toda suerte de impedimentos.

Queda demostrado en forma práctica que podemos aumentar las exportaciones.

Cosas a exportar

¿Qué debemos exportar? ¿Cuáles son los pasos para llegar al hito de U$D 300 mil millones? ¿Y al de U$D 500 mil millones? ¿Debe el estado intervenir, manipular las inversiones, fomentar alguna actividad en especial? [2]

La respuesta genuina es que el Estado debe ordenar la macro y dejar que los ciudadanos descubran qué se puede vender y qué no. ¿Quién sabe? Tal vez un par de amigos descubren cómo hacer kayaks con fibra de vidrio y exportan al mundo o un par de hermanos misioneros cultivan hongos gastronómicos y colocan su sofisticada producción en Dubai. Así existen fenómenos como Cicaré o el Pursang de Anadón. Creo que es lo más sano que existe.

Los gobernantes no harían más que cumplir con el mandato constitucional: “…asegurar los beneficios de la libertad…” y “…promover el bienestar general…”. ¿Cómo? Sencillo, la Constitución Nacional nos lo dice: “Art. 75, inc.19. Proveer lo conducente … a la defensa del valor de la moneda…”.

En resumen, exigimos de los funcionarios que no nos compliquen la vida como lo hacen desde hace décadas.

¿Hay cosas que el gobierno debe hacer? Sí, claro. Primero, como dije, ordenar la economía; segundo, colaborar con un buen servicio de relaciones exteriores; tercero, invertir en las fuerzas armadas porque nadie respeta a un país que no puede defenderse; cuarto, administrar justicia (también mandato constitucional) de forma tal de hacer más fáciles las relaciones laborales y comerciales; quinto, generar las condiciones para tener un buen sistema de transporte tanto terrestre como fluvial como marítimo; sexto, garantizar la calidad de la provisión de energía eléctrica de tal forma de poder producir; séptimo, no interferir ni boicotear el crecimiento del interior del país [3].

En concreto, ¿cómo crecerán las exportaciones?

Se llegará de los actuales U$D 88 mil millones a U$D 300 mil millones si damos los siguientes pasos:

    • al sincerar la macro (tipo de cambio y tasa de interés),
    • y al bajar impuestos (DEX e impuesto a las ganancias) se lograrán dos efectos:
      1. se blanquearán exportaciones ya existentes,
      2. determinadas actividades que hoy están en equilibrio o levemente deficitarias pasarán a ser superavitarias y aumentarán sus volúmenes exportables.

Ejemplos:

    1. Actualmente, según las autoridades del sector, se declaran sólo la mitad de las capturas de pesca. La otra mitad se trasborda en altamar y no se declara a la Aduana. Eso duplicará las exportaciones formales en el sector sin inversión adicional alguna,
    2. En los últimos años se redujeron las superficies sembradas y plantadas con arroz o arándanos porque, debido al tipo de cambio retrasado, las explotaciones se volvieron deficitarias, en particular para el pequeño productor. Ídem bodegas vitivinícolas o limones en Tucumán.

El segundo paso requerirá cierta maduración, en particular lo que tiene que ver con que la población gane confianza en la estabilidad de la economía. Entonces los rubros a crecer y exportar en temas agropecuarios son:

    • carne aviar,
    • carne porcina,
    • carne caprina,
    • carne ovina,
    • carne de camélidos [4],
    • equinos vivos,
    • lanas (ovina, caprina, camélidos),
    • cultivos de secano (uvas, olivos, frutas secas, azafrán),
    • frutas finas,
    • frutas en general,
    • floricultura (hoy inexistente) [5],
    • la producción vacuna mediante el uso de pasturas y la mejoras que hoy la faltas de rendimiento no permiten (índices de fertilidad, pesos promedios, etc.),
    • la producción tradicional de granos mediante mejoras en el manejo.

Luego tenemos los aumentos de producción que sí requieren inversiones. El principal es el riego. Esto permitirá triplicar la superficie arable.

El mercado lácteo debe llegar a exportar U$D 4.000 millones anuales entre leche en polvo, quesos y otros productos. Esto requiere la reformulación completa de las relaciones comerciales intracadena.

El mercado internacional de maquinaria agrícola ascendió en el año 2021 a U$D 81 mil millones. Argentina no tiene participación alguna. Debe aspirar a estar dentro de los 10 primeros proveedores mundiales.

En cuanto a pesca, debe reformularse. Custodiar el Mar Argentino e impedir la pesca furtiva, cancelar las actuales concesiones y armar un nuevo esquema. Esto duplicará o triplicará los actuales valores.

