LA IA Y EL NUEVO ORDEN MUNDIAL: ECONOMÍA Y GUERRA (2)

Giancarlo Elia Valori*

Imagen: prince_trio en Pixabay.

En julio de 2017 el Centro Belfort para la Ciencia y Asuntos Internacionales de la Escuela Kennedy de Harvard publicó el informe Inteligencia artificial y seguridad nacional, argumentando que en el futuro la inteligencia artificial podría convertirse en un medio transformador comparable a las armas nucleares, los aviones, las computadoras y la tecnología de seguridad biotecnológica. Por lo tanto, es razonable incluir la Inteligencia Artificial en las discusiones que pueden influir en las relaciones internacionales.

El orden internacional incluye dos aspectos básicos, uno que es la estructura de poder y el equilibrio de poder de los principales países y grupos de Estados, y el otro son las reglas que deben seguirse en la gestión de las relaciones entre estos países.

El orden internacional es una situación en la que los países del sistema mundial deben adoptar métodos no violentos para resolver conflictos de conformidad con las normas internacionales. Sus elementos constitutivos son el jus gentium, las normas y reglamentos compartidos y las instituciones pertinentes.

Los cambios en este sistema son causados esencialmente por cambios en la estructura internacional, pero la estructura no es un elemento constitutivo del orden internacional. Por lo tanto, si se quiere cambiar el sistema falaz antes mencionado, se debe establecer un nuevo orden internacional, que no es más que la redistribución del poder, es decir, el contenido central de la reorganización de las instituciones internacionales.

La inteligencia artificial puede tener un impacto en las normas internacionales existentes y dar lugar a un nuevo jus gentium al cambiar el equilibrio de poder y las relaciones mutuas de los actores internacionales, influyendo así en los cambios.

En primer lugar, la Inteligencia Artificial afectará económicamente el equilibrio de poder entre los países e incluso desencadenará un nuevo ciclo de influencia y cogestión por parte de las grandes potencias.

Ya en 1989 Paul Kennedy argumentó en su libro The Rise and Fall of Great Powers. Economic Change and Military Conflict from 1500 to 2000 (El ascenso y la caída de las grandes potencias. Cambio económico y conflicto militar de 1500 a 2000), que a la larga había un vínculo obvio entre el ascenso económico y la caída de cada gran potencia mundial. En junio de 2017, Pricewaterhouse Coopers publicó Seize the Opportunity. 2017 Summer Davos Forum Report (Aprovechar la oportunidad. Informe del Foro de Davos de Verano 2017), el cual predice que para 2030 la contribución de IA a la economía mundial alcanzaría los 15,7 billones de dólares estadounidenses y que se espera que la República Popular China y América del Norte se conviertan en los mayores beneficiarios, con un total de 10,7 billones de dólares estadounidenses.

En septiembre de 2018, el informe Frontier Notes: Using Models to Analyse the Impact of Artificial Intelligence on the World Economy (Notas fronterizas: Uso de modelos para analizar el impacto de la inteligencia artificial en la economía mundial), publicado por el McKinsey Global Institute, estimó que la inteligencia artificial mejoraría significativamente la productividad global general. Excluyendo el impacto de los factores de costos de competencia y transformación, la Inteligencia Artificial podría contribuir con 13 billones de dólares estadounidenses adicionales al crecimiento del PIB mundial para 2030, con un crecimiento promedio anual del PIB de alrededor del 1,2 por ciento.

Esto es comparable o mayor que el impacto transformador de muchas otras tecnologías a lo largo de la historia, como la máquina de vapor en el siglo XIX, la producción industrial en el siglo XX y la tecnología de la información en el siglo actual. El informe también señaló que los países y regiones (principalmente economías desarrolladas) con posiciones de liderazgo en Inteligencia Artificial pueden lograr un crecimiento económico del 20 al 25 por ciento sobre la base actual, mientras que las economías emergentes pueden registrar solo la mitad de esta tasa.

La brecha de la Inteligencia Artificial puede conducir a profundizar aún más la brecha digital. La inteligencia artificial puede cambiar la cadena industrial global. La nueva industrialización representada por los robots industriales y la fabricación inteligente atraerá a la industria manufacturera de vuelta a las economías desarrolladas, e impactará la desindustrialización de muchos países en desarrollo antes de lo esperado. Por lo tanto, las oportunidades permanecerían bloqueadas en el país que proporciona “solo” el recurso o la materia prima.

El desarrollo y la implementación de la Inteligencia Artificial requieren una gran cantidad de fondos, contenido de alta tecnología y pueden conducir a cambios en la estructura de empleo, haciendo que los trabajos altamente repetitivos y de baja tecnología desaparezcan gradualmente.

