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PRÓXIMA GIRA DEL PRESIDENTE DE LA ASAMBLEA NACIONAL DE VIETNAM POR AMÉRICA LATINA Y SU SIGNIFICADO.

Ruvislei González Sáez*

Foto Ruvislei González Sáez

Introducción

Las relaciones de Vietnam con América Latina y el Caribe se han fortalecido en los últimos años y particularmente a principios de enero de 2023, cuando Bahamas estableció relaciones diplomáticas con Hanoi. Actualmente ya la nación asiática tiene lazos oficiales con los 33 países de la región, lo que abre un nuevo hito en las relaciones con esta parte del mundo. En este propio año, uno de los cuatro pilares de la dirección política de Vietnam, el presidente de la Asamblea Nacional (ANV) y miembro del Buró Político del Partido Comunista (PCV), Vuong Dinh Hue, realizará una gira oficial por Cuba, Argentina y Uruguay del 18 al 28 de abril

La Asamblea Nacional de Vietnam, en su XV mandato para el período 2021 – 2026 con el presidente Vuong Dinh Hue como líder máximo, ha tomado una serie de decisiones, incluida una histórica que contribuye a la prevención exitosa de la epidemia de COVID-19 y promueve la recuperación y el desarrollo socioeconómico después de la pandemia con una nueva resiliencia y nuevas perspectivas para Vietnam.

Por primera vez en la historia de la ANV, la proporción de diputados electos para trabajar a tiempo completo superó el 40% del número total de diputados. Aumentar la proporción de diputados a tiempo completo y disminuir la proporción de estos a tiempo parcial en los poderes ejecutivo y judicial ayudará a la ANV a mejorar su profesionalismo en el desempeño de sus funciones, tareas y actividades con mayor nivel. En particular, por primera vez en los últimos nueve mandatos de la ANV, el porcentaje de diputadas supera el 30%. La calificación profesional de los diputados de la XV ANV también es superior a la de períodos anteriores. El Consejo Nacional Electoral y el Comité de Trabajo de los Diputados (Comité Permanente de la AN) han mejorado durante el período electoral, exigiendo a los candidatos que propongan un Plan de Acción como base para el seguimiento de los compromisos de los candidatos cuando ingresen a la AN o al Consejo de la Asamblea Popular. Los votantes y los ciudadanos esperan que los delegados electos lleven a cabo planes de acción y hagan realidad las promesas electorales; como verdaderos representantes del pueblo. (Le Thi, 2022)

Según en la estructura del poder de Vietnam, el presidente de la ANV, es uno de los cuatro cargos más importantes e influyentes del país. La experiencia particular de Vuong Dinh Hue quien ha transitado por cargos trascendentes como viceprimer ministro, secretario del Partido en una provincia tan estratégica como Hanoi y con la categoría científica de Doctor en Economía, podría ser un líder con grandes perspectivas en el futuro. Su visita tiene gran trascendencia al constituir la primera delegación vietnamita de alto nivel a América Latina y el Caribe desde el 2021 cuando el entonces presidente Nguyen Xuan Phuc visitara Cuba.

Foto Ruvislei González Sáez

Visita a Cuba

Las relaciones con Cuba son históricas y esta constituirá la primera visita de un líder extranjero luego de instaurada la X legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular en La Habana, precisamente en el año del 50 aniversario en que Fidel Castro Ruz se convirtió en el primer jefe de gobierno que visitara la zona liberada del sur de Vietnam en la provincia de Quang Tri. Este viaje constituirá el cuarto de un presidente de la ANV a Cuba en el siglo XXI, después de Nguyen Van An en 2006, Nguyen Phú Trọng (actual secretario general del PCV) en 2010 y Nguyen Thi Kim Ngan en 2016. La visita de Kim Ngan constituyó la primera delegación que arribó a la nación caribeña tras el fallecimiento del Comandante en Jefe, Fidel Castro para rendirle honores y se efectuó a menos de 15 días de haber visitado Cuba el entonces presidente vietnamita Tran Dai Quang, también último líder extranjero que se reunió con el histórico líder de la Revolución Cubana.

A pesar de la pandemia, los máximos dirigentes del Partido y Estado de Vietnam y Cuba han mantenido intercambios periódicos tanto de manera presencial como virtual. La pandemia no impidió en ningún momento el intercambio permanente bilateral. En los años 2020-2022, los principales líderes de los dos países realizaron decenas de llamadas telefónicas. Solo los del Partido, del Estado y de la Asamblea Nacional, en 2021 el Secretario General, Nguyen Phu Trong y Primer Secretario Raúl Castro (9 de febrero de 2021); el Secretario General Nguyen Phu Trong y el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), Presidente Miguel Díaz-Canel (5 de mayo y 27 de julio de 2021); el Presidente Nguyen Xuan Phuc y el Primer Secretario del Comité Central del PCC, Presidente Miguel Díaz-Canel (23 de agosto de 2021); el Primer Ministro, Pham Minh Chinh y Primer Ministro Manuel Marrero Cruz (1 de julio de 2021)… Más recientemente, el 25 de marzo de 2022, el presidente de la ANV, Vuong Dinh Hue, sostuvo una conferencia en línea con el presidente de la Asamblea Nacional de Cuba, Esteban Lazo Hernández.

En 2021 el entonces presidente Nguyen Xuan Phuc fue el primer presidente extranjero que visitó Cuba posterior a la pandemia. En octubre de 2022, el Primer Ministro Manuel Marrero, en representación de los principales líderes cubanos, realizó una visita oficial a Vietnam del 28 de septiembre al 2 de octubre de ese año lo que evidenció el alto vínculo de las relaciones bilaterales entendidas como Amistad Especial y Tradicional.