Estimular la acuicultura. Tanto de peces como de mariscos. Podemos llegar a exportar entre U$D 2.000 y U$D 5.000 millones en este rubro, además de traer prosperidad a las costas patagónicas.

Reformular el negocio textil. Actualmente existe para satisfacer el mercado interno. Básicamente consiste en la confección sobre telas asiáticas, a veces introducidas por contrabando. Caro y de mala calidad. El temperamento deber ser distinto y no sabemos si los actuales empresarios, llenos de vicios, son las personas indicadas. El negocio deben ser las fibras naturales (lanas, algodón, lino, bambú), lavado, hilado y si es posible, tejido. Asociarse con empresas italianas para ser proveedores de su confección y/o confeccionar aquí con su supervisión. Buscar el sector de alta calidad y alto precio dentro del mercado internacional.

Ídem para los cueros. Un guante de cabritilla cuesta 200 euros en Piazza di Spagna en Roma. Los guantes de cuero de oveja para motociclistas tienen muy buenos precios. Toda esa industria (calzado, marroquinería, accesorios, talabartería) requiere inversión y alta calidad de mano de obra. Por lo que necesitaremos tiempo y dinero para ambos. Totalmente factible. Italia exporta U$D 6.600 millones de calzado de cuero por año; Brasil U$D 353 millones. Nosotros no existimos.

Industria del conocimiento. Si adecuamos el tipo de cambio y los impuestos, la exportación de servicios explotará. Eso incluye informática, consultorías, docencia, auditoría. Nada hay que hacer excepto dejar de ahorcar a los protagonistas.

En cuanto a los combustibles, estamos en una situación desafortunada en este momento. Exportamos petróleo crudo e importamos refinados. Eso debe darse vuelta y la única forma es mediante inversión en refinerías de petróleo.

Industrias

Cada una es un mundo. Actualmente exportamos el 90% de la producción de aluminio en lingotes. Tal vez el desafío sea exportar productos elaborados en base a aluminio.

La industria maderera está en la misma situación que otras. Sólo necesitan un tipo de cambio competitivo, impuestos razonables y fletes.

El aumento del tipo de cambio le dará competitividad a la producción industrial nacional. Dejaremos de importar de Brasil shampoo, jabón de tocador o cubiertos. No hay ningún secreto de producción. El único secreto brasileño es el tipo de cambio de importación al 50% del verdadero y la ausencia de derechos de importación. Cortar con el tipo de cambio subsidiado solamente aumentará la actividad industrial doméstica. Algunos de ellos podrán exportar.

Un punto que no se tiene en cuenta es el flete internacional. Para las cuentas nacionales es una importación de servicios, al igual que los seguros. Si ciudadanos argentinos se deciden a ser armadores nos podemos ahorrar algún número entre cero y U$D 6.000 millones anuales. Una inversión que hoy no se concreta por las intervenciones estatales, en particular en el mercado de cambios y tributarias.

El Estado debe invertir o facilitar las inversiones privadas en dos grandes rubros: fletes internos, esto es habilitar puertos sobre el Paraná y dejar que existan las flotas fluviales argentinas, permitir el transporte marítimo de carga por los puertos patagónicos con el fin de evitar que todo llegue por camión vía la Ruta 3, dejar navegable el canal Magdalena y poner a punto los FFCC de carga. Fomentar el transporte aéreo para los productos que lo ameriten.

De a poco, ladrillo a ladrillo, construir nuestra prosperidad.

Inversión

La contracara de las exportaciones debe ser la inversión. El dinero ganado por exportar no debe transformarse en tesoro (amontonarlo en una cuenta corriente) sino convertirlo en inversión.

En inversión privada, con todas las actividades que se nos ocurran.

Pública, al garantizar calidad en transporte, conectividad por fibra óptica y satelital; y en energía eléctrica de calidad (potencia) en todo el país.

La inversión es necesaria por dos razones; porque es imprescindible para crecer constantemente, y porque si no se hace, la inundación de exportaciones producirá una caída del valor de la divisa. La forma de prevenirlo es mediante la inversión y la importación de maquinaria.

Ése fue el secreto del crecimiento desde 1880 a 1975. Exportaciones contra inversión.

Por último, no hay que esperar inversiones externas, es un espejismo. Dejemos que los argentinos saquen sus dólares de sus escondites y confíen en el país. Ésa y no otra debe ser la base de la inversión futuro que llevará nuestro PBI y nuestras exportaciones a niveles jamás soñados.