Además, en otro informe de McKinsey de 2017, basado en investigaciones en 46 países, se predijo que para 2030 hasta 800 millones de personas en todo el mundo perderían sus empleos y serían reemplazadas por robots automatizados. Habrá un desplazamiento masivo de empleos en todo el mundo similar al visto a principios del siglo 20, cuando la mayoría de los empleos del mundo se trasladaron de la agricultura a la industria. Al mismo tiempo, la implementación generalizada de la tecnología de IA también aumentará la demanda de profesionales en este campo.

Según la investigación, hay tres tipos de países que tienen más probabilidades de beneficiarse del desarrollo de la tecnología de IA.

El primer tipo consiste en países con ventajas de primer nivel en Inteligencia Artificial, como Estados Unidos y China, y todos son favorecidos.

El segundo tipo está representado por países intensivos en capital y tecnología con una población pequeña o una tendencia a la baja, como Japón, Corea del Sur y Singapur, que no solo tienen el capital y las condiciones técnicas para desarrollar la Inteligencia Artificial, sino que también pueden usar el desarrollo de la IA para compensar la falta de población total o una tendencia a la baja, así como una estructura de población envejecida y otras desventajas.

El tercer tipo incluye países con más científicos, matemáticos, ingenieros o Estados que valoran y aprecian la formación profesional relacionada con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM).

Más allá de la cuestión económica, la Inteligencia Artificial cambiará militarmente el equilibrio de poder entre los países. Los defensores de la IA militar creen que subvertirá la forma y el estilo de la guerra. La guerra blindada o mecanizada utiliza materiales para liberar energía, confiando en el petróleo y el acero, mientras que la guerra computarizada utiliza redes para reunir energía, confiando en información, enlaces y conexiones. Según las expectativas actuales, una vez que la guerra entre en la era de la IA, será una confrontación de robots y automatización, controlada por la IA antes mencionada.

Se puede esperar que, en condiciones de IA, los elementos de la guerra, como los combatientes, los conceptos de batalla y los mecanismos de victoria, cambien por completo. En una guerra tradicional, incluso si hay una brecha en términos de armas y niveles de entrenamiento entre los lados opuestos, el lado desfavorecido puede luchar de todos modos con tiempos y lugares favorables, estrategias superiores y tácticas avanzadas. Por ejemplo, durante las guerras en Irak y Afganistán, los artefactos explosivos improvisados (IED) causaron problemas a los ejércitos estadounidenses y soviéticos en este último país. En cambio, bajo las condiciones de la guerra inteligente, la contribución tecnológica de un lado a través de la IA creará rápidamente una ventaja abrumadora en el campo de batalla, lo que hará imposible que el lado más débil defina un ciclo efectivo de observación-juicio-decisión-acción, permaneciendo siempre en una posición pasiva.

En su informe Artificial Intelligence Changing the World (Inteligencia artificial cambiando el mundo), la Brookings Institution propuso el concepto de “hiperguerra”, es decir, la guerra es un proceso de carrera contra el tiempo y, por lo general, prevalecerá el lado con el proceso de toma de decisiones y ejecución más rápido. La velocidad de toma de decisiones del sistema de comando y control asistido por IA superará con creces la del modo tradicional de guerra, combinado con el sistema de armas automáticas que puede decidir de forma autónoma lanzar armas letales, y acelerará en gran medida el proceso de guerra, de modo que una nueva expresión, “guerra de velocidad extrema”, será y debe ser acuñada para describir este modo de guerra. Con respecto a esto último, el artículo What Happens When Your Bomb-Defusing Robot Becomes a Weapon (Lo que sucede cuando tu robot que define la bomba se convierte en un arma), publicado por Caroline Lester en el sitio web The Atlantic el 26 de abril de 2018, utilizó muchos análisis para demostrar que los robots militares pueden reducir significativamente la amenaza de las bombas en las carreteras, con el debido respeto a los patriotas iraquíes y afganos.

La inteligencia artificial también conducirá a cambios revolucionarios en el equipo militar. El combate de racimo de armas automáticas letales no tripuladas podría convertirse en el protagonista y el principal método de combate en futuras guerras.

Una vez que se perfeccionen el avión no tripulado, el submarino no tripulado, el robot terrestre, el tanque no tripulado, la guerra de desgaste y las tácticas marítimas, harán que las plataformas de armas a gran escala, como portaaviones y aviones de combate, sean complejas y costosas, ya que estas últimas son menos ventajosas desde el punto de vista del costo de la guerra y la efectividad del combate.

Es como si un avión de combate F-35, con un costo único de cientos de millones de dólares y con un hombre a bordo luchando contra un grupo de drones armados de bajo precio, fuera equivalente a disparar mosquitos.

