Archivo de la etiqueta: Economía

MI AMIGO EL EFECTIVO

Iris Speroni*

El dinero en el banco es propiedad del banco, no de uno.

 

Hay una creciente presión sobre los individuos para descartar el uso de efectivo (billete) y reemplazarlo por pagos electrónicos de diferente tipo.

Ya en el siglo XVIII bancos británicos emitían billetes (privados) que podían ser utilizados para cancelar obligaciones. El sistema de notas o papeles o documentos tiene antecedentes con los fenicios, el Imperio Romano y con órdenes eclesiásticas en la Edad Media.

En el siglo XIX nacen los bancos centrales, que se perfeccionan en el siglo XX.

La emisión de moneda era potestad del rey durante la Edad Media, pero básicamente, durante la Modernidad. El monarca acuñaba monedas de metal, no papel moneda. A partir del siglo XIX, las naciones comenzaron a emitir su propio dinero convertible a metálico o no. En el caso argentino, el gran emisor fue la Provincia de Buenos Aires (con garantía de las rentas de Aduana), por lo menos, hasta la unificación del país. Sin embargo, aún entonces, era una economía con gran participación de la plata, proveniente del Alto Perú.

Si van de paseo por Salta, les recomiendo que visiten el Museo Histórico del Norte, en el antiguo edificio del Cabildo sobre la plaza principal, que cuenta con una valiosa colección de las monedas utilizadas en nuestro país durante la colonia y en el siglo XIX.

Con la segunda guerra mundial se terminó el patrón oro y, por lo tanto, el valor de los billetes pasó a depender, exclusivamente, en la confianza que dicho medio de pago o guarda de valor mereciera, según el país y la época.

Argentina, entre ambas guerras, tuvo oro depositado en el Banco de Inglaterra, y las compras y ventas con Gran Bretaña se autocancelaban. Si el saldo era negativo, se restaba de las reservas; si era superavitario —la mayoría de las veces— sumaba a la pila de lingotes.

A fines del siglo XX se popularizó el uso de la tarjeta de crédito, herramienta que décadas atrás era accesible sólo a pocos mortales. Luego se instaló la tarjeta de débito.

En el siglo XXI en Argentina se popularizó la bancarización. Primero la obligatoriedad del pago de salarios para la gente en relación de dependencia, luego el pago de jubilaciones y pensiones, posteriormente planes sociales.

Durante el gobierno de Macri se hizo obligatorio que los locales minoristas acepten el pago electrónico (lo que a mi entender es contrario a la Constitución ya que la única moneda de curso legal es la emitida por el BCRA bajo control del HCN).

En resumen: entramos al nuevo orden mundial, donde nada será tuyo, ni siquiera tu sueldo, que está en manos del banco.

Lo que empezó con publicidad para convencer de que tal o cual tarjeta traían la felicidad, continuó con la imposición del pago electrónico por el Estado. Casi casi como si los burócratas del BCRA le quitaran el negocio al gobierno (la emisión de moneda) para dársela a los bancos. Lo que se dice patear en contra.

Anónimo

¿Cuál es la diferencia entre pagar con un billete de mil pesos en la fiambrería o pagar con una tarjeta de débito? 

En primer lugar, hay grandes diferencias para el fiambrero, debido a la carga impositiva. Esa transacción (digamos que de $ 750) tiene impuestos a los ingresos brutos, IVA y, para el comerciante, impuesto al cheque. $ 750,00 x (5%+21%+0,6%) = $ 750,00 x 26,6% = $199, 50.-; $ 199,50 ÷ ($ 750,00 – $ 199,50) = 36,24% de sobreprecio. Un gran incentivo a evadir.

¿Y para uno? Por un lado está la comodidad de no mover efectivo, evitar que se apodere del dinero un arrebatador, sentirse Kardashian cuando uno paga. Lo que no es tan cómodo es que los bancos y por su intermedio las autoridades nacionales, saben o pueden saber en qué gastamos nuestro dinero. Cuánto efectivo líquido tenemos, si estamos endeudados, cuánto gastamos en comida, alcohol, salidas, indumentaria, farmacia o turismo. Como las transacciones tienen ubicación geográfica, saben si estamos en nuestro lugar de residencia o nos movimos. En fin, si quieren, saben todo. 

La gran diferencia es que el efectivo es anónimo. Puede ser de Pedro o de Nilda. El dinero electrónico es identificable. Y si es identificable, pueden dejarnos sin dinero si no hacemos lo que el poder dice. Pueden cancelarnos. Pueden relegarnos al ostracismo cívico sin tener que expulsarnos físicamente del país.

Durante la crisis del 2002, los argentinos hemos vivido un shock violento de desconfianza con la banca. Tenemos clara una verdad que era hasta hace pocos días atrás difusa para el resto del mundo: el dinero en el banco es propiedad del banco, no de uno. Aun así, con ese conocimiento monumental en nuestras manos, hemos vuelto a las andadas, confiando nuestro sueldo o nuestros ahorros al sistema bancario.