Prosperidad

El aumento de exportaciones tendrá los siguientes efectos: aumento de demanda laboral que llevará inevitablemente a un aumento del salario medio, y un aumento de la prosperidad en las provincias en relación con la capital y el Gran Buenos Aires. Los objetivos son pleno empleo, formalización del mismo y salario medio de U$D 1.400.

Habrá movilidad de población dentro del territorio nacional. Debemos desarrollar la Argentina marítima.

Si además invertimos en riego, triplicaremos la superficie arable y se requerirán grandes inversiones en construcción civil en todos los pueblos y ciudades que nacerán en nuestro territorio.

¡El futuro es nuestro! Sólo tenemos que sacarnos estos parásitos de encima.

 

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas

[1] La solución de los gobiernos es abaratar artificialmente los productos que los pobres (los que ganan U$D 200 ó U$D 300, es decir todos) compran. Y así artificialmente, subir su poder de compra. Es buscar el equilibrio hacia abajo, hacia la pobreza, en lugar de buscar el equilibrio hacia la prosperidad.

Carne y el valor del salario episodio 258.701 bis

http://restaurarg.blogspot.com/2021/05/carne-y-el-valor-del-salario-episodio.html

[2] Lo que hay que erradicar de la vida política argentina y de nuestro vocabulario es la fórmula UIA, la fórmula De Mendiguren: exenciones impositivas + subsidios + créditos blandos. Nunca más nada de eso. La solución es todo lo contrario: macroeconomía estable, bajos impuestos y dejar a la gente tranquila con trabas burocráticas. Nosotros nos arreglamos solos.

[3] Lo que ha hecho mediante: 1. tipo de cambio artificialmente bajo; 2. malos y caros fletes; 3. altas tasas de interés; 4. acumular empleados públicos (consumo) en la capital federal.

[4] En los tres últimos casos las exportaciones son inexistentes. Tanto Paraguay como Uruguay crecieron en los rubros.

[5] Las exportaciones de Holanda son U$D 5.170 millones anuales. Colombia exporta U$D 1730 millones anuales, en particular rosas.

 

Notas relacionadas

Carne y el valor del salario episodio 258.701 bis

http://restaurarg.blogspot.com/2021/05/carne-y-el-valor-del-salario-episodio.html

Echar al régimen

http://restaurarg.blogspot.com/2022/10/echar-al-regimen.html

300 dólares

http://restaurarg.blogspot.com/2020/11/300-dolares.html

 

Publicado el 13/05/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/05/el-secreto-de-la-prosperidad.html

 

HARDPOWER: LAS COSAS, EL TRABAJO Y LA POBLACIÓN

Iris Speroni*

Frente a esta apología de la Muerte con la que somos bombardeados, lo verdaderamente disruptivo, revolucionario, contestatario e irreverente es apostar a la Vida.

 

En los últimos años hemos sido bombardeados por la liturgia de un nuevo credo, con epicentro en el WEF/FEM, Davos, y toda una red de difusión que incluye Naciones Unidas, los medios masivos de comunicación, las grandes empresas y las burocracias de las naciones de Occidente.

En vocabulario marxista: la superestructura. Sistema integrado por autoridades (ejecutivo, legislativo, judicial), el conjunto de leyes y normas, las manifestaciones de prensa, de entretenimiento o artísticas, el  discurso en los centros de estudios.

Luego están las cosas (estructura). 

Te prometo tristeza, soledad, pobreza y muerte

El nuevo credo le plantea a la plebe un mundo horrible y desesperanzador. “No tendrás nada y serás feliz”. Plantean un mundo donde uno debe asesinar a sus fetos y a sus padres cuando éstos se vuelven ancianos, no estar en pareja, practicar el onanismo, vivir de prestado —siempre y cuando autoricen usar el dinero—, no ser dueño de un techo, con un trabajo precario, con la amenaza permanente de terminar en la calle o bajo un puente; y por último, comer inmundicias.

Putin señaló en WEF (Foro Económico Mundial) hace unos años, que los presentes controlan Occidente; el 12% de la población mundial. Mientras los sacerdotes de la nueva religión elucubran sus nuevas pócimas, el resto del mundo está en otra (el 88% restante).

Un futuro venturoso posible

La Nación Argentina está mal. Sufre su propio tratado de Versalles, lo que traté en IMPERIO AUSTRAL (*). El correlato es un pueblo sufrido: desocupación, subocupación, trabajo precario, pobres servicios de salud y educación, mala alimentación —por falta de dinero y por falta de calidad en los alimentos—, mal vestidos y calzados, sometidos a la violencia anárquica de los delincuentes comunes, con mal servicio de transporte.

