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ME VUELVO A ILUSIONAR

Iris Speroni*

Pueblo 1, Gobernantes 0.

 Quiero ganar la tercera

Quiero ser campeón mundial

Fernando Romero

 

Escribo esto el día anterior a la final de la Copa Mundial de Fútbol. Así que, obviamente, no sé cuál será el resultado.

Cualquiera sea, no invalida las conclusiones que podemos obtener de esta maravillosa aventura colectiva que hemos vivido millones de personas estas últimas semanas.

Sobre geopolítica, soft power en Relaciones Exteriores, el destino manifiesto del Gran Pueblo Argentino (¡Salud!), y sobre nuestro futuro de grandeza, que está al alcance de la mano. Arrancamos.

La canción elegida como preferida por el público, creada por Fernando Romero e interpretada por La Mosca, tiene mucha tela para cortar. No voy a analizar sus méritos artísticos, porque me excede. Me referiré al contenido.

Es un compendio de los amores del pueblo, en feliz desorden.

    • Enumera los fracasos y el dolor que produjeron (“Las finales que perdimos/Cuantos años la lloré”). Inmediatamente postula que se empieza de nuevo y que permite renacer la esperanza (“Pero eso se terminó/Porque en el Maracaná/La final con los brazucas/La volvió a ganar papá). Sobreponerse a los fracasos es un signo de adultez.
    • Recuerda nuestra mayor gesta heroica reciente, Malvinas. Nunca agradeceremos lo suficiente a La Mosca por destruir de un plumazo 40 años de desmalvinización intentada de arriba hacia abajo. Con una simple canción demuestra una vieja tesis mía de que a los pueblos no se los doblega fácilmente. Podrán callar, pero no necesariamente cambiar de parecer (“De los pibes de Malvinas/Que jamás olvidaré”).
    • Rinde homenaje al héroe fallecido.
    • Ya no es el ídolo A en competencia con el ídolo B, sino la validación (ficcional) del consagrado quien entrega el testimonio al nuevo demiurgo, en una malabarismo conceptual excelso (“Don Diego y La Tota/Alentándolo a Lionel”). Reformula lo que creo es uno de los puntos más valiosos de nuestra Constitución, el contrato intergeneracional: “para nosotros, para nuestra posteridad”. Lionel releva a El Diego en este juego de postas sublime. Traspaso que se repetirá ad infinitum cuando cuadre. Así nace la inmortalidad de las naciones.
    • Valora los logros anteriores. Esto es fundamental para todo proyecto de nación. Tener orgullo de lo propio. Autoconvencerse que lo que uno se propone lo va a lograr por la simple razón que por más difícil que sea el objetivo, ya se hizo con antelación (“Quiero ganar la tercera”, ergo, ya gané dos, ya lo hice, sé que puedo hacerlo).

Como programa político o propaganda de programa político, la canción es perfecta. Saber que niños de 4 ó 5 años la cantan, es escupirle en la cara a todos los políticos desde 1983 a hoy que hicieron lo posible e imposible para esconder el orgullo de la Gesta de Malvinas. No puedo explicarles lo que disfruto.

Hagamos esta cuenta: El 65% de la población argentina tiene menos de 40 años. Esto quiere decir que 30 millones de personas nacieron luego de la Guerra del Atlántico Sur, incluidos todos los jugadores del plantel. Sin embargo, a pesar del dinero invertido por el Estado argentino, el desinterés manifiesto de Alfonsín, Menem, De la Rúa, Duhalde, Kirchner, Cristina Fernández, Macri y Alberto Fernández, los oropeles dados a Bauer por su acción de propaganda y los té con celebrities de cabotaje en la embajada, la mayoría de la población grita a los cuatro vientos, frente a las cámaras de TV internacionales, que no se olvidó ni nunca se va a olvidar. Esto para mí es: Pueblo 1, Gobernantes 0.

Destino Manifiesto

En junio de 2019 escribí para La Prensa «Nuestra verdadera tragedia fue haber cancelado en 1982 el proyecto de Nación». Sostuve (y sostengo) que Argentina tiene un proyecto de Nación. Orgullosa, un poco canchera, con deseos de grandeza y ser potencia mundial, levemente fanfarrona y autosuficiente, convencida de sus virtudes y su destino manifiesto.