Lo que hay que explicar es que todavía hay una gran incertidumbre sobre el impacto de la IA en los ejércitos: no se sabe en qué medida y cómo se manifestará este impacto. En la discusión celebrada en la Conferencia de Inteligencia Artificial y Seguridad del 7º Foro Mundial de la Paz en la Universidad de Tsinghua en julio de 2018, algunos expertos señalaron que aunque las tendencias de desarrollo futuro del aprendizaje automático en robots industriales, ciencia de materiales y otras tecnologías pueden estudiarse en general, el impacto específico de la combinación de estas tecnologías en la guerra futura no se puede evaluar con precisión. En los primeros treinta años del siglo XX, las potencias militares europeas como Alemania, Gran Bretaña, la Unión Soviética, Francia e Italia desarrollaron tanques, aviones, misiles y tecnologías de comunicación por radio. Sin embargo, fue solo después de que Alemania libró la Blitzkrieg en la Segunda Guerra Mundial que el mundo descubrió que esas nuevas tecnologías juntas podrían traer cambios tan inimaginables a la guerra. Ahora, independientemente de la guerra algorítmica o tácticas similares, el acalorado debate en los círculos estratégicos sigue siendo analizar el impacto de la IA en las operaciones de una sola tecnología. Sin una comprensión holística de las aplicaciones militares de la tecnología de IA, las contramedidas planificadas podrían convertirse en una nueva Línea Maginot costosa e innecesaria.

 

 

* Copresidente del Consejo Asesor Honoris Causa. El Profesor Giancarlo Elia Valori es un eminente economista y empresario italiano. Posee prestigiosas distinciones académicas y órdenes nacionales. Ha dado conferencias sobre asuntos internacionales y economía en las principales universidades del mundo, como la Universidad de Pekín, la Universidad Hebrea de Jerusalén y la Universidad Yeshiva de Nueva York. Actualmente preside el «International World Group», es también presidente honorario de Huawei Italia, asesor económico del gigante chino HNA Group y miembro de la Junta de Ayan-Holding. En 1992 fue nombrado Oficial de la Legión de Honor de la República Francesa, con esta motivación: “Un hombre que puede ver a través de las fronteras para entender el mundo” y en 2002 recibió el título de “Honorable” de la Academia de Ciencias del Instituto de Francia.

 

Traducido al español por el Equipo de la SAEEG con expresa autorización del autor. Prohibida su reproducción.

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A FUEGO LENTO

Iris Speroni*

La seguridad que los gobiernos nos brindan.

Se comprueba que no es que no saben o no pueden o no les importa, sino que están en esos lugares para administrar el delito.

 

El caos y el orden es un tema tratado en Restaurar bajo diferentes autores con distintas visiones.

Lohengrin

Hegeliano

Santiago González 

Juan Martín Perkins

Curtis Yarvin

reaxionario el amigo de ustedes

 

Vemos el delito común no ya como el fruto de fuerzas al azar que un Estado impotente no sabe controlar o moderar sino como el resultado provocado y buscado por parte de los poderosos para tercerizar en los delincuentes la violencia contra los ciudadanos.

Ésa y no otra es mi postura respecto al desamparo que vivimos.

El objetivo es mantener a los vecinos que trabajan y estudian en vilo; en permanente zozobra, como forma de desestabilización emocional, abuso psicológico y físico y para facilitar las tareas de control de la sociedad mediante el debilitamiento deliberado del tejido social y familiar.

Más psicótico no se consigue. 

La ideología que presta un maquillaje a este accionar es el progresismo la cual vende el laissez-faire, laissez-passer.

No es impericia u holgazanería o dejadez o indiferencia. No.

Son políticas activas que buscan enardecer y condonar a los delincuentes comunes.

Asimismo el poder político delimita a estos actores libres (los delincuentes) en su accionar. Se puede matar en la parada del colectivo a un aprendiz de panadero (caso real), pero se mira con malos ojos asesinar a un diputado que trota por la mañana. Un caso se castiga (el del diputado), el otro, no.

Por lo tanto no es un caos donde ciertas partes de la población se ven desprotegidas, sino ―y ésa es mi hipótesis― los delincuentes comunes (caóticos, indisciplinados, desorganizados u organizados, bajo el efecto de substancias o no) son utilizados como armas contra las personas comunes por parte de los políticos.

Dicho más sencillo: los políticos atacan a los ciudadanos y utilizan para sus ataques a descastados, de tal forma de tener a la población en perpetuo estado de acobardamiento.

Cientos de delincuentes, esclavos de la droga, deben salir todos los días a buscar el dinero para su próxima dosis. En algún punto es como la ley de la sabana: depredador que no sale a cazar, se queda con el estómago vacío. Y no puede elegir no hacerlo, porque viven día a día.

Estos hombres (y algunas mujeres), con ese marco mental, son los que los políticos sueltan sobre nosotros todos los santos días. Y lo saben.