Hoy Vietnam es el principal inversionista asiático en Cuba. Varios proyectos de inversión con 100% Capital extranjero y empresas conjuntas entre los dos países se han establecido y puesto en funcionamiento. Importantes empresas vietnamitas están interesadas en el mercado cubano y han venido a Cuba en busca de oportunidades de cooperación e inversión. En cuanto al intercambio comercial, el 1º de abril de 2020 entró oficialmente en vigor el Acuerdo Comercial Bilateral, con nuevos compromisos comerciales preferenciales, promoviendo beneficios para las empresas de los dos países y creando condiciones favorables para los negocios bilaterales y actividades de comercio de bienes.

En cuanto a la cooperación agrícola, el proyecto de cooperación para apoyar a Cuba en el desarrollo de la producción familiar de arroz en el período 2011-2015 logró resultados positivos y siguen desarrollándose. Los proyectos que apoyan a Cuba para producir maíz, soja y acuicultura han finalizado la fase 1 y ahora continúan implementando la fase 2. Las dos partes continúan investigando e implementando otros proyectos agrícolas y acuícolas. En cuanto a la cooperación en vacunas, en la visita oficial a Cuba del presidente Nguyen Xuan Phuc en 2021, Vietnam firmó un contrato para adquirir 5 millones de dosis de la vacuna Abdala de Cuba contra la COVID-19 y recibió de inmediato las primeras 900 mil dosis en la misma visita. A pesar de las dificultades por el bloqueo estadounidense, el sector de la salud cubano realizó un esfuerzo sin precedentes para enviar los 4,1 millones de dosis restantes de la vacuna Abdala en octubre de 2021 para para ayudar a Vietnam a luchar contra la Covid-19 en uno de los momentos más difíciles de la pandemia para el país.

En el campo de la diplomacia multilateral, Vietnam y Cuba mantienen cooperación y apoyo mutuo en organismos internacionales y foros multilaterales, especialmente en Naciones Unidas. Hanoi apoyó la candidatura de Cuba al Consejo de Derechos Humanos para el período 2021 – 2023; apoyó y promovió activamente a Cuba para la incorporación al Tratado de Amistad y Cooperación de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) (11/2020). Cuba apoyó la candidatura de Vietnam al cargo de miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para el período 2020-2021. Vietnam ha apoyado de manera constante el fin del cerco y bloqueo económico-financiero contra Cuba.

El programa de la visita del presidente de la ANV, contempla además la rúbrica de varios convenios ministeriales e instrumentos de amistad y contribución recíproca en materia de defensa nacional, seguridad pública, justicia, las organizaciones juveniles, y entre algunas provincias de ambas naciones, detalló el diplomático. Igualmente recorrerán negocios conjuntos en la Zona Exclusiva de Desarrollo de Mariel, ubicada a 45 km al oeste de La Habana. La amplia y diversa delegación vietnamita incluye a otros legisladores de alto rango, dirigentes del Partido Comunista, los ministros de la Construcción, Ciencia y tecnología, Cultura, Turismo y Deportes, empresarios y organizaciones de amistad con Cuba. (Prensa Latina, 2023)

Foto Ruvislei González Sáez

Visita a la República Argentina

Otro de los países que visitará el presidente de la ANV, Vuong Dinh Hue será Argentina. Justamente este año marca el 50 aniversario de las relaciones bilaterales, y constituye el tercer país en establecer las relaciones diplomáticas con Vietnam en la región después de Cuba y Chile el 25 de octubre de 1973. La nación sudamericana constituye una prioridad para Vietnam en su política exterior hacia la región.

En 2010, los dos países establecieron una Asociación Integral. Si bien Vietnam y Argentina están distantes geográficamente, los dos pueblos tienen una relación amistosa en el que no se olvida el movimiento de las masas argentinas para unirse en apoyo al pueblo vietnamita en la causa previa de la liberación nacional.

En la década de los noventa del pasado siglo comenzó el interés bilateral por incrementar las relaciones económicas comerciales y justo en enero de 1995, Vietnam estableció su Embajada en Buenos Aires y un año después lo hizo la nación sudamericana en Hanoi. Desde que los dos países establecieron lazos diplomáticos, las dos partes han intercambiado visitas a todos los niveles, en particular de la parte argentina a Vietnam, incluido el presidente Carlos Menem (febrero de 1997), la presidente Cristina Fernández (2013) y el presidente Mauricio Macri (2019). La más reciente visita oficial a Vietnam fue la del Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio y Culto de Argentina, Santiago Andrés Caíìero (julio de 2022).

Del lado vietnamita para visitar Argentina, estuvieron el presidente Tran Duc Luong (noviembre de 2004), el Primer Ministro Nguyen Tan Dung (abril de 2010), más recientemente la visita a Argentina del Jefe de Asuntos Internos del Comité Central del PCV, Phan Dinh. Trac (octubre 2022).

En el marco de la Asamblea Nacional, la relación entre los dos cuerpos legislativos también se ha desarrollado a través del intercambio de delegaciones bilaterales y contactos en el marco de foros parlamentarios multilaterales. Esta constituye la segunda visita de un presidente de la ANV a Argentina en los 50 años de relaciones bilaterales, después de la gira de la delegación del presidente de la ANV, Nguyen Van An (marzo de 2006). No obstante, varios vicepresidentes del cuerpo legislativo vietnamita han visitado Buenos Aires como el vicepresidente, Uong Chu Luu (julio de 2012), la vicepresidenta Nguyen Thi Kim Ngan (julio de 2014) y el vicepresidente Do Ba Ti (julio de 2018).

En el marco multilateral, los miembros de la Asamblea Nacional de los dos países mantienen contacto, coordinación y consulta entre sí, especialmente en la Unión Interparlamentaria (UIP). La Asamblea Nacional de Vietnam estableció el Grupo Parlamentario de Amistad Argentina-Vietnam (noviembre de 2021), y recientemente, el Congreso de la Nación de Argentina estableció el Grupo Parlamentario de Amistad Argentina-Vietnam (febrero de 2023).