A partir de 1983 sufrimos gobiernos de intervención con mandatos claros como debilitar hasta la nulidad las FFAA, desindustrializarnos, desmoralizar al pueblo mediante un conjunto de operaciones:

    • esparcir tristeza (con la excepción de Menem todos los gobernantes que tuvimos fueron tristes, mala onda, depresivos o gruñones, perdedores con justificaciones permanentes de los errores que siempre ponían en cabeza de otras personas),
    • tratar de convencernos de que somos tristes, depresivos, malas personas y perdedores. Lo describió con maestría Gatin. Al servicio de este programa pusieron a trabajar a las agencias estatales (como TV Pública, Télam e INCAA) y subcontrataron a todos los privados,
    • ocultar los logros por más pequeños que sean (ej. ser campeones mundiales de toda disciplina [1] que no sea fútbol),
    • disminuir en lo posible la población del país,
    • disuadir la inversión privada,
    • acallar las tradiciones,
    • dejar caer en la inoperancia y obsolescencia la infraestructura de transporte del país,
    • buscar relegarnos a la insignificancia.

Quienes estamos en la vereda opuesta a los interventores, siempre denunciamos y abjuramos del proyecto oficial. En Restaurar numerosos columnistas han expuesto en ese sentido y recomendado las estrategias para a) preservar nuestra identidad y defender su existencia en tiempos hostiles, b) renacer de las cenizas y recuperar el proyecto nacional abandonado.

Eso no quiere decir que cada tanto no se flaquee. Las dudas abruman. Que el interventor es poderoso y maneja los resortes del poder, que le lavan la cabeza a los más jóvenes, que se pierde el sentido nacional, que nadie recuerda el proyecto, que no se puede ir a caballo a ver a la Virgen de Luján, que el Washington Post nos difama y otros lamentos.

Estas últimas semanas dieron por tierra todo esto. El pueblo ha demostrado que conserva sus capacidades intactas: i) alegría de vivir, ii) fe en sí mismo, iii) compañerismo y comunión en un presente y futuro común, iv) confianza en las propias virtudes, v) orgullo por ser argentino, vi) creatividad, vi) amor propio, vii) pasión, viii) memoria, ix) agradecimiento (es de buen nacido ser agradecido), x) hambre de gloria. Somos ganadores, no perdedores.

Repito: que niños chiquitos canten lo que no es otra cosa que la promesa de no olvidar Malvinas, me llena el corazón de alegría.

Soft Power y Relaciones Exteriores

Como dijo el presidente de China hace un par de meses atrás, Argentina es un país importante en el concierto mundial. No lo van a escuchar de ningún político, quienes lloran desgracias y autojustifican por qué nos hacen pasar hambre (mercados que se derrumban —Cristina Fernández—, “pasaron cosas” —Mauricio Macri—, la guerra de Ucrania y el Covid —Alberto Fernández—).

Este mundial en particular nos enfrentó a cómo nos ven en diversas partes del mundo.

No es casual la campaña internacional contra nosotros. A las potencias no les gustan los que se desmarcan. Odian los insumisos. En ese contexto debemos entender el libelo que publicó The Washington Post.

Sacarnos de encima la mirada de los arrastrados locales (la mayoría), que siempre ven grandiosidades en los países desarrollados de Occidente se ha vuelto un objetivo relevante. Occidente (con excepción de EEUU) no nos compra nada y nos vende poco. Nuestros socios comerciales son otros. Quienes nos apoyan disfrutan una decidida senda de crecimiento, como quienes integran los BRICS. Nada de lo que sucede es casual. Es el lugar que Argentina tuvo desde que mandamos al Almirante Bouchard con patente de corso a hacer lío por el mundo. Cuando Perón pensó y co-organizó los No Alineados, cuando lideramos la Conferencia de Bucarest en 1974, cuando nos enfrentamos a una potencia mundial en 1982. ¿Por qué no nos van a ver con admiración gente que sufrió duramente el yugo inglés? ¿Por qué no van a admirar a nuestros atletas que se destacan en numerosos deportes? Para ellos somos un ejemplo de coraje y éxito frente a la adversidad.