Zambullida en la realidad

Días atrás los gobiernos de Occidente tomaron dos medidas que cambian los paradigmas del sistema financiero internacional del último siglo; dos medidas que cambian al mundo como lo conocemos: 1) la intervención en la donación a los camioneros canadienses por parte de personas físicas y 2) el congelamiento de la cuentas de ciudadanos rusos. 

Por dos motivos diferentes, el orden establecido se vio amenazado, y sobreactuó. Hizo algo muy tonto: mostrar sus cartas. Siempre se supo que se podía hacer. Lo hicieron. Ahora todos estamos avisados.

Una de estas dos personas les prohibió a disidentes dejar el país, les cerró cuentas bancarias a manifestantes, declaró la ley marcial y prohibió protestas en contra del régimen. La otra persona es Vladimir Putin.

Hasta hoy, no sólo para intervenir, sino para conocer el contenido de una cuenta privada, las autoridades requerían autorización de un juez.

Violaron todo ordenamiento legal y embargaron cuentas de privados sin intervención judicial. Rompieron la base del sistema de emisión monetaria: bona fide. Nuestro patrimonio pasa a estar, bajo cualquier excusa, bajo capricho del mandante de turno. 

Arturo Jauretche decía (creo que la frase no le pertenece) que no hay nada más parecido a un nazi que un burgués asustado. No sé. A mí me parece más la actitud de un déspota ilustrado propio del siglo XVIII. Todo lo pueden, todo lo hacen, para defender el statu quo.

Es paradójico lo que sucede. En un momento, luego de que lograran desplazar a Donald Trump de la presidencia de EEUU, parecía que el Nuevo Orden había ganado definitivamente.  Como dije en enero 2021: “Hoy están en la cima del mundo, en una borrachera de poder. Jugaron con pocas chances y ganaron. Están en Las Vegas luego de tomar media botella de tequila, varios saques de merca y dos muchachas en la cama, una rubia y otra morocha. La vida les sonríe y son los amos del universo”. Habían vuelto con toda la furia. Violaron libertades individuales con la excusa de la pandemia. Retomaron el festival de subsidios que implica el Acuerdo de París y la energía verde. Prosiguieron con la agenda 2030. Nos amenazaron a nosotros, los mortales, con que no seríamos dueños de nada.

En pocos días, la magia se disolvió. Palizas a los manifestantes en Australia, intervención en las cuentas bancarias de los simpatizantes de la marcha de camioneros en Canadá, congelamiento (embargo) de cuentas de personas físicas de nacionalidad rusa con la excusa de la guerra en Ucrania.

El dinero electrónico no es anónimo. Una persona puede ser llevada al ostracismo por el poder de turno [1]. Si quieren le pueden sacar su dinero, su trabajo y hasta el derecho de consumir a deuda (tarjeta de crédito). 

Lo hemos visto en la pandemia. La misma élite dominante que premió con un Oscar “La vida de los otros”, presiona a individuos hasta su punto de quiebre. Como la Stasi.

¿Qué hacer?

Lo de siempre. Recurrir al efectivo de divisas diferentes, el dólar no será más la moneda del mundo. Poseer oro o plata o algún otro bien valioso. Si se tiene un poco más de capital, diversificar. En fin. Si uno no tiene capital, estar lo más afuera posible del circuito legal, como albañil paraguayo. 

Durante décadas el sistema financiero internacional mantuvo una fachada con el fin de mantener la rueda girando y crear la fantasía de que se podía confiar en el dólar y en el sistema legal de la propiedad de los países sajones. Ya no más. Todo ahora es igual que siempre lo fue, pero sin la fachada.

Tucker Carlson: la credibilidad del dólar y del sistema bancario en picada.

Si algún día retomamos el Proyecto Nacional, debemos guardar oro en las reservas. El primer paso será pedir los impuestos que corresponden a las auríferas en especie (oro). Diversificar las divisas en uso. Eliminar todas las obligaciones de uso electrónico para reinstaurar al billete en las transacciones corrientes minoristas. Retirar las que tenemos en el Banco de Inglaterra.

Como individuos debemos aferrarnos al efectivo como si nuestra libertad dependiera de él; porque de él depende. Como Nación, debemos acumular reservas en oro y en canasta de diferentes divisas, preferentemente lo primero e incentivar a los argentinos a ahorrar en oro.

Recomiendo que vean la entrevista a Jim Rickards, experto en temas bursátiles y monetarios. Subtitulada. Lean la nota de Baron Borissey sobre el fin del sistema financiero como lo conocemos actualmente.

Digámosle adiós al dólar, que se va.

Foto: cortesía de @TodosGronchos

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas y videos relacionados

La deuda y las mentiras verdaderas, por Baron Bodissey

http://restaurarg.blogspot.com/2021/12/la-deuda-y-las-mentiras-verdaderas.html 

Enduro

http://restaurarg.blogspot.com/2021/01/enduro.html 

Currency War/Total War: Jim Rickards

https://www.youtube.com/watch?v=b9YtPsFViqE 

Nota:

[1] Recomiendo que vean “Nosedive” el episodio 1 de la tercera temporada de “Black Mirror”.