En términos comerciales, Vietnam es actualmente el sexto socio comercial, el quinto mercado de exportación de Argentina en el mundo y un socio clave en la cooperación Sur-Sur de Argentina en el sudeste asiático, mientras que Argentina es el tercer socio comercial de Vietnam en América Latina y el Caribe después de Brasil y México. El intercambio comercial bilateral se elevó significativamente de 316 millones de dólares en 2007 a 5 150 millones de dólares en 2022, de los cuales, en 2022, el déficit comercial de Vietnam con Argentina aumentó a 3500 millones de dólares. (Departamento General de Aduanas de Vietnam, 2023)

Los principales bienes que Argentina exporta a Vietnam son soja, trigo, subproductos pecuarios, medicinas modernas, químicos, plásticos, fibras de todo tipo, materias primas textiles, maquinaria, autopartes, leche, etc. productos lácteos, cuero de vaca, madera, plástico, cuentas, acero, vino. En 2023, por primera vez, se exportaron limones argentinos a Vietnam. Argentina es actualmente uno de los pocos países que puede exportar limones amarillos a Vietnam. Los principales rubros que exporta Vietnam a la Argentina son textiles, calzado, caucho, componentes electrónicos, calderería, equipos y herramientas mecánicas, muebles, repuestos para bicicletas y motos, maletas y bolsos, artesanías. (Departamento General de Aduanas de Vietnam, 2023)

La cooperación bilateral se ha fortalecido en varios como la cultura, el deporte y la educación, lo que se refleja en intercambios entre universidades de los dos países, intercambios entre grupos de arte, fútbol amistoso. En términos de turismo, cada año miles de turistas argentinos vienen a Vietnam para visitar hermosos paisajes y aprender sobre la singular y larga historia y cultura de Vietnam. Por otro lado, Argentina es un destino turístico potencial y el número de turistas vietnamitas en Argentina va en aumento.

Foto Ruvislei González Sáez

Visita a la República Oriental del Uruguay

Las relaciones de Vietnam y Uruguay arriban este 2023 a sus 30 años, lo cual será significativa la visita de Vuong Dinh Hue a la nación latinoamericana. La gira constituirá la primera de un presidente de la Asamblea nacional de Vietnam y la de uno de los cuatro pilares de la máxima dirección de la nación del Sudeste Asiático.

El 11 de agosto de 1993, Vietnam y Uruguay establecieron relaciones diplomáticas, aunque no fue hasta septiembre de 2011 que se decidió la apertura de una misión permanente en Hanoi, como reconocimiento a la importancia que se le otorga al país indochino. Entre los acontecimientos que muestran el avance de los vínculos políticos bilaterales se encuentran la gira del presidente Tabaré Vázquez en 2007, el primero de un mandatario uruguayo, el viaje a Montevideo de la vicepresidenta Nguyen Thi Doan en 2009 en el que se apertura un consulado vietnamita.

Otras giras importantes a destacar en los 30 años de relaciones Vietnam Uruguay fueron las del entonces canciller Luis Almagro (junio de 2010), el vicepresidente Danilo Astori (11/2012), la ministra de Cultura y Educación Julia Munoz (abril de 2019) y el vicesecretario de Estado Ariel Bergamino. La parte vietnamita que visitó Uruguay incluyó a la también a la viceprimera ministra Vu Van Ninh (diciembre de 2013) y la viceministra de Relaciones Exteriores, Ha Kim Ngoe (2017).

Desde el punto de vista parlamentario en 2015 el presidente de la Cámara de Representes de Uruguay, Aníbal Pereyra visitó Vietnam. La relación entre ambas partes es positiva en general, y desde el punto de vista legislativo se prevé al incremento, destacando el Acuerdo de Cooperación firmado con motivo de la visita a Vietnam del presidente Aníbal Pereyra en enero de 2015. La visita a Uruguay del presidente de la Asamblea Nacional de Vietnam, Vuong Dinh Hue, marcará un nuevo hito en las relaciones parlamentarias entre ambos países.

Conclusiones

Vietnam es uno de los países del Sudeste Asiático que más rápido está ascendiendo en los últimos años, no solo desde el punto de vista económico, sino también diplomático. Particularmente con América Latina y el Caribe los lazos crecen y la visita del presidente de la ANV, Vuong Dinh Hue a Cuba, Argentina y Uruguay marcará una nueva etapa con esta parte del mundo. La gira, si bien está enfocada en el fortalecimiento de las relaciones políticas y legislativas, también abrirá nuevos campos en los vínculos económicos, comerciales y financieros con esta parte del mundo.

Sin dudas la visita que iniciará en Cuba en el marco del 60 aniversario de la fundación del primer Comité de Solidaridad con Vietnam del Sur, el 50 aniversario de la primera visita de Fidel Castro a Vietnam, también marcará un hito por ser el primer visitante extranjero que se reunirá con el nuevo presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular en la X legislatura de Cuba que comenzará el 19 de abril. Reafirmará el histórico compromiso con Cuba en el marco de la relación de Amistad Especial y Tradicional bilateral y se firmarán un grupo de importantes acuerdos desde el punto de los sectores legislativo, juvenil, justicia, finanzas, ciencia y tecnología, defensa, entre otros.

La visita de Vuon Dinh Hue marcará una nueva etapa en los lazos entre Buenos Aires y Hanoi, especialmente en el 50 aniversario de las relaciones bilaterales. La gira oficial abrirá nuevos canales de comunicación, nuevos negocios bilaterales y mecanismos que podrán seguir profundizando los lazos de Asociación Integral bilateral y en el camino al de Asociación Estratégica. Es una prueba de que Argentina es una prioridad y uno de los principales socios importantes de Vietnam en América Latina.