Estas semanas son un pasaporte para iniciar una era de excelentes negocios. El softpower está de nuestro lado. Tenemos que aprender a sacar provecho de ésta virtud.

Objetivo de mínima: poner el país de pie. De máxima: recomponer las Provincias Unidas del Río de la Plata, Guinea Ecuatorial (África) incluida.

Un rayito de esperanza

Cuando uno ve cómo se recuperó Rusia en sólo 20 años luego de estar al borde de la disolución con la glasnost, vemos que podemos dar vuelta la taba en poco tiempo y darle a nuestro pueblo una era de prosperidad, alegría y esperanza.

Sólo tenemos que echar a estos amargados, tristes, depresivos, chantas, inútiles y garcas que nos gobiernan.

El futuro es todo nuestro.

 

Otro sí digo:

Temas personales: Tengo 59 años. Vi a Argentina ganar en fútbol en 1978 y 1986 y dos medallas de oro JJOO. Me di otros lujos. Ver ganar la Copa Davis, que se había deslizado de los dedos de Vilas, Clerc, Jaite. Cecilia Rognoni y Luciana Aymar elegidas las mejores jugadoras del mundo (hockey sobre césped) numerosas veces, la selección femenina campeona mundial, la masculina oro olímpico. Basket, medalla oro JJOO y campeones mundiales. Numerosos premios en el Dákar, Pechito López campeón mundial. Oros JJOO en ciclismo, vela, artes marciales, en fin, seguro me olvido de varios. Vi jugar al rugby a Hugo Porta, Santiago Gómez Cora, Marcos Moneta (ahora mejor jugador del mundo). Cracks como Adolfo Cambiasso, de quien Maradona dijo “Me gustaría ser el Cambiasso del fútbol”. Antes de irme de este mundo quisiera ver a Argentina campeón mundial de rugby, en JJOO y en XV. Con eso, cartón lleno.

Como siempre dice @Lady_Astor, no elegí nacer acá, sólo tengo el privilegio.

Bajo la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia. Que hoy esté de nuestro lado.

Una abrazo a todos.

 

Horas después…

Nota

[1] Nadie sabe que los varones de hóckey sobre patines fueron campeones mundiales seis veces, al igual que la selección femenina. ¿Quién sabe que Marcos Moneta fue elegido el mejor jugador del mundo en rugby seven este año? ¿Cuántos atletas no son cubiertos por la prensa cuando van a defender la celeste y blanca, a veces con enormes dificultades?

 

Notas relacionadas

«Nuestra verdadera tragedia fue haber cancelado en 1982 el proyecto de Nación»

http://iris-speroni.blogspot.com/2019/06/nuestra-tragedia-cancelar-en-1982.html

El mito fundacional

http://restaurarg.blogspot.com/2018/08/el-mito-fundacional.html

Preppers II

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Argentina necesita un submarino nuclear

http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/argentina-necesita-un-submarino-nuclear.html

Maximalismo sanmartiniano ou la mort

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Una agenda propia para el desierto argentino

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Sobran argentinos, falta la argentinidad

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Convicciones

http://restaurarg.blogspot.com/2020/07/convicciones.html

Alineados por lo mediocre

http://restaurarg.blogspot.com/2020/09/alineados-por-lo-mediocre.html

Ayer y hoy

http://restaurarg.blogspot.com/2022/04/ayer-y-hoy.html

 

Artículo publicado el 18/12/2022 en Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2022/12/me-vuelvo-ilusionar.html.

DILEMAS ETICOS EN LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Salam Al Rabadi*

Las complejidades y preguntas sobre el dialecto filosófico asociado con el patrón de valor normativo que debe adoptarse en la política global están aumentando. Esto se basa en el impulso de las repercusiones del reconocimiento de los principios éticos en el nivel de tendencias que giran en torno a:

    1. El desarrollo sostenible y la brecha entre ricos y pobres.
    2. El fenómeno del terrorismo y el choque de civilizaciones.
    3. Los dilemas de la Inteligencia Artificial.
    4. Amenazas a la ciberseguridad.
    5. Desarrollos de la ingeniería genética y la revolución biotécnica.
    6. Tendencia creciente del proteccionismo comercial y el nacionalismo económico.
    7. Los desafíos del tema ambiental y el cambio climático.
    8. Interrogantes relacionados con la pandemia de «Covid-19» a todos los niveles.