 

Artículo publicado originalmente el 12/03/2022 en Restaurar.org, http://restaurarg.blogspot.com/2022/03/mi-amigo-el-efectivo.html

CUANDO LA MENTIRA ES LA VERDAD

Iris Speroni*

Son todos cómplices.

 

¿Qué ves?

¿Qué ves cuando me ves?

Cuando la mentira es la verdad.

De Diego Arnedo / Federico Gil Sola / Ricardo Jorge Mollo

 

Esta semana el poder ejecutivo mandó un anteproyecto de ley al Congreso con el objeto de aprobar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Es un documento que incluye anexos técnicos, prospecciones y exposición de motivos. Como cada medio publicó sus partes en diferente orden,  voy a usar la paginación de la versión de El Cronista para las citas.

En su exposición el ministro mezcla verdades con mentiras. Muchas verdades y muchas mentiras. 

El gobierno presenta una proyección macroeconómica incumplible. No tiene ninguna importancia. Lo único significativo de las 137 páginas es (pág. 8):

…  SANCIONAN CON FUERZA DE LEY:

ARTÍCULO 1º.- Apruébase, en los términos del artículo 2° de la Ley N° 27.612, el Programa de Facilidades

Extendidas a efectos de refinanciar la deuda existente entre la REPÚBLICA ARGENTINA y el FONDO

MONETARIO INTERNACIONAL, correspondiente al Acuerdo Stand By suscripto en el año 2018.

La aprobación del acuerdo tiene varias consecuencias: a) le cubrirá el trasero por las irregularidades cometidas a Christine Lagarde y a los restantes burócratas del FMI; b) tornará inefectiva toda persecución penal a Mauricio Macri, Luis Caputo y Nicolás Dujovne; c) justifica al ministro Guzmán, cuya tarea consiste en validar la transacción efectuada por el FMI durante el gobierno de MM.

El resto es irrelevante. Hay una serie de metas que no se van a cumplir, destinos del dinero que tampoco. Lo único cierto es que hasta hoy el préstamo del FMI es repudiable, por i) no respetar el estatuto del FMI; ii) por no respetar la Constitución Nacional Argentina. Dicho de otra manera, violó los requisitos de ambas partes. Luego de la aprobación, todo eso será agua bajo el puente. 

Por lo antedicho el bloque JxC aprobará el acuerdo. Porque salva definitivamente a su líder de un proceso penal. No puedo soslayar que ningún miembro de la oposición, en su momento, pidió la remoción por juicio político del presidente Mauricio Macri o de sus funcionarios Luis Caputo y Nicolás Caputo por abuso de autoridad y malversación de fondos públicos. De la misma manera que la comisión bicameral del HCN no removió al presidente del BCRA Federico Sturzenegger cuando la tasa de interés alcanzó el 80% anual. Son todos cómplices.

Van a aprobar este acuerdo, en lugar de hacer lo correcto, que es repudiarlo.

Recapitulemos

Una de las tantas verdades que señala el texto es que el dinero que entregó el FMI al gobierno argentino se utilizó para financiar la salida de dinero de privados. Lo denomina “exteriorización de activos”.

Durante los dos primeros años, el gobierno de Mauricio Macri expandió el gasto público (planes sociales; gastos corrientes; cubrió deudas dejadas por el gobierno anterior, algunas de las cuales debería haber repudiado; servicio de deuda). El objetivo era ganar las elecciones de mitad de término, lo que logró. Son dos años con aumento de consumo y caída de desocupación, lo que explicaría el resultado electoral del 2017.

Financió este carnaval con emisión (inflación 50% anual) y con deuda pública. Parte en dólares a altas tasas, parte en pesos. El inversor trajo dólares, la pasó a pesos, compró deuda pública en pesos (recuerden: 80% anual), y luego la pasó a dólares. 80% de tasa – 50% de inflación = tasa real en dólares de 30%.

Luego de ganar las elecciones de mitad de término y de obtener la aprobación del presupuesto 2018, el 28 de diciembre de 2017 el Jefe de Gabinete Marcos Peña le anuncia a la población que desconocerían el flamante presupuesto y que el BCRA bajaría las tasas. Ni me molesto en enumerar todo lo que está mal. Nuevamente, los diputados podrían haber pedido juicio político contra Peña. Se fueron de vacaciones.

Quienes no tomaron vacaciones fueron los inversores. Entendieron que la bicicleta del BCRA se había acabado y se llevaron o pretendieron llevarse los dólares traídos desde 2015 hasta 2017. Problema: la plata no estaba. Conclusión: salieron desesperados a buscarla. 

El FMI no le prestó el dinero a la Argentina, simplemente salvó a los fondos de inversión.