En su gira por Uruguay marcará un nuevo camino en el marco del 30 aniversario de los lazos bilaterales. Será la primera de un presidente de la Asamblea Nacional de Vietnam a Montevideo y abrirá el camino para nuevos acuerdos y proyectos. En resumen, la visita a estos tres países de América Latina y el Caribe por Vuong Dinh Hue es expresión del interés creciente de Hanoi con esta parte del mundo, justamente cuando en el año 2023 estableció finalmente relaciones oficiales con los 33 países del área, cuando se firmó el 6 de enero los vínculos diplomáticos con Bahamas.

 

Referencias

Dai Hoy Dang. Member of the Political Bureau. 2023.< https://en.daihoidang.vn/nhan-su/vuong-dinh-hue-940.vnp>. Hanoi, Vietnam.

General Department of Customs of Vietnam. Trade information. 2021. <https://www.customs.gov.vn>.

González Saez, Ruvislei. Las relaciones de la República Socialista de Vietnam con América Latina y el Caribe en 2021. Auario CEID 2021. <https://saeeg.org/wp-content/uploads/2022/09/CEID-ANUARIO-2021.pdf>.

Le Thi Thu Mai. 15th National Assembly with the responsibility of building and perfecting the national development institution. 2022. <http://lyluanchinhtri.vn/home/en/index.php/news-home/item/1000-15th-national-assembly-with-the-responsibility-of-building-and-perfecting-the-national-development-institution.html>. Hanoi, Vietnam.

Prensa Latina. Se aprestan Vietnam y Cuba a afianzar relaciones. 2023. <https://www.trabajadores.cu/20230414/se-aprestan-vietnam-y-cuba-a-afianzar-relaciones-fotos/>. La Habana, Cuba.

 

* Investigador Titular del Centro de Investigaciones de Política Internacional de Cuba. Director del Programa Sectorial de Relaciones Internacionales. Vicepresidente de la Asociación de Amistad Cuba-Vietnam. Investigador de la Sociedad Argentina de Estudios Estratégicos y Globales, SAEEG de Argentina

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EN LOS ORÍGENES DEL CONFLICTO RUSO-UCRANIANO: 2010-2014

Giancarlo Elia Valori*

Kiev, 2014. Manifestantes antigobierno protegen en la plaza de la Independencia, conocida como Maidan. Fotografía De Brendan Hoffman.

Ucrania fue gobernada de 2010 a 2014 por el presidente Viktor Fёdorovič Janukovič y sus partidarios de la región de Donetsk en el este del país. Maniobró entre la UE y Rusia en busca de beneficios políticos. Guiado por consideraciones de urgencia interna, Janukovič ayudó a crear esperanza entre la población para un acuerdo con la UE, para el cual trabajaría. Sin embargo, el presidente ucraniano no obtuvo garantías de la UE de una ayuda financiera sustancial para compensar el daño que sufriría la industria ucraniana como resultado del acercamiento económico con la UE. En vísperas de las elecciones presidenciales, que debían celebrarse a principios de 2015, el tema se volvió vital.

Al mismo tiempo, Janukovič tuvo que tener en cuenta la presión de Rusia. Rusia mostró primero a Ucrania —en forma de barreras comerciales— las pérdidas resultantes de elegir la UE en lugar de Rusia, y luego —en forma de paquete de ayuda— las ventajas de elegir a Rusia. Como resultado, en noviembre de 2013, Yanukovich suspendió inesperadamente el proceso de firma de un acuerdo de asociación política y económica con la UE. A cambio, recibió generosa ayuda financiera y económica y asistencia de Putin en diciembre.

La decisión tomada en noviembre de 2013 provocó protestas masivas en el centro de Kiev, que casi de inmediato se convirtieron en un enfrentamiento constante en Majdan Nezaležnosti,- Plaza de la Independencia, la plaza central de Kiev, la capital de Ucrania. La mayoría de los manifestantes eran personas comunes que vivían en la pobreza y estaban profundamente afectados por la corrupción desenfrenada en el aparato estatal, en el que también estaba involucrada la familia Janukovič. Para esos ciudadanos, la asociación con la UE parecía una forma de salir de la situación en ese momento y cuando la puerta de Europa se cerró fue un shock para esas personas.

A la protesta civil, conocida como Majdan, se unieron grupos nacionalistas de derecha y pronazis, principalmente del oeste de Ucrania. Según ellos, Janukovič, originario del este, trató de “fusionar” Ucrania con Rusia mediante el engaño, un movimiento al que muchos occidentales eran abiertamente hostiles. Finalmente, las protestas del Majdan fueron apoyadas y financiadas por clanes oligárquicos ucranianos, enojados por el hecho de que Janukovič y sus aliados en Donetsk, habiendo tomado un poder significativo, estaban expandiendo agresivamente sus imperios comerciales a expensas de otros oligarcas. Para ellos, Majdan era un medio para obtener elecciones presidenciales anticipadas y derrocar a Janukovič.

Los acontecimientos en Ucrania no fueron inicialmente el centro de atención de la Administración Presidencial de los Estados Unidos, que se ocupó principalmente de: la situación en el Cercano Oriente y Oriente Medio y Asia oriental; el programa nuclear iraní; la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán; y las relaciones con la República Popular China. Sin embargo, tanto por razones geopolíticas como ideológicas, Estados Unidos había apoyado durante mucho tiempo el movimiento pro-occidental en Ucrania y desconfiaba de los planes del Kremlin para la integración euroasiática. Para evitar que Ucrania entrara en la esfera de influencia rusa, Estados Unidos brindó asistencia a los líderes de la oposición occidental de derecha y alentó abiertamente sus esfuerzos.

