ES LO QUE DAN

Iris Speroni*

 

– ¡Observen nuestra nueva ronda de sanciones!

– no más gas.

– más migrantes.

– acabemos con la carne.

– sin géneros.

– energía verde.

– impuesto al carbón.

– cuarta dosis.

– sin propiedad.

– ¿Estás seguro que esto nos ayudará a derrotar a los rusos?

– ¿Rusos?

*Posteado por William Cacusso https://twitter.com/williamcacusso/status/1519345795941687296

 

El viernes 29 de abril de este año escuché con atención al Sr. Jorge Castro en su intervención en el programa Industria Verde bajo la conducción del Ing. Huergo.

No es de extrañar que coincidiera con el expositor toda vez que varias de mis notas y mis dichos han sido inspirados y desarrollados a partir de los libros “Perón y la globalización” y “La visión estratégica de Juan Domingo Perón” de autoría del Sr. Jorge Castro [1].

Vamos a los conceptos vertidos. Señaló que gran parte de la riqueza del país es generada por el sector agropecuario y complementariamente por la industrialización de dichos productos (agroindustria). Estamos en condiciones de aumentar varias veces los volúmenes de producción y por lo tanto de exportación de innumerable cantidad de productos sin desatender el mercado externo. Vivimos una situación excepcional a nivel internacional a favor de los intereses de nuestra nación. Lamentablemente las decisiones de la nación las toman otros sectores y el campo no cuenta con una visión estratégica del país ni la forma de hacerla valer. Instó a brindar una estrategia para la nación y llevarla adelante.

Espero haber entendido todo correctamente. Si así no fuere, pido disculpas de antemano y haré las correcciones pertinentes cuando me las hagan notar.

Hasta acá Jorge Castro. Ahora arranco con mis añadidos.

El campo al igual que otros sectores que generan riqueza en la nación no forman parte del diseño estratégico de nuestro país ni participan de las decisiones —ni siquiera de las conyunturales, mucho menos de las estructurales—. Los medios de comunicación y las universidades (“La Catedral”), al igual que el conjunto de políticos y hombres públicos, es decir, la totalidad de la voz pública, defiende los intereses y el proyecto de futuro de quienes viven de los sectores sin voz (trabajadores activos y pasivos, campo, pymes, programadores de sistemas, profesionales monotributistas y/o independientes, y un largo etcétera). “Quienes gobiernan” ofrecen permanentemente cómo quitarle riqueza a cualquiera o a varios o a todos estos sectores sin voz. Lo expuse en EQUILIBRIO INESTABLE.

“Quienes gobiernan” es el mote que le puse a un conjunto de personas miembros de la política; o de cámaras empresariales como la banca, la industria automotriz, la minería, las petroleras, algunos sectores industriales (no todos), algunos “agroindustriales”; o algunos sindicalistas (no así los trabajadores). Todos ellos defienden sus propios intereses que consisten en lo político pervivir y preservar su lugar de privilegio, en lo económico continuar la succión de la riqueza de la nación para sí. Todos ellos se conocen se llevan bien más allá de alguna disputa menor, y pretenden continuar su marcha. Lo desarrollé hasta el hartazgo.

Me interesa el resto de nosotros. Los que no tenemos ni voz ni voto ni en nuestro presente ni en nuestro futuro (además de que nos cuentan cambiada la historia).