No sólo no toman una sola medida para atemperar la situación sino que son proactivos en: a) agravar el problema mediante aumentar la cantidad de personas en esta situación, que tengan armas a su disposición y flujo continuo de droga, b) toman todas las medidas necesarias para reprimir cualquier acto reflejo de defensa por parte de los depredados.

Las medidas gubernamentales contra los ciudadanos de a pie son diversas: persecución policial y judicial en caso de actos defensivos contra los delincuentes, intentos de control de armas y aumento de los costos de los permisos para los ciudadanos no-delincuentes, hostigamiento mediático, ausencia de paliativos para los costos colaterales del delito (gastos médicos y judiciales).

Los circuitos delictivos permitidos por el poder a los delincuentes desestabilizan la vida familiar de las personas comunes (víctimas). 

Con la política actual, el ciudadano siente miedo en sus lugares más preciados y donde el Estado debería garantizar la tranquilidad de las personas.

Después de todo, la obligación de los gobernantes es “consolidar la paz interior” (Constitución Nacional). Los lugares liberados son los hogares en sí, los trayectos rutinarios del hogar a la escuela o trabajo o club o locales comerciales cercanos. Claramente es hacer sentir al ciudadano en intranquilidad permanente, lo cual produce daño mental y emocional.

¿Por qué sostengo que es adrede? Porque lo que uno ve es una supuesta apatía o ineptitud para sofocar o reprimir al delito común. Sin embargo es muy distinta la actitud que asumen los mismos agentes del poder (los mismos individuos) frente a los ciudadanos que osan defenderse. Tanto jueces, fiscales como políticos profesionales sofocan cualquier vestigio de rebelión individual ante los abusos delictivos. Las personas comunes que se defienden o los miembros de las fuerzas policiales que se protegen o protegen ciudadanos son hostigados mediática cuando no judicialmente.

Con esa doble vara a la vista de todos se comprueba que no es que no saben o no pueden o no les importa, sino que están en esos lugares para administrar el delito y para reprimir toda señal de defensa o contraataque por parte del rebaño. Los políticos nos sueltan los lobos y se ocupan muy bien de que las ovejas no saquen colmillos.

Otra vuelta de tuerca

Nada de lo que ha sucedido aquí ha sido diseñado en la Argentina. Aplican un manual de procedimientos escrito en el exterior. Eso se verifica simplemente. Las mismas leyes son repetidas en uno y otro lugar, con los mismos resultados. Son promovidas por las mismas organizaciones más o menos con los mismos argumentos.

Quienes en el exterior lo diseñan y ordenan su implementación cuentan con la inestimable colaboración de los funcionarios locales, a los que considero interventores. 

En el caso particular de las leyes cuentan con la inestimable colaboración de las facultades de derecho y de organizaciones pseudonogubernamentales (de derechos humanos y similares, como el CELS, Amnistía, Human Rights Watch y sucedáneos locales).

También tienen operadores disfrazados de periodistas que sostienen su implementación.

Para resumir lo que ha pasado en Occidente (tanto en EEUU, Australia, Canadá, Guatemala, España, Inglaterra, Irlanda como en la humilde Argentina) es que quienes gobiernan decidieron subvertir el orden existente hasta la segunda guerra mundial y paso a paso han modificado los códigos penales, civiles y de procedimiento al igual que reglamentaciones internas de las fuerzas de seguridad. Lo hicieron despacio, consolidando un cambio para pasar a otro.

Hay que reconocerles que han sido efectivos.

La ley de salud mental

Es la otra cara de la moneda y persigue los mismos objetivos. Siempre es útil ver a los norteamericanos, porque cualquier cosa que nos inflijan a nosotros, siempre la han aplicado contra el pueblo de los EEUU en forma previa.

Actualmente las grandes ciudades de EEUU, en particular si su intendente es demócrata, tienen cientos de psicóticos deambulando por las calles. Naturalmente son ingobernables, pobre gente.

Con antelación se modificaron las leyes que permitían recluirlos. Por lo que ahora ―como siempre― son un peligro para ellos mismos y para terceros y ahora no se los puede guardar. Atacan a la gente al azar, porque son paranoicos y agresivos. La población previamente ha sido desarmada para encarar el problema. 

No solo los ciudadanos no llevan armas en su trayecto al trabajo (a diferencia del siglo XIX, por ejemplo) sino que se derogaron todas las leyes y normativas que exculpaban las acciones violentas defensivas. Nadie lleva armas encima porque no podría usarlas.

Quienes pensaron todo esto lo fueron armando de a poco.

En cuanto a los locos, el estado ha dejado sin herramientas a las familias.

Los transeúntes están atados de pies y manos. Si por casualidad decide encarar alguna maniobra defensiva, para sí, o su familia o un vecino, el estado cae con todo el peso de la ley (oportunamente modificada).