A mediados de febrero de 2014, el conflicto en el centro de Kiev se intensificó con renovado vigor y se convirtió en enfrentamientos, lo que llevó a una conclusión predeterminada por terceros. Al principio, parecía que Janukovič había decidido superar el estancamiento dispersando por la fuerza al Majdan, que en ese momento se había convertido en un grupo militante serio, creado sobre la base de la organización nacionalista Pravyj Sektor (el Sector Derecho: un partido político ucraniano de extrema derecha y organización paramilitar). El presidente de Ucrania, sin embargo, detuvo la ofensiva policial y comenzó un diálogo con los líderes de la oposición, que pronto se convirtió en negociaciones sobre concesiones por parte de su gobierno, pero terminó el 21 de febrero de 2014 con la rendición real del presidente. El acuerdo correspondiente entre las autoridades ucranianas y los líderes de la oposición fue “firmado” por los ministros de Asuntos Exteriores de los países de la UE, a saber, Francia, Alemania y Polonia. Pero inmediatamente después de la firma ese documento fue rechazado por el Majdan: sus miembros más radicales exigieron la renuncia inmediata del presidente. Janukovič huyó de Kiev, la policía desapareció de las calles y los alborotadores del Majdan pudieron celebrar su victoria.

Tales eventos trágicos fueron muy dolorosos para Rusia. Desde el punto de vista de Rusia, Ucrania ha sido un socio débil, frágil y a menudo poco confiable durante veinte años, y creaba problemas para el tránsito de productos del gigante energético ruso Gazprom a Europa (como los italianos nos dimos cuenta y comprobamos hace años). Al mismo tiempo, Ucrania comenzó a transformarse en un Estado dirigido por una coalición de élites prooccidentales y nacionalistas profascistas y antisemitas antirrusos. Según el Kremlin, ese cambio estuvo plagado de dos amenazas: la opresión de la lengua, la cultura y la identidad rusas en Ucrania y la adhesión del país a la OTAN. Putin reaccionó de inmediato: con toda probabilidad, puso en marcha los planes ya desarrollados por Rusia en caso de que Kiev tomara el camino hacia la membresía en la OTAN. Una actitud de la que los servicios de inteligencia estadounidenses ya eran conscientes.

Determinada y caracterizada por la proximidad geográfica, la política rusa hacia Ucrania ganó impulso de inmediato. El principal objetivo de Rusia era evitar que Ucrania se uniera a la OTAN e, idealmente, reorientarla a favor del proyecto de integración euroasiática, cuyo elemento clave era la reunificación del llamado “mundo ruso”. Como parte de ese nuevo “curso proactivo”, Rusia se fijó dos objetivos.

La primera tarea fue proteger Crimea del nuevo régimen. Ese objetivo se logró aislando físicamente la península de Ucrania continental y neutralizando a las tropas ucranianas en Crimea con fuerzas especiales rusas y ayudando a los elementos prorrusos a establecer el control sobre el gobierno local, el Parlamento y las agencias de aplicación de la ley. Rusia alentó un referéndum sobre el estatus de Crimea y lanzó una campaña de propaganda masiva a favor de su reunificación con Rusia. La votación se celebró el 16 de marzo de 2014, con una amplia mayoría a favor de la reunificación. Dos días después, se firmó un acuerdo en Moscú sobre la inclusión de Crimea y Sebastopol en la Federación Rusa. Sebastopol es una ciudad en el territorio en disputa de Crimea con una mayoría de habla rusa. Es reconocida internacionalmente como parte de Ucrania, que la considera una ciudad con un estatus especial, pero en realidad es una ciudad federal de Rusia.

La segunda tarea era la federalización de Ucrania, que impediría la sumisión completa del país a Kiev, haciendo así técnicamente imposible cualquier paso hacia la membresía en la OTAN. El 1° de marzo de 2014, Putin solicitó autorización al Consejo de la Federación para usar tropas rusas en el territorio de Ucrania y la recibió. Las tropas rusas comenzaron a realizar ejercicios en la frontera ucraniana, demostrando así su disposición para una invasión, pero la frontera no se cruzó. El Kremlin presionó al nuevo gobierno en Kiev, impidió que Estados Unidos y la UE intervinieran elevando drásticamente las apuestas y alentó a los aliados políticos de Rusia en las regiones de habla rusa de Ucrania.

Foto: Sputnik / Andrei Stenin.

En el sur y el este de Ucrania, donde la población de habla rusa era la mayoría, comenzaron las manifestaciones masivas exigiendo autonomía regional y estatus oficial para el idioma ruso. Después de las manifestaciones, grupos de milicias organizadas comenzaron a ocupar edificios administrativos y tomar el control de la ciudad. En las regiones de Donetsk y Lugansk, los grupos de milicias celebraron referendos regionales a principios de mayo de 2014 y anunciaron la creación de repúblicas independientes de Kiev. Rusia no ocultó su apoyo a los separatistas, pero se abstuvo de reconocer a las repúblicas y enviar tropas rusas para protegerlas.

Rusia, sin embargo, no logró despertar a todo el sureste de Ucrania para resistir a Kiev. La esperanza de que Novorossiya, predominantemente de habla rusa, que constituía todo el sureste, se separaría de las autoridades que habían defenestrado a Janukovič y creara una federación no se materializó. Las ciudades más importantes —Dnepropetrovsk, Kharkov, Kherson, Nikolaev, Odessa y Zaporozhye— permanecieron bajo el control de Kiev. El gobierno interino de Ucrania también lanzó una «operación antiterrorista» en las regiones de Donetsk y Lugansk, que resultó en bajas significativas en ambos lados y una crisis humanitaria, pero no condujo a la intervención militar rusa.

Rusia no reconoció la legitimidad del gobierno respaldado por Majdan, aunque no rechazó el contacto con sus representantes. Estados Unidos, por otro lado, brindó apoyo político a Kiev con amplia publicidad, como lo demuestran las visitas a la capital ucraniana del entonces vicepresidente Joe Biden (2009-2017), el secretario de Estado John Kerry (2012-2017), el director de la CIA John Brennan (2013-2017) y muchos otros altos funcionarios estadounidenses. Los medios rusos afirmaron que era Estados Unidos quien dirigía las acciones de las autoridades ucranianas.