Las dos coaliciones por ahora mayoritarias, TdF y JxC, no tienen plan alguno para el país excepto continuar el sistema actual, vigente desde las últimas décadas y eventualmente emparchar lo que no dé para más, financiado con altos impuestos y endeudamiento. No tienen programa alguno para ninguna de las áreas de gobierno.

La tercera opción que amanece, que tiene a Milei como cara visible, ha expuesto su eventual solución para el problema de la inflación (clausurar la moneda propia). Desconocemos —o yo desconozco— sus propuestas en los rubros restantes: defensa, administración de justicia, seguridad, educación, salud, vivienda, infraestructura de transporte, energía, relaciones exteriores, etc.

Qué es hoy ser revolucionario

Frente a esta apología de la Muerte con la que somos bombardeados, lo verdaderamente disruptivo, revolucionario, contestatario e irreverente es apostar a la Vida. Es apostar a tener un futuro como Nación, como comunidad, como familia y como persona.

Toda propuesta debe tener dos componentes: uno real y físico y otro intangible. Hoy el tema serán algunos objetivos tangibles a proponer a la sociedad [1] (*).

La Revolución – Las Cosas

El país debe subir su población a 100 millones de personas lo antes posible. Para que la gente quiera formar una familia debe contar con: expectativas de un futuro mejor, posibilidades de prosperar. Traduciré esto a cosas concretas.

    • Que una familia con un único ingreso acceda a la vivienda propia. Para ello hacer lo contrario a los últimos años [2]. La propuesta es: a. distribuir población por todo el país —donde la tierra es más barata—, b. que haya oportunidades para que la familia pueda comprar terreno y hacerse su propia casa o comprar una de las decenas de miles abandonadas en todo el país y remozarlas [3]. Nada más revolucionario hoy que una familia posea su propio hogar, con un único ingreso y sin hipotecarse toda la vida.
    • Que toda familia con un único ingreso acceda a su propio vehículo barato, de bajo mantenimiento, de repuestos de precio módico y reparación fácil y económica. En caso de los hogares con más de un vehículo ofrecer que al menos uno de los dos sea analógico
    • Pleno empleo.
    • Buen salario promedio. Objetivo U$D 1.400 mensuales.
    • Estímulo a familias numerosas:
      • Pago estatal por hijo a la totalidad de la población (no únicamente a los más humildes).
      • Pago estatal por nacimiento.
      • Pago adicional por niño por arriba de cuatro hijos.
      • Pago estatal por escolarización.
      • Salario familiar [4] —de alto monto— por cónyuge en los casos en que a) estén legalmente casados y b) uno de los dos cónyuges no trabaje. Para la totalidad de los trabajadores y no como actualmente para los de bajos ingresos.
      • Plus en caso de educar en casa (homeschooling).
      • Créditos hipotecarios para compra/ampliación de vivienda.
      • Créditos hipotecarios para parejas jóvenes.

Inmigración. Con buenos salarios, la inmigración desde países limítrofes continuará. La propuesta a otros grupos no será el dinero (no podríamos igualar los ingresos de Francia o Alemania) pero sí ofrecer libertad: libertad para criar los hijos, practicar el cristianismo, tener vivienda y auto propio [5].

Ocupar el territorio

Art. 75 inc. 19 de la Constitución Nacional: “…Proveer al crecimiento armónico de la Nación y al poblamiento de su territorio; promover políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones…”.

Recuperar el FFCC. Requiere invertir en vías, comunicaciones, material rodante, locomotoras. Poseemos lo más valioso: la propiedad de los terrenos de la traza.

Un plan de riego en las ⅔ de la superficie del país hoy árida. Parte para que sean tierras destinadas a la agricultura y ganadería, otra parte a bosques de madera nobles —para ser explotados económicamente dentro de algunas décadas—, cultivos de secano, árboles de frutas secas. Requerirá población para trabajar las nuevas áreas o brindar servicios a ellos (docentes, personal médico y paramédico, policías, personal de FFCC, comercios, etc.).

En cuanto a la construcción (obra civil) están las obras de riego en sí, más todas las mejoras en los campos (alambradas, molinos, aguadas, silos, graneros, cobertizos), las viviendas en los campos y en los pueblos, más la infraestructura en los pueblos.

Esto permitirá que la población se instale donde los terrenos son más baratos que en los actuales centros urbanos.