Hay numerosos ejemplos en California y uno reciente que ha tenido cobertura mediática en Nueva York.

En estas tolderías, un psicótico atacó con un cuchillo a un agente de policía en la vereda de la Av. Figueroa Alcorta, de esta capital. Ni allí, ni acá, se evaluó modificar la ley de salud mental. Justamente, porque es un elemento más para llevar caos y zozobra a la población.

Ahora no sólo tenemos que cuidarnos de los chorros, sino de los locos.

Estamos peor que los que se adentran al Bosque de Sherwood. A nosotros no nos permiten ingresar armados.

No es casual. Es planificado. Acá sólo implementan un libreto ajeno.

Consecuencias

Familias rotas, miedo generalizado y ubicuo, intranquilidad, desamparo e injusticia. Daños materiales (lo robado, lo destruido, gastos médicos) y emocionales (ansiedad, tristeza, etc.).

También hay costos económicos generalizados. Una economía para invertir necesita estabilidad macroeconómica (estabilidad monetaria e impositiva, por ejemplo), y tener ganancias a las cuales reinvertir o expectativas futuras de rédito.

Pero sobre todas las cosas, necesita paz interior.

Argentina no arrancó a crecer hasta que no acabó con los malones. Mientras uno se pusiera a trabajar y cayera un malón y se llevara todo, no se podía avanzar. Era remar en el dulce de leche. A partir del fin del malón se pudo crecer y reinvertir y que los únicos riesgos fueran la sequía y las inundaciones.

Si mover mercadería de un lado al otro es hoy una operación más complicada que trasladar armas en Iraq, si una PyMe se desarma porque el gerente de operaciones fue baleado en una entradera, si toda una guardia de un hospital está de luto porque mataron a un familiar de una enfermera o a un médico (ocurrencias diarias), no se crece.

Es muy simple: la Argentina creció en el período de Paz Interior. Y dejó de hacerlo cuando lo perdimos.

Las leyes modificadas por los interventores en estos 40 años son eso: una subversión del orden natural, donde nos quieren decir que un ladrón es una víctima, de la misma forma que nos dicen que un hombre es una mujer o matar un bebé está bien.

Solucionarlo es fácil: hay que revertir lo actuado.

Pero recordemos lo que siempre nos dice Don Líbranos del Mal: a ellos los juzgaremos con la jurisprudencia establecida por ellos para nuestro sometimiento.

¿Nosotros?

Nosotros nos guiaremos por nuestras leyes y nuestras costumbres. Las que fueron de siempre y no son de ahora.

 

Notas relacionadas

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Artículo publicado el 12/08/2023 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2023/08/a-fuego-lento.html

NÍGER, UNA NUEVA REACCIÓN HACIA UN MUNDO MULTIPOLAR

Marcelo Javier de los Reyes*

El pasado 26 de julio un golpe de Estado en Níger derrocó al presidente Mohamed Bazoum. Su propia guardia habría sido la responsable de detenerlo en el palacio presidencial sito en la capital del país, en Niamey. El golpe fue encabezado por Abdourahamane Tchiani, quien fuera líder de la guardia presidencial en Níger durante doce años y quien declaró que liderará el Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CLSP), la junta de transición militar[1]. Por su parte, el jefe del Estado Mayor, general Abdou Sidikou Issa, comunicó que respaldaba la decisión de los golpistas. Muchos nigerinos apoyaron a los militares y salieron a las calles de la capital incluso cometiendo actos de violencia. No es un dato menor que los manifestantes desplegaron numerosas banderas rusas y expresaban su respaldo al grupo paramilitar ruso Wagner.

Tchiani justificó el golpe militar por el «deterioro de la situación de seguridad» y criticó la falta de cooperación del gobierno de Bazoum con las juntas militares de Malí y Burkina Faso con el objetivo de luchar contra la insurgencia yihadista en la región del Sahel[2]. Los grupos yihadistas se han hecho fuertes en Malí a partir de 2012 iniciando una ola de violencia que ha provocado numerosos muertos y más de 6 millones de desplazados en la región del Sahel. En este contexto, Níger constituía una base de operaciones para las fuerzas francesas y estadounidenses que debían enfrentar a los yihadistas. A decir verdad, en el Sahel tanto Al Qaeda como el Estado Islámico campean a sus anchas.

Como era lógico, la condena al golpe por parte de los gobiernos occidentales no se hizo esperar y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, expresó que «este golpe de Estado es perfectamente ilegítimo y profundamente peligroso para los nigerinos, para Níger y para toda la región»[3]. Del mismo modo, la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) rechazó el derrocamiento de Bazoum y le presentó a los militares nigerinos un ultimátum bajo la amenaza de intervenir militarmente con una fuerza integrada por efectivos de esos países.