Los trabajadores formalizados sufren desde hace más de una década: salarios bajos y en retroceso, impuesto a las ganancias sobre el sueldo, desempleo creciente, inflación. Los trabajadores informales sufren precarización, inflación. Los trabajadores pasivos sufren la inflación y algunos hasta deben pagar impuesto a las ganancias. En ninguno de estos casos los supuestos representantes han protestado con seriedad, de tal forma que sea creíble, por ninguna de estas injusticias que no nacen del aire sino que son producidas por “quienes gobiernan” en cualquiera de sus submarcas: Cristina Fernández, Mauricio Macri o Alberto Fernández. Debo recordar que sindicalistas han apoyado a Macri aún después de que no quitó el impuesto a las ganancias al sueldo del trabajador. El sueldo no es ganancia. Sindicalistas han apoyado a Cristina Fernández, a pesar de la precarización del 50% de los trabajadores y de que un millón de asalariados pagaran impuesto a las ganancias. Sindicalistas sostienen al actual gobierno a pesar de que se han incrementado los perjuicios sostenidos por ambas administraciones anteriores. La inflación es responsabilidad del gobierno. Los impuestos son responsabilidad del gobierno. Generar las condiciones para la precarización laboral es responsabilidad del gobierno. Alberto Fernández, en particular, en forma descarada, ha defendido la economía informal y clamó ante la Asamblea Legislativa que pensaba incrementarla. Lo logró.

El campo no está mejor. Tironeado cual Tupac Amaru por sus proveedores (semillas, agroquímicos, maquinaria agrícola, farmacéuticas veterinarias), por el estado (SENASA, gobiernos municipales, provinciales y federal por impuestos, trabas burocráticas y servicios inexistentes o defectuosos) y por sus clientes (cerealeras, alimenticias, frigoríficos), no es dueño ni de su negocio ni de su margen económico.

Ambos sectores no tienen un proyecto estratégico para el país y se defienden como pueden de las condiciones generadas por “quienes gobiernan” en cualquiera de sus submarcas.

Ambos sectores, y otros sectores más que también son huérfanos, no tienen voz pública, ni siquiera para quejarse o peticionar a las autoridades en cosas mínimas como que no haya inflación (una decisión gubernamental), que las tasas de interés sean más bajas (una decisión gubernamental) o que se bajen los impuestos (una decisión gubernamental).

En LA PARTICIPACIÓN DEL CAMPO EN LA VIDA PÚBLICA ARGENTINA propuse que el campo integre los órganos colegiados de nuestra patria. Es válido no sólo para este sector sino para todos los desangelados. Propuse esta forma y no otra porque es la prevista en el artículo 1º de nuestra Constitución. Si alguien tiene otra forma, que lo diga.

Ahora bien. Si no hay proyecto estratégico de nación, todos seremos veletas al viento. Hay que tenerlo y ofrecérselo al país. Mejor que lo que hay va a ser.

Es lo que dan

Acá voy a la otra cara de la moneda. “Quienes gobiernan” en EEUU decidieron que no podían aguantar a Trump e hicieron trampa para gobernar ellos. Lograron lo que querían, gobernar. ¿Esto es lo que pueden dar? ¿Inflación, desasosiego, una nueva guerra?

Schwab es el vocero de “quienes gobiernan” en el mundo. Nos adelanta todas sus fantasías de lo que quieren para nosotros, como nuevos déspotas ilustrados. Pero cuando pasan a la acción con sus interventores elegidos desde jovencitos (“handpicked”), instruidos y aleccionados, no nos ofrecen un futuro venturoso. El proyecto estratégico para la civilización que tan pomposamente pretenden dirigir sólo da magros resultados. Me refiero no sólo a Biden sino a Trudeau, Macron, Rutte, Ardern, Morrison.

En el plano local “quienes gobiernan” sólo saben desaprovechar situaciones internacionales favorables que permitirían prosperidad, pleno empleo, buenos salarios para los trabajadores y buenos beneficios para las patronales. Una y otra vez. Porque el “proyecto”, en cualquiera de sus submarcas (K, PRO, CC, UCR) sólo nos trae retroceso, pobreza, precarización, baja de autoestima, humillaciones y desesperanza.

Futuro

Considero que estamos en una situación inmejorable. Las condiciones internacionales están a nuestro favor (competidores nuestros salieron momentáneamente del mercado) y porque “quienes gobiernan” han demostrado acabadamente en la Argentina y en el resto de Occidente que su deseo de poder no posee ninguna cualidad excepto esa: perdurar en el poder. No tiene nada para dar. Al menos no a nosotros, los comunes.

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Referencias

[1] Jorge Castro. Perón y la globalización. Buenos Aires: Ed. Catálogos, 1999.