Verdades y mentiras del informe

El gobierno sostiene que el préstamo contraído es violatorio del estatuto del FMI. Cierto. Razón suficiente para repudiarlo. Que se usó para financiar la salida de capitales. Cierto [1]. 

Veamos qué promete Guzmán.

Página 14 del pdf.

Para el corriente año, que la inflación no será menor al 38%, que la cuenta corriente será equilibrada y que habrá crecimiento económico.

A continuación, en el texto general sostiene que las tasas de interés domésticas en pesos serán positivas para el depositante de plazos fijos y que habrá créditos a las pymes para que crezcan y den trabajo; mejoras de salarios reales y caída del desempleo.

Todo muy lindo, pero los objetivos se cancelan entre sí. Es como que yo dijera que voy a bajar de peso y que ahora iré a la confitería a comprar una torta de chocolate, dulce de leche y merengue para comerla yo sola. Los dos objetivos no son compatibles. O la torta o bajar de peso.

Cuando el ministro sostiene que la inflación no será menor al 38% y que la tasa pasiva de plazo fijo será no menor a la inflación (lo denomina tasa positiva en términos reales), nos dice que la tasa pasiva, la que se paga al señor que pone dinero en plazo fijo en el banco, será como mínimo 38,5% [2]. 

Para que eso suceda la tasa del banco a BCRA al banco deberá ser superior a la que el banco le paga al que tiene plazos fijos (¿40%?, ¿42%? ¿50%?). Con esas tasas de interés es imposible que la economía crezca.

Sostiene, asimismo, que aumentarán los salarios reales [3]. En ese caso, deberían aumentar no menos del 38%, de acuerdo con sus números. Pero en otra sección afirma que han acordado con las grandes empresas un aumento del 2% mensual (“precios cuidados” [3.b.]) con el objeto de que ese índice se tome para las negociaciones colectivas salariales con los sindicatos. Aumentos del 2% mensual acumulado llegan a 27% anual. Por lo tanto, lo que el simpático ministro no dice es que los convenios colectivos de trabajo serán del 27% anual, 11 puntos menos que el piso de inflación.

Varias veces afirma que la inflación es multicausal [4]. Es una excusa para decir: “hay inflación por tantas cosas… ¿qué querés que haga?”. A continuación asegura que continuarán con el freno a la cotización del dólar oficial porque ¡produce inflación! [5] (¿no era multicausal?). Según la Constitución reformada en 1994, la inflación es responsabilidad del Congreso: esto significa que es monocausada; al menos lo era para los Convencionales Constituyentes, incluida Cristina Fernández, vicepresidente de dicha Asamblea.

Luego se pisa el poncho cuando afirma que en los dos últimos años emitió para financiar al Tesoro [6] y que va a tratar de hacerlo pero no mucho.

Por último, una perla. Sostiene que va a reemplazar el endeudamiento externo por uno interno (bien) y que será a través del BCRA con altas tasas de interés [7].

Dicho de otra manera, sigue la gigantesca bola de nieve que es la deuda del BCRA. Imagino la desesperación de Ricardo Inti Alpert. Acá su hilo sobre el tema: HILO.

Fuente: Ricardo Inti Alpert.

Ahora bien, si la cotización del dólar oficial aumenta con la inflación, y las tasas en pesos que pagará el BCRA serán positivas entonces…sí, acertó, las tasas en dólares serán positivas con seguro de cambio. La tablita.

Por último, otros objetivos contradictorios. Afirma que estimularán las exportaciones [8] pero seguirán retrasando el tipo de cambio oficial [9] (nuevamente: ¿bajar de peso o comer torta de merengue?). Acá está lo más gracioso: no quieren aumentar la valuación oficial de la divisa porque … presten atención… ¡provoca inflación! Parece que no se dio cuenta que en 2021 devaluaron un 26% y la inflación fue del 50%. Pareciera que la relación causa-efecto está perdida con estos muchachos.

No mencionan que el dólar atrasado estimula las importaciones (así es que compramos jabón de tocador a Brasil), por lo tanto tenemos un superávit comercial muy inferior al que podríamos tener, o que Brasil devaluó y podría seguir haciéndolo, lo que nos perjudica.

Garantizan a la banca que continuará el proceso de reemplazo de efectivo por pago electrónico y que se combatirá el uso de criptomonedas.

Ah, y, oh sorpresa, van a aumentar los impuestos.

Lo que pueden estar todos seguros es que los diputados de todos los partidos concordarán sacarle la soga al cuello a Christine Lagarde (que todavía tiene procesos penales abiertos en Francia por malversación de fondos públicos) y a Macri (que ídem, pero no en Francia).

Otra cosa que no hizo el gobierno fue auditar los desembolsos. ¿Cuánto del dinero que salió del FMI llegó a la Argentina? ¿Estamos seguros que ninguna parte se perdió en el camino? Dadas las numerosas irregularidades de procedimiento de ambas partes, tanto el FMI como nosotros merecemos dicha auditoría detallada.