El secretario de Estados de Estados Unidos Antony J. Blinken, amenazó con dar por finalizado el apoyo financiero por parte de su país a Níger si el presidente derrocado Bazoum no era repuesto en su cargo. En realidad, Francia ya había anunciado que suspendía la «ayuda humanitaria» y Estados Unidos advirtió que procedería en ese sentido, lo que pone en evidencia de que se trata virtualmente de una extorsión.

¿Quién es el presidente depuesto, Mohamed Bazoum?

Mohamed Bazoum asumió la presidencia de Níger el 2 de abril de 2021, tras la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas en febrero de ese mismo año. Es el presidente del «Parti Nigérien pour la Démocratie et le Socialisme (PNDS-Tarayya)» ―«Tarayya» significa «reunir» en lengua hausa―[4] y desde 2016 a junio de 2020 fue ministro de Interior, Seguridad Pública, Descentralización y Asuntos Consuetudinarios y Religiosos. En los años 1995 y 1996 de 2011 a 2015 se desempeñó como ministro de Exteriores bajo la presidencia de Mahamadou Issoufou, quien ejerció la primera magistratura entre abril de 2011 y abril de 2021, cuando fue sucedido por Bazoum.

Graduado en Filosofía en el Departamento de Letras y Ciencias Humanas en el Departamento de Filosofía de la Universidad de Dakar y una maestría en Filosofía Política y Moral, tuvo una destacada actividad sindical en la Unión Nacional de Maestros de Níger (Syndicat National des Enseignants du Niger, SNEN) y luego en la Oficina Ejecutiva del Sindicato de Trabajadores de Níger (Union des Syndicats des Travailleurs du Niger, USTN). Su actividad política también ha sido significativa tanto en el poder legislativo como en el poder ejecutivo.

Bazoum es considerado funcional a los intereses de las potencias occidentales y, precisamente, los militares que tomaron el poder se oponen a la expoliación del país por parte de las potencias occidentales, en particular de Francia y de Estados Unidos. Literalmente, Bazoum era un aliado privilegiado de Washington. Cabe mencionar que el 30 de marzo de 2023 había asistido como «orador destacado» al Banco Mundial[5].

El golpe de Níger, uno más en África

Cuando se creía que el continente africano se estaba encaminando hacia la democracia, siguiendo las tendencias mundiales, en el último tiempo esto que parecía una certeza se está desdibujando en la política africana.

Una serie de golpes de Estado se han llevado a cabo en África en los últimos dos años, atravesando el continente. Los militares se han hecho del gobierno en diversos países, desde Guinea hasta Sudán, en el que dos facciones del ejército se disputaron el poder.

Los golpes en la región del Sahel se han producido en Chad ―donde el presidente Mahamat Idriss Deby Itno asumió el poder encabezando una junta militar en abril de 2021 tras la muerte de su padre, Idriss Deby Itno―, Guinea, donde se supone que la reacción se debía a la gran corrupción que se observaba en el país, mientras que los que tuvieron lugar tanto en Malí ―cuyo golpe tuvo lugar en 2020― como en Burkina Faso ―donde en septiembre de 2022 fue destituido el presidente interino Paul-Henri Sandaogo Damiba― habrían sido motivados por la creciente ola de violencia de los grupos yihadistas. Según fuentes de las Naciones Unidas, los factores que han llevado a la desestabilización en Burkina Faso serían la violencia interétnica, el conflicto armado, la pobreza, las desigualdades, la inseguridad alimentaria y el cambio medioambiental[6].

En Malí las fuerzas francesas fueron sustituidas por los mercenarios del grupo Wagner pero en todos estos estados los golpes no habrían favorecido la estabilización de la región sino que habrían obrado en sentido contrario. Cabe agregar que las tropas francesas también debieron retirarse de la República Centroafricana luego de los golpes en Malí y Burkina Faso.

El contexto global

En este viraje que se aprecia en África no puede soslayarse el conflicto entre la OTAN y Rusia que tiene como escenario a Ucrania. La guerra en Europa ha puesto en evidencia la fragilidad de los Estados Unidos, el Reino Unido y de los países de la Unión Europea por intentar doblegar a Rusia. Asimismo, los hechos de violencia que se extendieron por toda Francia poniendo en vilo al país, han demostrado la vulnerabilidad del otrora considerado «el gendarme de África». La pérdida de liderazgo de Francia en el continente africano se motiva en la entonces denominada «guerra contra el terrorismo global» instrumentado por los Estados Unidos a partir del 11 de septiembre de 2001. Bajo ese pretexto, las fuerzas estadounidenses comenzaron a desplegarse por diversos puntos del planeta y África no fue una excepción. De alguna manera, el control que ejercía Francia fue opacado por el despliegue de Estados Unidos.