Jorge Castro. La visión estratégica de Juan Domingo Perón«. Buenos Aires; Ed. Distal, 2012.

 

Notas citadas

Equilibrio inestable

http://restaurarg.blogspot.com/2019/12/2020.html

La participación del campo en la vida pública argentina

http://iris-speroni.blogspot.com/2020/03/la-participacion-del-campo-en-la-vida.html

Artículo publicado originalmente por Restaurar.org, el 30/04/2022, http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/es-lo-que-dan.html

GUAYANA ESEQUIBA: CONTESTACIÓN (DEFENSA) Y RECONVENCIÓN (ATAQUE)

Abraham Gómez R.*

Había tardado demasiado el gobierno guyanés en iniciar una descomunal campaña en los medios, cuyo contenido apunta a manipular la posible decisión que tomaría Venezuela en cuanto a invocar la no comparecencia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), para el 08 de marzo del próximo año, o definitivamente hacernos parte del juicio en la demanda que de modo unilateral interpuso la excolonia británica en contra nuestra.

En casi todos los medios audiovisuales de Guyana ha aflorado, en los últimos meses, una sibilina y machacona campaña de (des)información, cuyo contenido apunta a hacerle creer a la población que habita en la Zona en Reclamación que Venezuela no posee los recursos argumentativos probatorios de nuestra contención y que, por tales motivos, le estamos rehuyendo al arreglo judicial, como expedita alternativa que ellos presentaron en la Corte.

El torcido bloque informativo —divulgado  mañana, tarde y noche— que difunden los coagentes guyaneses deja entrever, con malévola sospecha, que los venezolanos no contamos con los recursos históricos o jurídicos densos para desmontar el írrito y nulo Laudo Arbitral de París, del 03 de octubre de 1899; y que ellos, por el contrario, consideran a tal adefesio jurídico “suficientemente válido y oponible”, en el juicio que se lleva a cabo en La Haya; tanto que le atribuyen condición de cosa juzgada (res Judicata) con validez plena. Exactamente están practicando la añeja estrategia goebbeliana.

En ese mismo orden, sentido y propósito, estamos observando y analizando el despliegue inusitado en los canales internacionales; también en los diarios de mayor circulación —los de mucha credibilidad y prestigio y los más leídos en el mundo— la ilimitada propaganda que el gobierno guyanés “ha cancelado”, con la finalidad de darse un barniz favorable en torno al histórico caso del Esequibo. Tratan de diseñarse una matriz opinática acomodaticia.

No quedan dudas que toda la detestable parafernalia mediática, que estamos denunciando, recibe cuantioso financiamiento de las casi cincuenta compañías, de distintas procedencias; con lo cual pretenden resguardar sus intereses en la exploración, explotación y comercialización de los inmensos recursos de la Zona en controversia.

Debemos ser enfáticos en pronunciar con insistencia ante el mundo: no le estamos quitando las dos terceras partes del territorio de Guyana, como ellos “arguyen” en sus vocinglerías por los medios de comunicación a nivel internacional.

Nuestra nación ha sido la víctima, hace más de un siglo, del vil despojo perpetrado con mala fe y añagaza jurídica.

Nosotros tenemos enjundiosa documentación para demostrar que fue el Imperio Británico que nos usurpó y despojó, mediante las trampas y demás tratativas políticas-diplomáticas urdidas a finales del siglo XIX, de una séptima parte de la geografía venezolana; incluso tenían la aviesa intención de arrebatarnos hasta el Delta del Orinoco y una considerable parte del estado Bolívar.

El gobierno guyanés al enterarse de que todavía no se ha producido la determinación si vamos o no al juicio a la Corte han desatado un propagandismo con “descomunal ferocidad”, en dos vertientes: en Georgetown, con la utilización de la televisión a diestra y siniestra contra Venezuela; haciéndonos pasar como avaros en la reclamación, o imbéciles e ignorantes del Derecho Internacional Público. La otra burda estrategia ya la conocemos: vienen organizando sistemáticas visitas a la Guayana Esequiba del presidente Irfaan Ali, de ministros, miembros de las Fuerzas Armadas, empresarios, representantes de todas las organizaciones políticas e iglesias.