Lo que más me llamó la atención de estas 137 páginas es el profundo sesgo anticampo. Pero es para otro día. Cuesta entender tanta saña.

La Argentina podría ser una tierra de prosperidad, lástima ellos.

Divididos, «¿Qué ves?»

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas:

[1] El Presidente le pidió al BCRA un informe sobre quién se había llevado ese dinero. El BCRA hace el informe, ¡sobre ese punto no contesta! Mercado de cambios, deuda y formación de activos externos, 2015-2019, [http://www.bcra.gov.ar/Pdfs/PublicacionesEstadisticas/Informe-Mercado-cambios-deuda-%20formacion-de-activos%20externo-%202015-2019.pdf ].

[2] Todas las citas del texto oficial se hacen con la paginación del siguiente pdf dado por El Cronista: https://www.cronista.com/economia-politica/la-letra-chica-del-acuerdo-el-fmi-este-es-el-texto-completo-del-proyecto-de-ley/ 

Página 21

“A tal fin, el BCRA procurará mantener una tasa de política monetaria efectiva positiva en términos reales, conservando coherencia con una trayectoria sostenible para los títulos del BCRA … Esto ayudará a garantizar que, en adelante, las tasas de interés de los depósitos bancarios a plazo sigan siendo positivas en términos reales, a fin de apoyar la demanda de depósitos en pesos y el desarrollo de un mercado interno de títulos públicos”. 

“el BCRA elevó la tasa de política monetaria efectiva anual (aplicable a Letras de Liquidez a 28 días) en 285 puntos básicos y simplificó los instrumentos de esterilización para mejorar la transmisión y la emisión de señales de la política monetaria”.

En resumen: bicicleta.

Pág. 84

“…una reducción gradual del financiamiento del BANCO CENTRAL DE LA REPÚBLICA ARGENTINA (BCRA) al Tesoro Nacional, el mantenimiento de tasas de interés de política monetaria positivas en términos reales que fortalezcan la demanda de activos locales y la reconstrucción del mercado de deuda en moneda doméstica…”.

Luego sostiene lo contrario, que va a reducir la bicicleta, pág. 114:

“En el mismo sentido, una reducción del peso relativo de los pasivos no monetarios del BCRA, fundamentalmente Leliq y pases pasivos, a niveles sostenibles, es una pieza clave dentro del paquete de estabilización macroeconómica. Si bien el BCRA, con motivo de las necesidades de gasto extraordinarias, consecuencia de la pandemia, asistió financieramente al Tesoro Nacional, con posterioridad comenzó un proceso de esterilización de los excedentes monetarios que permitió una convergencia de los agregados monetarios en torno a valores promedio históricos. En contrapartida, los pasivos no remunerados del BCRA crecieron en términos reales. Con la aplicación del presente esquema de políticas, fundamentalmente la consolidación fiscal y la reducción del financiamiento al Tesoro Nacional por parte del BCRA, se espera que ceda la presión sobre los pasivos del BCRA, al tiempo que el sostenido crecimiento económico y la mejor remuneración de los activos en pesos consoliden un aumento en la demanda de dinero, históricamente determinada por motivos transaccionales.

En este marco general, se analizarán medidas orientadas a mejorar las relaciones entre el BCRA y el Tesoro Nacional buscando estabilizar las fuentes de financiamiento y los mecanismos de control y diseñar una estrategia por la cual el BCRA opere con mayor fluidez en el mercado de títulos públicos, como es usual en gran parte de los países del mundo, de manera de reducir el costo cuasi fiscal de la política monetaria”. La negrita me pertenece.

[3] Pág. 4:

“…con el fin de lograr un aumento del poder del salario real de los trabajadores y las trabajadoras que redunde en un fortalecimiento de la demanda agregada…”.

Pág. 15:

“A corto plazo, se espera que la recuperación del empleo y los salarios favorezcan la recaudación,…”.

[3.b.] Pág. 21:

“21. Esto se complementó con políticas voluntarias de precios e ingresos. A mediados de enero se suscribió un nuevo acuerdo voluntario de precios (Precios Cuidados) con más de 150 participantes del sector privado, para que los aumentos de precios no superen el 2% mensual en 1.300 productos representativos de la canasta de consumo masivo. Estos acuerdos de precios serán un complemento importante de los acuerdos salariales vigentes para apoyar el crecimiento de los salarios reales”. La negrita me pertenece.

[4] Pág. 4:

“…la inflación es un fenómeno multicausal,…”.

Pág. 21:

“19. La alta y persistente inflación en Argentina es un problema multicausal, cuya solución requerirá una estrategia de varios frentes…”.

Pág. 103:

“Considerando que la inflación en Argentina es elevada y persistente, el Gobierno Nacional entiende que este fenómeno es multicausal …”.

[5] Pág. 4:

“ sin que ello conlleve presiones adicionales en el tipo de cambio y, por lo tanto, en la inflación”. 