Una buena infraestructura de comunicaciones permitirá que personas que trabajan en forma remota se instalen en zonas rurales o semirurales y puedan combinar su trabajo actual con la atención conjuntamente con su cónyuge de pequeñas fincas [6].

En los últimos 15 años se perdieron 100.000 familias productoras agropecuarias. Un objetivo debe ser, primero, recuperarlas, en segundo lugar, ampliar el número original del año 2000. En resumen: darle acceso a 200.000 nuevas familias a la producción agropecuaria. Los modos pueden ser: facilitar la compra de tierras (acrecentar hectáreas para explotaciones existentes, acceso a hijos para que armen su propia explotación, facilitar el acceso a la propiedad a trabajadores y contratistas rurales, nuevos emprendimientos en tierras ganadas al riego).

Movimientos poblacionales fomentados desde el Estado: la primera parte es ofrecer servicios públicos en zonas que hoy carecen de ellos o si existen son de inferior calidad que en los centros urbanos. Asimismo nuevas oportunidades de trabajo que vienen de la explotación de tierras hoy áridas que pasarán a ser rentables. La segunda parte es el traslado de todas las actividades públicas federales que no sean los ministerios [7], como ANSES, PAMI, todos los Institutos, consejos, comisiones [8] [9].

Promover el traslado de matrimonios jubilados (con un premio mensual en la jubilación) a pequeñas localidades del interior de PBA y el resto de las provincias o volver a la provincia natal. Esto liberará viviendas en Capital y GBA para alquiler.

El gran movimiento de empleados públicos, junto al salario familiar (que un cónyuge no trabaje fuera de la casa) llevará a a) baja de demanda de vivienda en la Ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires, b) baja global de empleados públicos (habrá familias que preferirán que uno de sus miembros renuncie y se quede con la familia), c) mayor demanda doméstica en el interior del país.

Incentivar la construcción de viviendas unifamiliares para alquiler.

Ahorro

Se procurará que las familias ahorren y que el ahorro nacional esté en manos de las familias. Complementariamente se incentivará que las familias se capitalicen mediante:

    • la compra de vivienda
    • la compra de parcelas rurales (aunque sea 1 hectárea para el momento de retiro).
    • la compra de su vehículo
    • la instalación de pequeños comercios/talleres/compra de maquinaria.

El ahorro será:

    • fomentar el ahorro familiar en oro, plata y monedas duras.
    • cuentas de ahorro previsional en oro, plata y monedas duras.
    • cuentas de ahorro por indemnización por fin del contrato laboral (despido causado, despido no causado, renuncia, jubilación, muerte, invalidez) en oro, plata o monedas duras.

El Estado acuñará pesos oros y los hará accesibles a la población.

La Argentina no necesita crédito para crecer. Puede basarse en el propio ahorro que posee la población. El Estado debe generar las condiciones para que las familias quieran invertir su ahorro en: instalar/ampliar/mejorar negocios comerciales, instalar industrias/talleres, mejorar sus parcelas rurales, construir viviendas para uso propio o renta. Invertir en transporte. 

Hoy existe un enorme ahorro familiar dormido por desconfianza del pueblo en las autoridades (a mis ojos totalmente justificado). Esto produce enormes pérdidas en el PBI del país [10].

Pleno empleo y buenos salarios

¿Cómo pasar de una economía con trabajo 50% informal y salarios de hambre a una pujante, con pleno empleo y mejores salarios?

El motor de la economía debe ser la exportación. Poner como objetivo 500 mil millones de dólares (cinco veces los volúmenes actuales).

Esto se logrará:

    • Liberar el tipo de cambio. Que los derechos de exportación sean solamente una tasa aduanera de baja alícuota. Eso estimulará el aumento de volúmenes de producción.
    • Ampliar la frontera agrícola (triplicarla) mediante el riego en Gran Chaco (Formosa, Chaco, norte de Santa Fe, este de Salta y Santiago del Estero); Patagonia, Cuyo, Andes norte (La Rioja, Catamarca, oeste de Salta y Jujuy).
    • Transformar las exportaciones agrícola de forraje (tortas y pellets de soja) y combustible (aceite de soja) a alimentos. Carnes de cerdo, vacuna, aviar, caprina, ovina; lácteos (objetivo U$D 4.000 MM anuales en quesos); acuicultura, fruticultura, cultivos de secano, embutidos, productos especializados.
    • Aumentar las exportaciones industriales [11].

Para aumentar las exportaciones hay que liberar el tipo de cambio. Para que no afecte el ingreso de las familias se deben retirar todos los impuestos sobre los alimentos.