En el litigio que sostenemos, desde hace más de un siglo, contra el imperio inglés, primero, y luego con su causahabiente en este asunto la República Cooperativa de Guyana, las posibles alternativas de soluciones han derivado hacia aristas escabrosas.

Lo que hemos descrito, de manera somera, es lo que vergonzosamente ha emprendido Guyana.

Considerando lo antes planteado y frente a tales desmanes: ¿Qué debemos hacer nosotros para defendernos y atacar, para proyectar nuestras verdades sobre este asunto litigioso?

Primeramente, a riesgo de parecer tedioso, considero que —sin perder tiempo— debemos declararnos y dedicarnos  a trabajar tiempo completo, mediante la conformación de una comisión multidisciplinaria para la discusión, análisis,  investigaciones documentales, formular la narrativa de los hechos fundamentales; compendiar las alegaciones de derecho; hacer las precisas consultas públicas y privadas; en fin, todo cuanto haya que diligenciar para elaborar el Memorial de Contestación de la demanda, que deberíamos  consignar en la Corte, —si así lo autoriza el Jefe de Estado— repito,  para el día 08 de marzo del 2023 ¡…diríamos en buen venezolano, eso es mañana mismo…!

En tal Memorial de contestación ratificaremos el contenido parcial (artículo primero) del Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966, que ellos aceptaron (sin intimidación): el Laudo es nulo de e írrito; por tanto, sobre ese abominable documento no hay nada que discutir, no es oponible a nada; porque ha resultado insubsanable, históricamente.

La nulidad absoluta —ipso jure— en la citada sentencia arbitral se generó desde el mismo momento cuando se omitieron los requisitos necesarios para lograr su objetivo y se burlaron los procedimientos. También ocurrió cuando se nos colocó, en tanto parte interesada y concernida en una situación de indefensión, inclusive a partir del Tratado de Washington de 1897.

Como nuestra segunda estrategia —para poner las cosas en claro—, en simultáneo con la consignación de la Contestación, nos encontraríamos en la precisa (y mejor) ocasión para estructurar una contrademanda o Interponer acciones de Reconvención, por todo el daño que Guyana ha venido perpetrando a Venezuela.

La delegación venezolana que comparecería ante la Corte, en la fecha arriba señalada, tiene todo el derecho, en nombre de nuestro Estado para incoar una demanda o instaurar un juicio en paralelo contra quien nos ha demandado. Todo, relacionadamente, en el mismo proceso.

Siendo de esta manera, entonces, el Jurado sentenciador —conforme en pleno y justo derecho— debe admitir la solicitud reconvencional; porque existirá absoluta conexidad entre nuestras pretensiones en nueva litis reconvencional y las que ya han sido identificadas objeto de la demanda principal, introducida y ratificada por la contraparte.

El jurado sentenciador de la Corte Internacional de Justicia, que tramita en juicio el fondo de la controversia, pasará a conocer también —por economía procesal— nuestra causa petendi en reconvención (con solicitudes recientes, de signo diferente, ampliadas e irrebatibles) cuya finalidad procura concluir mediante una Resolución coherente, donde se haga justicia a nuestro país

 

* Miembro de la Academia Venezolana de la Lengua. Miembro del Instituto de Estudios Fronterizos de Venezuela (IDEFV). Asesor de la Fundación Venezuela Esequiba.

EL BOTÍN DEL BCRA 2021 PROVINCIA POR PROVINCIA

Iris Speroni*

El BCRA se quedó con US$ 39.252 mil millones que pertenecen a familias y empresas argentinas.

 

Todo aquél que se dedica a producir bienes de exportación sabe perfectamente que todo es cuesta arriba gracias al gobierno. Está en inferioridad de condiciones respecto a sus pares en Paraguay, Brasil, Uruguay o Perú. O algún país de África, Asia, Europa, Oceanía o el norte de América. De hecho, debemos ser el único país del mundo donde se le dificulta a sus ciudadanos exportar. Ya sea desarrollo de sistemas, teleteatros, novelas o cuentos cortos, canciones, productos agropecuarios, lingotes de aluminio o marcos de madera para puertas. 