Rusia tomó una serie de medidas diplomáticas para resolver la crisis en Ucrania y lograr sus objetivos. Sin embargo, la “diplomacia telefónica” entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos, así como los contactos entre el ministro de Relaciones Exteriores Sergei Viktorovič Lavrov y el secretario de Estado John Kerry, no produjeron resultados. La Declaración de Ginebra de 17 de abril de 2014 y la hoja de ruta publicada por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) el 8 de mayo de 2014 quedaron en el papel. En cambio, se prestó más atención al envío de tropas rusas a la frontera ucraniana para ejercicios en lo que parecían ser preparativos para una invasión. Se suponía que la presencia de las tropas disuadiría a Kiev de tomar medidas duras contra sus oponentes y demostraría la determinación de Rusia de defender sus intereses.

El 25 de mayo de 2014, las elecciones presidenciales anticipadas se celebraron con éxito en Ucrania, que culminaron con la victoria indiscutible de Petro Porošenko (2014-19), un oligarca y uno de los principales patrocinadores del Majdan. Los radicales, como el partido anteriormente dirigido por Janukovič, no recibieron un apoyo significativo. Era imposible ignorar la elección de decenas de millones de ucranianos y Putin decidió reanudar los contactos con Kiev al más alto nivel. El Kremlin, donde Porošenko era bien conocido, se estaba preparando para interactuar con las élites ucranianas nuevamente, pero bajo nuevas condiciones.

En cuestión de semanas, las medidas tomadas en respuesta a las acciones de Rusia cambiaron radicalmente la naturaleza de la relación de los antiguos adversarios de la Guerra Fría. La política de Rusia causó una reacción extremadamente negativa de los Estados Unidos y sus aliados. Rusia fue considerada un agresor y de hecho fue expulsada del G8, un grupo de grandes países industrializados que volvieron al formato del G7. La UE redujo los contactos con Rusia y la OTAN congeló la cooperación con Rusia. Los líderes occidentales pospusieron las cumbres bilaterales con Putin, aunque pronto se hicieron excepciones. En la Asamblea General de la ONU, durante la votación del referéndum en Crimea, cien Estados se negaron a reconocer el resultado, mientras que solo once países adoptaron la posición opuesta. Ante una condena casi unánime, la delegación rusa suspendió su participación en los trabajos de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa. El proceso de adhesión de Rusia a la OCDE también se ralentizó. Muchas delegaciones occidentales se negaron a asistir a reuniones internacionales de alto nivel en Rusia, incluida la Conferencia de Seguridad anual en Moscú y el Foro Económico en San Petersburgo.

Estados Unidos, y más tarde sus aliados, impusieron sanciones a funcionarios y compañías rusas que cubren sectores enteros de la industria rusa. Su objetivo era infligir daños a Rusia que la obligaran a hacer concesiones sobre el tema ucraniano e idealmente condujeran a un cambio de régimen, es decir, derrocar a Putin mediante un “golpe de Estado” o un levantamiento popular. Las posteriores oleadas de sanciones, combinadas con el creciente aislamiento político de Rusia, condujeron inmediatamente a una fuerte caída en su mercado de valores, una fuga masiva de capitales y un mayor debilitamiento del rublo. Aunque las relaciones de Rusia con Europa en el sector energético eran demasiado importantes para muchos países de la UE, la tendencia hacia la diversificación de los suministros energéticos en el Viejo Mundo aumentó significativamente. Como resultado, se hizo más difícil para Rusia importar productos de alta tecnología.

En la esfera militar, Rusia comenzó a ser vista como un adversario de Occidente. La OTAN estaba intensificando una vez más sus esfuerzos para lograr su objetivo original de finales de la década de 1940, por ejemplo, “mantener a los rusos fuera”. El despliegue temporal de contingentes occidentales relativamente pequeños en Polonia, Rumania y los Estados bálticos podría convertirse en bases permanentes para las tropas de la OTAN, incluidas las tropas estadounidenses en la frontera oriental de la Alianza. El sistema de defensa antimisiles de la OTAN, actualmente desplegado en Europa, está abiertamente dirigido contra las fuerzas nucleares rusas. Estados neutrales, como Suecia y Finlandia, están considerando unirse a la OTAN y, si se toma esta decisión, serán aceptados con los brazos abiertos. Así, en la decisiva Cumbre de la OTAN en Gales en septiembre de 2014, la “nueva vieja cara” de la Alianza se presentó a Europa y Rusia.

 

* Copresidente del Consejo Asesor Honoris Causa. El Profesor Giancarlo Elia Valori es un eminente economista y empresario italiano. Posee prestigiosas distinciones académicas y órdenes nacionales. Ha dado conferencias sobre asuntos internacionales y economía en las principales universidades del mundo, como la Universidad de Pekín, la Universidad Hebrea de Jerusalén y la Universidad Yeshiva de Nueva York. Actualmente preside el «International World Group», es también presidente honorario de Huawei Italia, asesor económico del gigante chino HNA Group y miembro de la Junta de Ayan-Holding. En 1992 fue nombrado Oficial de la Legión de Honor de la República Francesa, con esta motivación: “Un hombre que puede ver a través de las fronteras para entender el mundo” y en 2002 recibió el título de “Honorable” de la Academia de Ciencias del Instituto de Francia.

 

Traducido al español por el Equipo de la SAEEG con expresa autorización del autor. Prohibida su reproducción.