La reacción anticolonialista

Luego de la retirada de las potencias colonialistas europeas de África y Asia, las metrópolis procedieron a construir unas estructuras con la intención de mantener bajo su órbita a sus otrora colonias devenidas en estados independientes, como por ejemplo la Commonwealth (Comunidad Británica) o la Comunidad Financiera Africana, creada por Francia, que mantiene a sus miembros con el franco CFA, lo que implica que no hubo una independencia real de esos países ya que esa moneda es administrada por el gobierno francés.

A partir de lo comentado ut supra, la guerra de la OTAN contra Rusia y los hechos ocurridos en Francia, entre otros, originaron fuertes reacciones contra esos vínculos, reacciones que van emergiendo en diferentes países de África y en otras regiones cuyos gobiernos buscan ingresar al grupo de los BRICS, grupo que ofrece un sistema internacional multipolar ante un sistema unipolar que está regido por la angloesfera.

La realidad es que las metrópolis siguieron manteniendo a los nuevos países atrapados en sus redes y lo propio hicieron las superpotencias, Estados Unidos y la URSS, durante la Guerra Fría, situación que como puede apreciarse no ha terminado sino que se ha renovado y a la que se ha agregado la Guerra Fría entre Estados Unidos y China.

En el caso de Níger es el gran abastecedor de uranio para las usinas nucleares francesas ―aproximadamente el 30%― al que Francia paga con la moneda creada para su comunidad, el franco CFA, la cual circula solo entre los países miembros. De esta manera, el golpe de Estado que ha desplazado a Bazoum ha establecido frenar la exportación de uranio y oro a Francia y en el caso del primero supone un serio problema energético para para el país europeo. Pero mientras Francia provee de energía a sus ciudades con el uranio nigerino, regiones del propio Níger carecen de energía eléctrica.

La pérdida de control de los países occidentales benefició a China y Rusia que se están posicionando en el continente, lo que parece recrear los tiempos en que África estaba condicionada por Estados Unidos y la URSS.

De esta manera, China y Rusia son percibidos como los países que ofrecen cooperación a los países africanos que pretenden salir del control occidental. En el caso de los países en los que se han producido golpes de Estado, los nuevos gobiernos y la población se inclinan en favor de una aproximación a Rusia y al grupo paramilitar Wagner, mercenarios que están presentes en Malí desde el golpe de 2021 y también en la República Centroafricana y en Libia.

Esta situación no puede ser desvinculada de la II Cumbre del Foro Económico y Humanitario Rusia-África que tuvo lugar el 27 y el 28 de julio de 2023 en San Petersburgo. En esa oportunidad, el presidente ruso, Vladímir Putin, se comprometió a implementar todos los acuerdos alcanzados en las conversaciones con los líderes de los países africanos en el marco de esa cumbre. Uno de los temas de preocupación de los líderes africanos fincó en la no renovación del acuerdo de granos a través del mar Negro pero ofreció una donación de 50.000 toneladas de granos a los países africanos, más precisamente a Burkina Faso, Zimbabue, Mali, Somalia, Eritrea y República Centroafricana.

Los países de la CEDEAO, aliados de Occidente, están presionando a Níger pero los miembros de esa organización en los que se han producido golpes de Estado, Malí Guinea y Burkina Faso, han manifestado su apoyo a los militares nigerinos y han advertido a los demás estados de la CEDEAO que de producirse un ataque a Níger lo considerarán como propio. Argelia también estaría en la misma línea, es decir, apoyando a los militares nigerinos y cabe agregar que también es un país con estrechas relaciones con Rusia. También facciones libias respaldan a los militares nigerinos. Mientras que los países de la CEDEAO estarían dispuestos a emprender una intervención militar que favorecería los intereses occidentales, tanto Estados Unidos como la Unión Europea han sugerido continuar con la vía diplomática.

Mientras tanto la junta militar de Níger se encamina a juzgar al derrocado Mohamed Bazoum y a miembros de su gabinete por alta traición y por socavar la seguridad interna y externa del país luego de sus reuniones con líderes internacionales.

Frente a este proceso judicial, el Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, se ha pronunciado en contra de la decisión de la junta golpista militar de Níger expresando que se trata de un nuevo gesto de provocación contra la democracia en Níger, la CEDEAO, lo que implica un intento de atraer a los miembros de esa organización en favor de las potencias occidentales.

La creciente presencia de Rusia en África

Tanto luego de los golpes de Estado en Malí como en Burkina Faso, las nuevas autoridades han fortalecido sus relaciones con Rusia y lo propio procura la junta militar de Níger, a la vez que han desplazado a Francia de sus respectivos países.