Energía

El interior del país hoy sufre de falta de potencia. Eso obliga a iniciar equipos obsoletos que encarecen el valor del KWh.

Lo ideal es que las empresas que sean electricidad-intensivas se ubiquen cerca de las grandes generadoras (Chocón, Yacyretá, Atucha, Salto Grande, Piedra del Águila). En caso contrario, procurar que tengan su propia fuente.

Fomentar la generación de electricidad por biodigestores en todo el país. Buscar la autonomía y no depender obligatoriamente del sistema interconectado nacional. En los casos en que se pueda, incluso que la propia vivienda unifamiliar sea autónoma. Cambiar el paradigma. Mantener la interconectividad de un sistema único para todo el país; pero al mismo tiempo estimular la autonomía y autogeneración.

Dicho esto, debe de haber un único precio del KWh en todo el país. Igual producto, igual precio.

Fomentar el uso de biodiésel en la generación eléctrica y para uso vehicular (camiones, automóviles diésel y locomotoras). Ídem con alconafta.

En cuanto a Vaca Muerta y cualquier otro yacimiento, debe promoverse que las empresas inviertan y ganen plata pero la prioridad debe ser el autoabastecimiento. Más teniendo en cuenta que se planifica un enorme incremento de la producción y los volúmenes de exportación.

El país debe respetar los precios internacionales para determinar los precios domésticos. Para no golpear la capacidad de compra del salario familiar eliminar todo impuesto sobre combustible y sobre servicios hogareños y comerciales de gas y electricidad.

Transporte

No quiero abundar. FFCC, flota fluvial y marítima, fomentar el aumento de la flota de camiones para cuentapropistas, vehículos de carga pequeños para comercios y talleres y cuentapropistas. Rehabilitar astilleros. Invertir en el canal Magdalena y recuperar el Paraná. Aerocargas en el país y para colocar exportaciones. Un país grande necesita un buen sistema de transporte (y barato) para conectarnos.

Costos e Impuestos

El país sólo necesita que el estado deje tranquila a la gente. No necesita subsidios a las empresas, ni subsidios a la energía ni nada.

Las empresas necesitan:

    • que el Estado elimine adelantos impositivos (sin retenciones, sin percepciones, sin otros adelantos).
    • pocos impuestos.
    • bajas alícuotas
    • Cero impuestos a alimentos, combustibles, servicios de gas y electricidad.

Las familias necesitan para elevar su nivel de vida:

    • Buenos servicios públicos (seguridad, salud, educación, transporte, administración de justicia)
    • Alimentos de calidad y sin impuestos. Buen sistema de comercialización de alimentos.
    • Acceso a la vivienda y a la calidad de hábitat (aire y agua pura), vegetación.
    • Salario medio de U$D 1400 y 100% legal.
    • Posibilidad de trabajo independiente (oficios, capital para talleres/comercios, profesión).
    • Eliminar todo impuesto al trabajo, ya sea en relación de dependencia o independiente.
    • Eliminar ganancias cuarta categoría.
Aumento de la producción

La locomotora de la nueva economía serán las exportaciones.

El segundo motor será la obra civil. La ocupación de territorio, la construcción de millones de viviendas, la inversión en infraestructura de transporte, energía y comunicaciones, las nuevas ciudades. Mejorar toda la inversión en instalaciones educativas y centros de salud.

Por último, el país debe volver a invertir en defensa.

La producción aumenta por dos razones: un incremento de demanda y un aumento de oferta que la acompañe.

La demanda de bienes y servicios de un país se produce por: exportaciones, inversión, gasto doméstico (cuando yo compro una remera) o gasto público (cuando el ministerio compra un paquete de fideos). De estos cuatro motores de la economía elegimos dos: exportaciones e inversiones.

Otro tema diferente es la oferta. Este modelo propone que a) la inversión sea privada, b) la financiación sea de la propia familia, autofinanciación; usar los propios ahorros. Nada de subsidios del Estado, nada de crédito blando, nada de darle lugar a los De Mendigurens de la vida.

El aumento de oferta requiere mayor capital: un nuevo comercio o un aumento de stock en comercio existente, una nueva máquina, una nueva instalación (consultorio odontológico para servicios de odontología), personal apto, dinero para capital de trabajo (comprar insumos).

Los argentinos tenemos miles de millones de ahorro inactivos a resguardo de la rapiña estatal. Mover ese dinero e invertirlo requerirá: a) expectativa de tiempos mejores, b) estabilidad política y monetaria, c) baja/modificación de impuestos, d) libertad de trabajo (eliminar trabas regulatorias).