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DEFENSA Y FUERZAS ARMADAS: ANECDOTARIO DE OTRA INFAMIA KIRCHNERISTA

Ariel Corbat*

La realidad de la Argentina exhibe el sostenido declive de su poderío militar desde 1983, una constante peligrosa cuando el punto partida de cualquier planificación de Defensa es un extenso territorio sobre el que hay notorias ambiciones extranjeras.

A la obviedad del territorio insular usurpado bajo dominación militar británica hay que sumar otras presencias igualmente indeseables como el enclave chino en Neuquén, con buena parte de la facción en el gobierno queriendo alinear el país a los intereses del Partido Comunista Chino, el activismo secesionista de la izquierda disfrazada de etnonacionalismo mapuche, la vocación colonial que llevó al presidente Alberto de la Fernández a ofrecerse a Putin como puerta de entrada para Rusia en América Latina, la expansión del narcotráfico con organizaciones trasnacionales que en su afectación de la soberanía argentina lograron cierto control de los cielos para el tráfico y, a la par de todo ello, una grosera descomposición social en la que proliferan escenarios de Guerra Civil Molecular haciendo de la Seguridad Interior un queso gruyere.

En lo que va del siglo XXI Argentina se gobierna como si fuera un experimento para determinar cuánto tiempo puede sobrevivir un país atentando contra su propia existencia. Y nos acostumbramos.

Tanto nos acostumbramos, que todavía no se entiende que para recuperar la voluntad de ser y prevalecer de la Nación Argentina es necesario actualizar, reformular y aplicar una nueva Doctrina de la Seguridad Nacional. La sola idea de repensar la Seguridad Nacional asumiendo que hay enemigos externos e internos espanta a la corrección política impuesta por el marxismo a través de la subversión cultural. La cobardía intelectual ha llegado al punto de cuestionar cualquier intención del ser y prevalecer de la Nación Argentina, como si ello atentara contra la paz (contra alguna idea indigna de la paz); cual si no existieran el Himno y la Constitución Nacional imponiendo deberes para con las futuras generaciones.

Y claro, para comprender y cumplir esos deberes, es imprescindible desear que haya futuras generaciones de argentinos, cosa que los que gobiernan en lo que va del siglo, expulsando población joven y formada como sometiendo el país todo a la miseria, evidentemente no desean.

Como un síntoma más de esa erosión al ser y prevalecer de la Nación Argentina, se impuso hace tiempo la estúpida creencia que contemplar las hipótesis de conflicto promueve los conflictos y así se repite, como si fuera algo beneficioso, que «Argentina no tiene hipótesis de conflicto». Algo más que imbécil cuando, de mínima, hay un conflicto con los británicos por la integración del territorio nacional.

En ese contexto cabe enmarcar la breve cronología de otra infamia kirchnerista que motiva este artículo.

A finales de noviembre, Alberto de la Fernández asesorado por Casa Militar y la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), dependiente de Naciones Unidas, dispuso la compra de un nuevo avión presidencial. Se trata de Boeing 757-256 para 39 pasajeros, con dormitorios y grandes comodidades, lo necesario a efectos que el seudo Presidente pueda llevar aquella fiesta de Olivos al aire.

Argentina es un país empobrecido y empobreciéndose, SOBRE ESA REALIDAD UN AVIÓN PRESIDENCIAL NO PUEDE SER PRIORIDAD. Nada justifica hoy, ni desde la austeridad ni desde la seguridad presidencial que el presidente no viaje como pasajero común en cualquier vuelo de línea. Y muy especialmente porque, a todas luces, hay cosas más relevantes que proteger.

Lo que nuevamente revela la compra del avión presidencial es que los políticos argentinos, más allá de cuál sea la facción en el poder, tienen una propensión absoluta a considerarse más importantes que aquello que hace a la razón de sus funciones.

En este caso ello ha sido explicitado por Alberto de la Fernández en una entrevista con Financial Times, diciendo, con posterioridad a su decisión de proveerse un avión de dignatario relevante, que:

«Argentina tiene que destinar sus recursos a cosas más importantes que la compra de aviones militares hoy en día. Porque estamos en un continente muy desigual con todos los problemas que anteriormente usted comentó, pero es un continente en el que no hay problemas de guerra. La paz es el común denominador entre nosotros y la búsqueda de la unión regional como en su momento Europa construyó la unidad regional, es la búsqueda de América Latina, con lo cual para nosotros hay otras prioridades, antes de comprar armas».

O sea: avión presidencial sí, aviones de combate no. Prioridades de casta. Ellos valen más que nosotros…

Nada nuevo, por cierto. Pero la infamia no es solamente el hecho en sí de comprar un avión suntuario y ni uno para proteger nuestros cielos.

La cosa sigue porque el orden de prioridad establecido por Alberto de la Fernández anteponiendo su comodidad a la seguridad de la Nación, lleva implícita en su argumentación ante el Financial Times el total desconocimiento de la relación intrínseca entre diplomacia y Fuerzas Armadas, que es decir entre la capacidad de consensuar en la mesa de negociaciones y disuadir en el terreno.

Entonces contradiciendo sus propias palabras, como cada vez que lo que dice se confronta con algo que dijo antes (ya que si hay alguien que no sobrevive a la prueba del archivo es Alberto de la Fernández), al tiempo que declara que la paz reinante en la región no justifica comprar aviones de combate, la Cancillería ensayaba una insignificante protesta diplomática (sin ningún respaldo militar) denunciando que la participación de efectivos kosovares en ejercicios militares en Malvinas «constituye una injustificada demostración de fuerza».

No es preciso mucho análisis para entender que cada vez que el gobierno argentino expresa su «contundente rechazo» a cualquier medida con que los británicos responden a sus necesidades de Defensa, mismas que no descuidan porque Argentina si lo haga, la nota va al archivo de las insignificancias.

Ya desde el año 2012, a 30 años de la guerra, el entonces ministro de Defensa inglés Philip Hammond afirmó que la Argentina «no es una amenaza militar creíble» para la continuidad de la usurpación británica sobre las Islas Malvinas.