[6] Pág. 4:

“Desde la óptica monetaria y financiera, se programa una reducción gradual y persistente de la asistencia monetaria que realiza el BANCO CENTRAL DE LA REPÚBLICA ARGENTINA al Tesoro Nacional,…”.

Pág. 19:

“17. Nuestra política de financiamiento doméstica permanece enfocada en fortalecer el mercado de títulos públicos en pesos. Nuestro plan apunta a un financiamiento neto del sector privado en pesos al Tesoro de alrededor de 2% del PIB por año durante 2022-24”.

[7] Pág. 20:

“permitirá moderar el financiamiento monetario del déficit…Este apoyo oficial, combinado con un financiamiento neto del FMI al Tesoro en 2022 (0,7% del PIB), ayudará a reducir el financiamiento del presupuesto por parte del banco central a 1% del PIB en 2022…”.

Pág. 108:

“En este sentido, la política de tasas de interés interacciona con la política de reducción del déficit fiscal y en el mediano plazo permitirá reducir sustancialmente la creación monetaria por financiamiento al Tesoro Nacional…”.

Básicamente, que no van a emitir para darle dinero al Tesoro sino que van a emitir deuda en pesos para cubrir el déficit.

[8] Pág. 4:

“…lograr un crecimiento sostenido de las exportaciones que fortalezca las reservas internacionales…”.

Pág. 12:

“El superávit comercial alcanzó un máximo casi histórico de USD15000 millones. El fuerte crecimiento del volumen de exportaciones, en particular en el sector manufacturero industrial, sumado a términos de intercambio favorables, compensaron de sobra el notable dinamismo de las importaciones derivado de la recuperación de la inversión y el consumo privado”. El ministro sostiene que el aumento de las importaciones se debe al aumento de inversiones (?) y no a que los dólares los venden a mitad de precio. Curioso.

Pág. 13:

“Fortalecer nuestra balanza de pagos mediante políticas que respalden la acumulación de reservas, los superávits comerciales, incentive las exportaciones netas, y…”.

Pág. 14:

“…reformas orientadas a impulsar las exportaciones en sectores clave…”.

Pág. 24:

“Expansión de las exportaciones a través de incentivos para sectores estratégicos…hidrocarburos, minería, agroindustria, e industria automotor”. El agro no es un sector estratégico de la Argentina.

Pág. 91:

“…el crecimiento de las exportaciones permita sostener el balance comercial positivo de las cuentas externas a lo largo del tiempo. Se espera que el saldo positivo se mantenga en los años siguientes,…”.

Pág. 92:

“Fortalecer nuestra balanza de pagos mediante políticas que respalden la acumulación de reservas, los superávits comerciales, incentive las exportaciones netas, y las entradas de capitales de largo plazo”.

Pág. 104:

No piensan devaluar para estimular las exportaciones: “La experiencia argentina enseña que modificaciones abruptas en los tipos de cambio generan una inmediata reacción de la inflación y en muchos casos reflejos recesivos en la producción mientras que la contribución a través de una mejora en las exportaciones tiende a demorarse o, incluso, no manifestarse…”.

Pág. 115:

“Estas políticas tratarán de potenciar: el crecimiento y la diversificación de las exportaciones;…”.

“Existen numerosos sectores —energía, economía del conocimiento, hidrocarburos, minería, agroindustria, industria automotriz, sectores que colaboren a la transición energética, y otros sectores transables— con potencial de generar un cambio estructural en la macroeconomía argentina. Fomentar las exportaciones en tales sectores es un objetivo prioritario para este gobierno,…”.

“Generar políticas que fomenten las exportaciones, no solo sirve al objetivo de generación de valor y divisas, sino que, además, las ventas externas permiten mejorar el poder adquisitivo de la población y, con ello, disminuir los niveles de pobreza, por dos mecanismos. En primer lugar, al aportar divisas genuinas al país e incrementar la capacidad de crecimiento de la economía, se permite una mayor generación de puestos de trabajo, menor desempleo y, por ende, mayores ingresos reales de las familias. En segundo orden, las ganancias de productividad y los aprendizajes derivados de la exportación redundan en la suba de salarios en las firmas exportadoras: los salarios en las empresas exportadoras son, aproximadamente, 29% mayores a los de las no exportadoras (controlando por variables como el tamaño de la firma y el sector)”. ¿¿¿Entonces??? ¿Por qué castigan al campo?

[9] Pág. 22:

“Con este fin, y para ayudar a alcanzar las metas de acumulación de reservas en el marco del programa (criterio de ejecución cuantitativo), la tasa de ajuste del tipo de cambio oficial mantendrá el tipo de cambio real efectivo en 2022…”.

 

Artículo publicado originalmente el 05/03/2022 en Restaurar.org, http://restaurarg.blogspot.com/2022/03/cuando-la-mentira-es-la-verdad.html

LOS DÓLARES VIENEN Y SE VAN

Iris Speroni*

El discurso oficial de las autoridades monetarias y económicas es que hay que tener dólares “baratos” para controlar el precio de los productos domésticos, en particular de alimentos.