Todo es difícil.

Las trabas más comunes son: a) derechos de exportación, b) alto costo del flete (es el doble del promedio mundial), c) trámites interminables, d) funcionarios de Aduana corruptos, e) dificultad para importar insumos, f) restricciones de cuotas, g) intermediación del BCRA que se queda con la mitad del valor del producto exportado.

Este tema lo traté en dos artículos: EL TAMAÑO DEL BOTÍN (donde analizo las exportaciones del primer semestre 2020) y ZANAHORIA (donde analizo 2020 año completo). Ahora miremos los números del 2021.

Los distintos rubros de las exportaciones

Quienes venden servicios, que fue un rubro importante décadas atrás, optaron por: o dejar de exportar, o hacerlo con sede en otros países. Durante décadas Argentina tuvo una potente industria editorial, grandes autores de historietas, dibujantes, teleteatros que se veían en toda América Hispana y más lejos aún, y periodistas que era codiciados en todo el mundo. Toda esa actividad muere con un dólar sobrevaluado. En los últimos años (SXXI) se había desarrollado un creciente producción de sistemas informáticos, fruto de décadas de inversión en educación en desarrollo de sistemas.

De todos estos servicios, el Estado pretende quedarse con la mitad de la facturación mediante el mecanismo de pagar el dólar a la mitad de su valor. Eso destruye una multitud de servicios que podríamos exportar y de tal manera dejarle un ingreso genuino y bien pago a miles de argentinos. Asesoría, auditorías de multinacionales en sucursales de habla hispana, periodismo, literatura, artes gráficas, televisión, patentes, sistemas, videojuegos. El listado es largo. Con la característica que quienes venden estos productos son todas personas de clase media y por lo general con alto nivel de educación.

Lo voy a hacer más gráfico. Si Quino viviera, el BCRA se quedaría con la mitad de los honorarios que le corresponderían por sus ventas a Italia, Francia, España y el resto de Hispanoamérica. Lo mismo ocurriría con las novelas de Fontanarrosa o con cualquier otro artista.

Ahora bien, toda esta gente vende servicios. Son intangibles. Se soluciona con poner una oficina de 16m2 en Montevideo y facturar desde ahí. Corre para cantantes de ópera que peregrinan por los teatros europeos o los actores que prueban suerte en España o los músicos que cantan en el Grammy.

Sin embargo, existe una multitud de productores que venden objetos tangibles. Los que producen algodón o leña en el Chaco, arroz o madera en Corrientes, porotos en Salta, vino y ajo en Mendoza o frambuesas o aluminio en Chubut. Tienen que facturar desde acá y pagar la parte del león al Banco Central de la República Argentina.

Donde más duele

Antes de dar los números de cuánto se apropió el BCRA en 2021, quiero hacer un par de comentarios.

La mayoría de las exportaciones (casi ⅔) son de productos agropecuarios. Dentro de las “agroexportaciones” hay productos sin procesar (una tonelada de cerezas) o elaborados como vino, aceite de oliva, madera y su industrialización, golosinas. 

El resto (no agro) es pesca, oro y otros minerales no ferrosos, aluminio, tubos sin costura, petróleo y derivados [1].

Todo ese universo totalizó en 2021 la bonita cifra de US$ 77.934 millones, un 42% más que el año anterior.