Ahora, a 40 años de la Guerra de Malvinas, no sólo no son una amenaza creíble para la usurpación británica, no son un elemento de disuasión significativo frente a ninguna de las amenazas que se ciernen sobre la República Argentina.

Con su idílica, cómoda y falsa visión de la América del Sur como una región de paz garantizada, parece ignorar Alberto de la Fernández que esa supuesta paz puede dejar de existir de la noche a la mañana. En su ignorancia deliberada, parece no haberse enterado que allá por el 2004, ante fallas en el suministro de gas, el Presidente de Chile Ricardo Lagos puso sobre su escritorio la opción militar contra la Argentina y le advirtió a Néstor Kirchner, cuyo Jefe de Gabinete era un tal Alberto Fernández, que «el día en que las casas no tuvieran gas, me vería obligado a declararle la guerra a su país, porque esa carencia provocaría una revolución aquí. Me daba cuenta de lo que significaba mi amenaza, pero no tenía otra herramienta para exigir que se cumpliera el contrato», narró el chileno en su biografía.

Entendamos que si Chile por una cuestión de gas puso la opción militar en la mesa de negociaciones, cualquier otro país podría hacer lo mismo. De hecho, en el plano de la ficción, la novela de Carlos González Robles «CHINA INVADIÓ ARGENTINA ¿La Tercera Guerra Mundial?», plantea un conflicto en el que los chinos recurren a su aparato militar para ocupar el país con la excusa de cobrar deuda argentina. Remarco que es una ficción, pero una ficción posible, del tipo de ficciones que lo son hasta que dejan de serlo.

Y alguno de los cráneos que, embriagados de paz, establecen prioridades en Argentina podría decir que frente a tal hipótesis no tendría sentido, por la disparidad de poderío, ofrecer ninguna resistencia. Son los mismos cráneos que supusieron que la campaña rusa en Ucrania sería una guerra relámpago. En el ejemplo ucraniano hay que saber valorar el esfuerzo militar convencional como manifestación de la voluntad de ser y prevalecer de una Nación. Cierto es que Ucrania recibió y recibe una importante ayuda militar extranjera, pero la puede recibir porque desde antes de la guerra tuvo la voluntad de fortalecer su instrumento militar.

Si hasta aquí lo expuesto en este artículo ha impactado en su pensamiento con la preocupación sobre el lamentable estado de indefensión que ofrece la Argentina, prepárese para indignarse al comprender algunas de las razones por las que estaremos todavía peor.

No es novedad que tenemos por ministro de Defensa a un fulano con pasado terrorista. Jorge Taiana es hoy el encargado de sostener el plan kirchnerista para el escarnio y la humillación constante de las Fuerzas Armadas (algo que arrancó en 2003 con hechos públicos y notorios cuya enumeración al día de hoy sería a más de larga muy penosa).

No hay en el destrato de gobierno a las Fuerzas Armadas ninguna casualidad, todo, absolutamente todo lo que se hace es con la finalidad de sacarlas del eje de la Defensa y convertirlas en un instrumento servil a la propaganda política Incluso con César Milani, generalito traidor a la sangre de los combatientes del Ejército Argentino, quien desde el retiro tiene el descaro de proponer una revolución que implicaría el fin de la República y la culminación del proyecto totalitario de corrupción estructural kirchnerista.

Es así que en este mismo país que derrocha su presupuesto en ideología de género, Ministerio de la Mujer incluido, al mismo tiempo que se prioriza la compra de un avión presidencial por sobre la adquisición de aviones de combate, al mismo tiempo que la Cancillería protesta porque los británicos obran como dueños absolutos de las Islas Malvinas, al mismo tiempo que condenada la vicepresidente Cristina Fernández por corrupta el gobierno entero se abroquela en defensa de la corrupción, es decir en el momento que el país está más cerca que nunca de ser un completo hazmerreír que de volver a ser una República con un mínimo de seriedad, el Ministerio de Defensa dedica toda la pompa de su ceremonial a la inauguración de un banco rojo en el Edificio Libertador…

Supone la progresía que simbolismos estúpidos como el del banco rojo concientizan sobre la necesidad de evitar la violencia contra las mujeres, y en tal sentido explicó  la directora de Políticas de Género, Laura Masson, que «desde el Ministerio de Defensa trabajamos diariamente para llevar adelante diferentes políticas públicas para prevenir y erradicar la violencia de Género en el ámbito de la Defensa Nacional y para promover la equidad en el ámbito laboral que pretendemos sea libre de todo tipo de violencias».

Pocas imágenes son tan ridículas como las de funcionarios inaugurando bancos pintados de rojo y en el caso de Defensa es todavía más grotesco por el contexto aludido que muestra un deliberado y completo abandono de la razón de ser de ese Ministerio.

Esto no puede más que empeorar, porque además tampoco hay en la conducción militar de las Fuerzas Armadas ningún atisbo de dignidad, sólo parece haber ordenanzas de la resignación, tan dispuestos a subirse a cualquier banquito como a pintar otros, a olvidar a los camaradas muertos en combate, A NO DEJAR NINGUNA HUELLA MÁS QUE HABER OSTENTADO UN GRADO.

Cualquier mirada sobre la conducción política y militar de las Fuerzas Armadas, lleva a pensar que a los jóvenes argentinos con vocación militar, el más sano consejo que se les puede dar es que mejor se enlisten en la Legión Extranjera antes que vestir uniforme nacional para que los humillen todos los días.

Y no tengo que explicarle a ningún lector lo que al escribir ese último párrafo se agita en mi interior. Eso mismo que a Usted.

 

* La Pluma de la Derecha, un liberal que no habla de economía.

Artículo publicado el 11/12/2022 en La Pluma de la Derecha.