Desde niños escuchamos a políticos decir que Argentina no tiene dólares, que los necesita dólares “para financiar el crecimiento”.

Es un discurso, más o menos instalado por Prebisch y la CEPAL a partir de 1955 y es la ideología predominante en las universidades nacionales y algunas privadas. Es el discurso económico y financiero de los gobiernos radicales, ahora extendido a los kirchneristas.

Su momento de esplendor fue el Plan Primavera con Machinea al frente del BCRA, con los resultados conocidos.

Los funcionarios hablan de los dólares, obtenidos por los particulares al vender sus productos al exterior, como si les pertenecieran y como si tuvieran la facultad de decidir a quién sí y a quién no se los dan [1].

El BCRA se queda con los dólares de quienes producen bienes exportables, los pagan a mitad de precio y los venden (a mitad de precio) a los amigos [2].

Revisemos informes del BCRA [3].

Dólares, Crecimiento y La Mesa de los Argentinos

Las autoridades sostienen que: a) faltan divisas, b) dicha escasez es la razón que limita el crecimiento [4].

Ejemplo: informe BCRA “Mercado de cambios, deuda y formación de activos externos, 2015-2019”, página 4 [3.3.]:

“En una economía que históricamente encuentra en la restricción externa (esto es, la insuficiencia crónica de divisas) uno de los principales límites al desarrollo, los más de USD 86 mil millones que se fugaron en concepto de formación de activos externos tienen su equivalencia en términos de menor crecimiento e inversión, mayor desempleo y deterioro en la distribución del ingreso”. [La negrita me pertenece].

Según las autoridades (de este gobierno y del anterior, del anterior del anterior y los previos) necesitamos dólares “para crecer”, por lo cual el gobierno o se apoderan de los dólares de los particulares o bien endeudan al país para que “haya dólares”. En realidad, quieren tener dólares en el BCRA para poder manipular el tipo de cambio a la baja (poner al dólar artificialmente bajo). Esto se logra si la oferta es mayor que la demanda. Los gobiernos del siglo XXI lo han intentado con todos los mecanismos posibles. Ejemplo: restringir la compra de dólares (para que caiga la demanda), obligar a vender dólares, o endeudarnos con el exterior para “quemar” los dólares en el mercado (lo hizo Cristina Fernández al final de su segundo mandato y Mauricio Macri). De hecho la política cambiaria es una sola desde el segundo gobierno de C. Fernández a hoy. No por coincidencia sino por causalidad, la economía argentina no crece desde que se ha convertido en política de estado mantener el dólar artificialmente bajo.

El discurso oficial de las autoridades monetarias y económicas es que hay que tener dólares “baratos” para controlar el precio de los productos domésticos, en particular de alimentos y así “controlar” la inflación. Es mentira. ¿Por qué mienten? ¿Por qué quieren un dólar barato si no es para controlar el precio del pan y del kilo de pollo? Fácil: para comprar ellos dólares baratos. El costo de la canasta familiar es sólo una pantalla. ¿Quiénes son ellos? Los gobernantes, porque el canuto lo tienen en dólares o euros, y los amigos del poder, para comprar dólares baratos y sacarlos de la circulación de la economía argentina. Comprar dólares a mitad de precio es el mejor negocio que hay hoy en Argentina, que hace irrelevante cualquier otra actividad económica. Mejor que traficar drogas, personas o armas.

¿Por qué no es cierto que se controle el precio de los bienes si uno controla el dólar? En 2021 el tipo de cambio creció 26% y el precio de los bienes 50%. Porque los productos aumentan por la emisión (que fue del 50%) y no por el precio de un bien en particular (las divisas). Si los gobernantes realmente quisieran que se abarate el precio de los alimentos eliminarían todos los impuestos sobre su comercialización y flete.

Balanza comercial

En el año 2021 según el BCRA se exportaron bienes por US$ 76.423 millones y se importaron por US$ 61.141 millones, lo que nos dejó un superávit de US$ 15.282 millones [5]. De acuerdo con el relato de los políticos deberíamos haber crecido como galleta en la leche.

A esto hay que sumarle las inversiones directas por US$ 777 millones netos.

¿Qué hizo el BCRA con estos US$ 16.059 millones?

Efectos de la manipulación del tipo de cambio: a quienes producen bienes exportables el BCRA le paga la mitad de su valor (se queda con la otra mitad). La consecuencia es el estancamiento de las exportaciones. O dicho de otra manera, se exportaría mucho más con un dólar no manipulado, lo cual redundaría en más trabajo y prosperidad para la población. De la misma forma, como los productos se pagan a mitad de precio, se desestimula la fabricación nacional (porque en los hechos, el gobierno subsidia las importaciones) o lo que es lo mismo, convierte en no competitivos a la producción local y vuelve artificialmente competitivos a los extranjeros [6].