Habrá personal para algunas tareas y para otras no. El aumento de demanda de trabajo implicará: aumento del salario promedio, capacitación de las personas, estimular la inmigración de gente capacitada. Sobre educación se hablará otro día.

Por hoy, terminamos. El próximo es sobre softpower: seguridad, salud, RREE, educación/formación/instrucción pública, administración de justicia, impuestos, arte, prensa.

 

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas

[1] El equipo de Donald Trump elaboró una lista de objetivos tangibles para elevar a consideración de los votantes en 2024. Por Edward Ring, DEFINIR LAS PRIORIDADES DE UNA NACIÓN.

[2] En los últimos años la única propuesta de los gobiernos fue construir casas con las siguientes consecuencias: a) el ritmo de construcción fiscal es inferior al de las necesidades de la población, b) da lugar a arbitrariedades por ser los políticos quienes asignan un bien escaso, c) como toda obra pública da lugar a sobreprecios, d) los funcionarios apuestan a la macrocefalia, esto es hacen infraestructura (cloacas, tendido eléctrico) y viviendas en capital y gran Buenos Aires en lugar de ofrecer mejores condiciones en el interior de PBA y en el interior del país.

En menor medida y esporádicamente, existe oferta de créditos hipotecarios sin criterio geográfico. El efecto fue sobrevalorar las propiedades en ciertos barrios de Buenos Aires y otras ciudades grandes y la proliferación de edificios de ocho pisos y departamentos pequeños en ciudades como La Plata, Río Cuarto y casi todas las capitales del interior. Destruyeron el patrimonio arquitectónico de esas ciudades, en su mayoría con construcciones de una planta clásicas, de la belle époque o art nouveau. Confinaron a decenas de miles de familias a vivir en un departamentito, sin posibilidad de expansión.

[3] Esto requiere:

  1. a) habilitación de nuevos materiales y nuevas técnicas de construcción (madera, bambú, adobe, estructuras metálicas, bloques, laminados varios, fibra de carbono, distintas opciones de aberturas/techos/pisos, otros); 
  2. b) baja de los costos impositivos de los materiales de construcción;
  3. c) impedir que fabricantes cartelizados o monopólicos establezcan precios por encima de los internacionales;
  4. d) generar infraestructura para el desarrollo de nuevos barrios en todo el país: conectividad (fibra óptica y satélite), electricidad, agua corriente y cloacas sólo si es necesario – no soy una cloacalista fanática tipo Banco Mundial -, caminos y FFCC; infraestructuras sociales: escuela, hospital, comisaría, club.
  5. e) Procurar en lo posible que las casas sean autosustentables: aislamiento frío calor, techos altos, ventanas con persianas, aislamiento en paredes/pisos/techos, paneles solares y/o generador eólico individual. Cocina económica alternativa a la de gas o eléctrica.
  6. f) Procurar que todas las viviendas sean: unifamiliares, con jardín al frente y en el fondo lugar para parrilla, horno de barro, huerto, gallinero, lugar para que la superficie cubierta aumente con la familia (para más dormitorios).
  7. g) asegurar que los vecinos no les roben los materiales al que está construyendo una casa. Esto hoy es un verdadero problema.

[4] El objetivo es estimular que uno de los cónyuges se dedique a tiempo completo al hogar de ser su voluntad.

[5] Cuando a los europeos les prohíban los autos y salir de un radio de 2 km de sus casas, varios serán los que quieran dejar sociedades sofocantes y venir a un lugar en el que se sientan cómodos. Con una economía pujante, podemos ser un centro de atracción para los cristianos que pasarán a ser perseguidos en Occidente. Para eso hay que arreglar la seguridad (la paz interior) y la administración de justicia. El resto, la gente se las arregla.

[6] Actualmente el problema no es sólo la concentración en Capital y GBA sino en cada capital de provincia (en algunos casos el 50% de la población).

[7] Los ministerios deben permanecer en la Capital Federal (la que ésta sea) por orden constitucional.

[8] Se debe tomar el recaudo de que no se instalen en ciudades hoy grandes. Ningún sentido tiene despoblar la capital federal (Buenos Aires) para repetir el error de macrocefalia en Rosario o Córdoba. Se deben ubicar en ciudades pequeñas de provincia y diseminados en distintas provincias.

[9] También trasladar los departamentos informáticos de los grandes bloques burocráticos separados del principal. Ejemplo: si traslado la ANSES a Rawson, mando informática a La Rioja. Exigir que el backup de los bancos privados esté al menos a 1.500 km de la capital, en pequeñas localidades.