En las calles de Níger se pudo apreciar a personas que portaban la bandera de Rusia, algo que ya se había visto en los otros países africanos tras los respectivos golpes. No obstante, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, prefiere ser cauteloso por lo que despega tanto a Rusia como al grupo Wagner de los hechos ocurridos en Níger pero como ya se ha dicho antes, el grupo paramilitar ya tiene presencia en algunos países del continente pero no se ha comprobado que se haya establecido en Níger.

Estos países africanos fortalecen la posición de Rusia a la vez que podrían ser proveedores de recursos naturales mientras que serían favorecidos con la provisión de armas rusas, atento a las necesidades de las fuerzas para hacer frente a la lucha contra los grupos terroristas que asolan en la región del Sahel.

Algunas apreciaciones

Es evidente que la guerra entre la OTAN y Rusia ha acelerado ciertos cambios geopolíticos que probablemente se hubieran producido más lentamente. Del mismo modo, la situación interna de Francia ha mostrado una debilidad que ha sido apreciada por los mandos militares de los países que se encontraban dentro de la influencia francesa por lo que han decidido impedir la expoliación de sus recursos por parte de los países occidentales a la vez que se encuentran reorientando su política exterior y sus alianzas militares hacia Moscú. En este contexto, se observa que el gobierno de Washington procura continuar mediante la vía diplomática, lo que no significa que no estén induciendo a los países aliados de la CEDEAO a llevar adelante una intervención militar. Un eventual retiro de Estados Unidos de la región supone dejarle el camino libre a Rusia pero un desplazamiento de Francia de la región también podría favorecer a un incremento de la presencia estadounidense, por lo que en África podrían estar dándose jugadas estratégicas complejas que no deberían ser abordadas mediante un pensamiento lineal. En este contexto, debe tenerse presente que el martes 15 de agosto de 2023 grupos yihadistas perpetraron un ataque terrorista a un destacamento de las fuerzas nigerinas en el oeste del país, en cercanías de la frontera con Malí, causando la muerte de 17 soldados.

Con referencia a Rusia, este estrechamiento de relaciones de los países africanos hacia Moscú implica un reposicionamiento internacional y también una ganancia en lo que respecta a un respaldo en los foros internacionales como por ejemplo en las Naciones Unidas.

El conflicto de Ucrania pone a Rusia en una situación de liderazgo para enfrentar a los países occidentales que, desde el punto de vista africano, representan sus explotadores tradicionales, en particular Francia ―por tratarse de países que han sido colonias de esa potencia― y Estados Unidos.

Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha sido muy hábil en convocar a la cumbre de San Petersburgo en momentos en que Moscú decidió no renovar el acuerdo de granos a través del mar Negro, lo que podría afectar las relaciones entre su país y los países africanos.

Los hechos de Níger son muy recientes pero el ultimátum de la CEDEAO a la junta militar implicaría una internacionalización del conflicto que podría escalar hacia la confrontación armada.

Finalmente, podría concluirse que estos hechos ocurridos en África ponen en evidencia la creciente pérdida de hegemonía de Estados Unidos y de Europa no solo en ese continente sino también a escala global. No obstante, y a pesar de que los tiempos se aceleran, aún habrá que pasar varias páginas para poder tener una lectura más concreta de la situación regional y global.

* Licenciado en Historia (UBA). Doctor en Relaciones Internacionales (AIU, Estados Unidos). Director ejecutivo de la Sociedad Argentina de Estudios Estratégicos y Globales (SAEEG). Profesor de Inteligencia de la Maestría en Inteligencia Estratégica Nacional de la Universidad Nacional de La Plata. Autor del libro “Inteligencia y Relaciones Internacionales. Un vínculo antiguo y su revalorización actual para la toma de decisiones”, Buenos Aires: Editorial Almaluz, 2019. Embajador Académico de la Fundación Internacionalista de Bolivia (FIB). Investigador Senior del IGADI, Instituto Galego de Análise e Documentación Internacional, Pontevedra, España.

Referencias

[1] «El general Tchiani se declara líder del Consejo de Transición tras el golpe de Estado en Níger». France24, 28/07/2023, ígerhttps://www.france24.com/es/África/20230728-el-general-tchiani-se-declara-líder-del-consejo-de-transición-tras-el-golpe-de-estado-en-níger, [consulta: 30/07/2023].

[2] Ídem.

[3] Ídem.

[4] Sitio web del Parti Nigérien pour la Démocratie et le Socialisme (PNDS-Tarayya),https://pnds-tarayya.net/notre-histoire/, [consulta: 30/07/2023].

[5] «Featured Speaker. Mohamed Bazoum, President of the Republic of Niger»-. World Bank Group, https://live.worldbank.org/experts/mohamed-bazoum.

[6] «Burkina Faso». Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), https://www.acnur.org/pais/burkina-faso#:~:text=En%20Burkina%20Faso%20convergen%20crisis,alimentaria%20y%20el%20cambio%20medioambiental, [consulta: 01/08/2023].

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