Esto despierta una serie de comentarios. El primero es que el superávit comercial superó los 15 mil millones de dólares. Es una payasada que los políticos se quejen de la escasez de dólares. Nos deberían sobrar dólares. Deberíamos estar como Brasil o Rusia, con incrementos sustantivos de nuestras reservas año a año, porque somos países intrínsecamente exportadores. El segundo es que no todos los exportadores tienen la obligación de liquidar sus dólares a cambio de una cantidad de pesos determinada por el BCRA. Algunos son privilegiados y pueden quedarse con sus divisas (lo que no está mal sino que debería ser igual para todos). El tercero es que los productores de bienes exportables se quejan públicamente de lo gravoso que les resultan los derechos de exportación y la diferencia de cambio (varias veces más costosa que la Aduana); sin embargo el incremento de los volúmenes exportados desmiente sus reclamos y le dan el mensaje a los funcionarios de que pueden tirar de la cuerda aún más. El cuarto es que el BCRA se quedó en el año 2021 con el 50,37% del total exportado. Debo recordar que la política del BCRA tanto en inflación como en mercado cambiario es responsabilidad del Congreso y no del Poder ejecutivo. La fijación del valor del dólar es atribución del Congreso. Quinto y último: imaginen cuánto podría exportar la Argentina si nos dejaran ser. Podríamos ser un país emergente como los que integran BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), con superávit fiscal, inversiones, reservas crecientes y aumento del nivel de vida de la población. Conformar BRICSA.

Ahora sí, los números de 2021

El dólar del 30/12/2021 terminó en $ 101,75 comprador de BNA (lo que le pagan a quien exporta) y $ 205 el libre. Queda claro que cada día hábil tuvo su cotización y que el número “50,37%” no es preciso. La cuenta correcta es calcular la diferencia día a día y multiplicarla por la liquidación diaria de divisas. De todas formas, la diferencia citada se mantuvo más o menos estable todo el año por lo que el producto de esta cuenta se aproxima verosímilmente a lo que pueda ser el número correcto.

Las exportaciones totales fueron, como ya cité US$ 77.934 (Fuente: INDEC). El 77,7% proveniente de la Región Pampeana (Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa).

El BCRA se quedó con US$ 39.252 mil millones que pertenecen a familias y empresas argentinas. Ese dinero pasó momentáneamente por el BCRA para remontar vuelo. Por eso Argentina, a diferencia de Brasil, no acumula reservas. ¿Cómo se va ese dinero? Pago de intereses y capital de deuda, importaciones y venta de dólares para manipular el tipo de cambio. Cortar la hemorragia que representa el BCRA nos llevaría por el camino virtuoso que tiene —en este rubro— un país como Brasil, con reservas crecientes.

Según el INDEC, la estimación de población para el 2021 es de 45.808.747 habitantes. Este año, luego del censo, veremos cuán correcto es este número.

Por lo tanto, el BCRA le quitó a cada persona la suma de US$ 857 en 2021. A una familia de cuatro integrantes, les quitaron US$ 3.427. En pesos 175.658 por familia.

Los números son dispersos según la provincia. A un habitante de Santa Cruz le quitaron US$ 3.745, Chubut US$ 2.523, Santa Fe US$ 2.475. Los menos afectados fueron Capital Federal y Formosa, por su escaso volumen de exportaciones (legales).

Si vemos los números globales y no por habitante, la provincia más afectada fue Buenos Aires, a la cual el BCRA le quitó US$ 28.023 mil millones. Todo ese dinero debió ir a las manos de familias (propietarios y empleados), empresas (productores y proveedores e intermediarios) y a los estados provincial y municipales. Nada de eso sucedió porque quedó en las manos del BCRA, durante el gobierno más unitario de nuestra historia.

¿Lo más doloroso de todo? Saber que podríamos producir el doble o el triple de riqueza y vivir todos un poco mejor.

 

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas

[1] Lo de «industria automotriz» es una chantada, porque importa más de lo que exporta.

 

Referencias

Origen Provincial de las Exportaciones – Año 2021 – INDEC

https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/opex_03_22AC291C9FFE.pdf

 

Notas relacionadas

Zanahoria

http://restaurarg.blogspot.com/2021/06/zanahoria.html

El tamaño del botín

http://restaurarg.blogspot.com/2021/02/el-tamano-del-botin.html

 

Artículo publicado originalmente en Restaurar.org, 23/04/2022, http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/el-botin-del-bcra-provincia-por.html