[10] Ejemplos de pérdida de producción por falta de capital. En Mendoza todos los años se pierden toneladas y toneladas de fruta por el granizo. Se solucionaría con mallas antigranizo. Los productores o no tienen capital para esa inversión o no ven el retorno de la misma con los actuales precios (1. si exportan el BCRA se queda con la mitad, 2. las bodegas amenazan con importar uva chilena comprada con dólar a mitad de precio). En la última gran helada en la Patagonia se perdieron millones de cabezas ovinas. ¿Por la helada? No, porque no tienen cobertizos para los animales. Y no lo tienen por la baja inversión de las explotaciones que trabajan apenas por arriba del punto de equilibrio. Podría decir lo mismo con los limones o las cerezas. Existen infinidades de explotaciones que podrían multiplicarse con mayor inversión de capital. Para eso hay que generar las condiciones.

[11] Actualmente Argentina exporta el 90% de su producción de aluminio. ¿Por qué no exporta aberturas de aluminio? a) por tipo de cambio retrasado, b) por los impuestos que inhiben el procesamiento industrial de los lingotes de aluminio. Se puede trasladar este ejemplo a cientos de productos. Argentina podría ser líder en calzado, marroquinería, talabartería, muebles de cuero, interiores de vehículos (la lista es infinita). Podemos ir rubro a rubro y encontrar numerosas posibilidades.

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Imperio Austral

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Definir las prioridades de una nación

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Artículo publicado el 08/04/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/04/hardpower-las-cosas-el-trabajo-y-la.html

ARGENTINA SIN FRENOS

Editorial de Folha de São Paulo del día 04/04/2023

El deterioro en el país vecino muestra al Brasil la importancia de seguir reglas fiscales y monetarias.

 

En las primeras décadas del siglo pasado, la Argentina figuraba entre los países más ricos y promisorios del mundo, exhibiendo una renta per cápita superior a las de Francia, Alemania e Italia. Para los emigrantes europeos de la época, era decisión difícil optar entre la nación de América del Sur y los Estados Unidos.

Hasta los años 1940, los argentinos aún mantenían al país relativamente rico y formado por familias de clase media. Con suelo fértil, las exportaciones de granos y carnes empujaban la economía, que pasaba por el proceso de industrialización.

La segunda mitad del siglo 20, sin embargo, marca el inicio de una larga decadencia, punteada por crisis agudas que mantuvieron la renta per cápita del país estancada en los últimos 40 años.

Esa decadencia culmina ahora en la formación de una nueva tormenta, en año de elección presidencial. El alza de los precios, superior al 100% en 12 meses, amenaza desmoronarse hacia un escenario de hiperinflación y agravamiento de las condiciones sociales.

Datos oficiales colocan al 43,1% de los argentinos (19,8 millones) debajo de la línea de pobreza. En el mercado del trabajo, 70% de las nuevas vacantes son informales y más del 40% de las formales pagan salarios insuficientes para la compra de una canasta básica completa.

En la base de la crisis argentina está el hecho de, en más de un siglo, el país tener encerrado apenas diez años con las cuentas públicas en azul. Y, con la recurrencia de gobiernos populistas, haber cerrado su economía y multiplicado beneficios a la población y a las empresas sin la debida responsabilidad fiscal.

Actualmente, subsidios estatales en energía y transportes consumen casi el doble de los gastos en salud; el empleo estatal creció de 2,7 millones a 3,4 millones en diez años; y 55% de las jubilaciones fueron otorgadas sin aportes de los beneficiados.

Para financiar gastos, la Argentina pasó simplemente a emitir pesos en cantidades billonarias, al mismo tiempo en que sofoca al sector productivo con más impuestos, sobre todo al agronegocio generado de dólares, moneda absolutamente escasa en el país.

Sin solución en el horizonte, el drama argentino explicita como la falta de reglas para el funcionamiento de la economía puede desorganizar un país que ya fue rico y próspero —y tornar extremadamente difícil la vuelta a la normalidad—.

Para Brasil, el vecino sirve de ejemplo práctico sobre como metas para la inflación, un Banco Central autónomo, la Ley de Responsabilidad Fiscal, reformas como la de las Previsionales y, ahora, la búsqueda por un nuevo marco fiscal fueran y son fundamentales para evitar que gobiernos de turno arruinen progresivamente, y sin frenos, las condiciones de vida de una sociedad.

 

Traducido por el Equipo de la SAEEG.