¿Dónde está el dinero?

Ahora bien, hasta aquí tenemos una disponibilidad de US$ 16.059 millones. ¿Qué hizo el BCRA con ese dinero?

Veamos:

1) En pago de servicios se fueron US$ 4.568 millones.

Fuente BCRA. En millones de dólares.

2) Intereses sobre compraventa de bienes US$ 3.160 millones.

3) Las líneas de crédito y préstamos financieros nos costaron US$ 5.394 millones.

Recibimos US$ 2.686 millones y pagamos US$ 8.082 millones.

En millones de dólares. Fuente: BCRA.

Los años 2013 (Cristina Fernández) y 2017 (Mauricio Macri) tuvieron el déficit automotriz más pronunciado, resultado de un precio bajo del dólar combinado con un repunte del salario real. En estos 18 años (2003-2021) el sector nos costó US$ 75.293 millones en divisas. Todo el país trabaja y exporta para darle dinero a las terminales automotrices extranjeras [8].

Las importaciones responden al tipo de cambio artificialmente bajo. Llevaron a Cristina Fernández al final de su segundo mandato y Mauricio Macri a hacer malabarismos (CF: deuda con China, venta de dólares futuros; MM: deuda con privados primero, con FMI después).

Si queremos terminar este botín de miles de millones de dólares que disfrutan unos pocos, debemos acabar con la manipulación del tipo de cambio, las LELIQs/LEBACs y la deuda eterna. Las tres responsabilidad del Congreso (y no del Poder Ejecutivo) según la Constitución de 1994.

Si queremos triplicar o quintuplicar las exportaciones debemos dejar que la gente trabaje, esto es, que reciba sus dólares y que haga con ellos lo que quiera, que no matemos a nadie con los impuestos y, en resumen, que dejemos vivir.

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

Notas

[1] Mis dólares

https://restaurarg.blogspot.com/2020/09/mis-dolares.html

[2] Zanahoria

https://restaurarg.blogspot.com/2021/06/zanahoria.html

El tamaño del botín.

https://restaurarg.blogspot.com/2021/02/el-tamano-del-botin.html

[3] Informes del BCRA

3.1. Estadísticas estandarizadas sobre la Evolución del Mercado de Cambios

http://www.bcra.gov.ar/PublicacionesEstadisticas/Estad%C3%ADsticas_Mercado_de_cambios.asp 

Es una planilla de cálculo con información desde el 2003 a hoy, de la cual se pueden sacar informaciones muy jugosas. Para facilitar la lectura, tomé uno de los cuadros y los transporté (puse las columnas como filas y viceversa). El que tenga dudas de los números puede ver el original.

3.2. Informe de la Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario

http://www.bcra.gob.ar/PublicacionesEstadisticas/Mercado_de_cambios.asp

Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario – Diciembre 2021

http://www.bcra.gov.ar/Pdfs/PublicacionesEstadisticas/Informe_Diciembre_2021.pdf

3.3. Informe de Mercado de Cambios, Deuda y Formación de Activos Externos 2015 – 2019

Se trata de un trabajo sobre el comportamiento del BCRA durante el gobierno de Macri, a solicitud del presidente Fernández

http://www.bcra.gov.ar/PublicacionesEstadisticas/Informe-mercado-cambios-deuda-formacion-activos-externos-2015-2019.asp

http://www.bcra.gov.ar/Pdfs/PublicacionesEstadisticas/Informe-Mercado-cambios-deuda-%20formacion-de-activos%20externo-%202015-2019.pdf

[4] No estoy de acuerdo. No faltan dólares y su escasez, si así fuera, no es la razón de nuestro estancamiento económico.

[5] Cuando el INDEC publique las exportaciones de 2021, revisaremos estos números pero hay que tener en cuenta que existe una diferencia entre el día en que se produce la transacción de comercio exterior y el día que se liquida financieramente, por lo que puede haber (pequeñas) diferencias.

[6] Esta intervención estatal en el valor de la divisa explica que Argentina importe productos tan sencillos como jabón de tocador, dentífrico o shampoo de Brasil, para beneficio de J&J, Unilever o P&G.

[7] Doy un ejemplo ficticio: un importador compra un producto que vale un millón de dólares y lo hace facturar por tres millones de dólares. Le compra tres millones al BCRA, a un cambio de $ 111/US$, que equivalen a US$ 1,5 MM. Al final de la cuenta se queda con el producto (US$ 1 MM), más US$ 2 MM depositados en el exterior. Tiene activos por US$ 3 MM que pagó US$ 1,5 MM: ganó US$ 1,5 MM financiados por todos nosotros.

[8] Sería interesante aislar cuántas divisas les dimos a los brasileños. Porque Toyota exporta a México y resulta que todo el dinero lo usamos para importar VW brasileños malos y caros.

Artículo publicado originalmente el 26/02/2022 en Restaurar.org, https://restaurarg.blogspot.com/2022/02/los-dolares-vienen-y-se-van.html