Lógicamente, estas tendencias se ensaran en el marco de enfatizar la necesidad de que las relaciones internacionales tengan un elemento normativo. Desafortunadamente, sin embargo, el intento de estudiar los estándares éticos de comportamiento que los países deberían adoptar sigue siendo un tema sin valor en la actualidad. Como los estudios académicos en relaciones internacionales especializados en filosofía y ética son actualmente (hasta cierto punto) raros y decepcionantes o sujetos a patrones intelectuales tradicionales derivados de la teocrática (religiosa) o derivadas de la filosofía literaria.

Además, los estándares de comportamiento político a la luz de las transformaciones económicas y culturales modernas ya no se basan en marcos y principios legales y filosóficos, sino más bien en el principio de que “todo está permitido, a menos que esté clara y directamente prohibido”. El lenguaje del mercado se ha infiltrado en todos los conceptos y estándares de pensamiento. Por lo tanto, queda claro hasta qué punto el sistema de valores actual está lejos de los estándares éticos básicos. Esta realidad plantea el dilema de hasta qué punto es posible establecer una ciencia ética capaz de derivar en un nuevo sistema de valores (político, económico y tecnológico), así como si ese sistema seguirá dependiendo de las siguientes cuestiones:

    • ¿Qué estándares producen valores y si son éticos o no? ¿Cuáles son los organismos encargados de decidir esto: la costumbre social, el derecho, la política, la ciencia o la realidad cultural?
    • ¿En qué patrones racionales se puede confiar para determinar un principio ético al que todos puedan adherirse? ¿Cuáles son los criterios racionales que rigen la relación entre la realidad política y el pensamiento moral?
    • ¿Cuáles son las implicaciones del conocimiento científico en las que se puede confiar para determinar los principios éticos?
    • ¿Son suficientes los códigos de conducta actuales, o debería establecerse un nuevo código ético o constitución global?

Todavía es demasiado pronto para proporcionar respuestas claras a estas preguntas a la luz de la realidad intelectual actual. También, esas preguntas relacionadas con lo que se puede llamar “una ciencia de la metaética”, que pueden dejarnos caer en la trampa del vórtice de la lógica (Epistemología), ya que responder a estas preguntas es mucho más difícil de lo que uno podría imaginar. Ya que nos moverá hasta el punto más lejano que se pueda alcanzar a nivel de determinar la naturaleza del conocimiento y comprender qué es, sin mencionar cómo se utilizan la mente y los sentidos en la investigación crítica sobre ideas políticas, sus temas e hipótesis, para resaltar su lógica y valor objetivo.

Por lo tanto, estas preguntas son específicas del pensamiento político del mundo post-humanidad y lo que contiene de una nueva filosofía científica crítica, no del pensamiento clásico que todavía es rehén de la teología.

En este contexto, si las normas éticas se caracterizan por ser vagas problemáticas de naturaleza filosófica y representan cuestiones complejas, sin embargo, deben reconocerse como de su importancia esencial. Donde, las normas éticas siguen siendo un elemento esencial para comprender y evaluar las políticas y las relaciones entre los estados, las sociedades y los individuos. En consecuencia, existe una necesidad urgente de un sistema político y cultural crítico basado en el estudio del pensamiento ético (que es indispensable en la política global) para encontrar enfoques lógicos a muchos desafíos y dificultades políticas, económicas, culturales, tecnológicas y ambientales (actuales y futuras), incluyendo:

    1. Establecimiento de normas éticas para la evaluación de los avances científicos.
    2. Frente a las repercusiones políticas y culturales altamente complejas asociadas con la revolución de la inteligencia artificial.
    3. Descubrir la relación dialéctica entre el hombre y el medio ambiente.
    4. Determinar los criterios que rigen la relación entre ciencia, política y conocimiento.

En general, independientemente de la metodología de las preguntas críticas que tienen una raíz filosófica, que no se puede responder fácilmente, debe enfatizarse que sigue siendo una necesidad urgente para comprender y enmarcar los problemas modernos en el turbulento mundo de las relaciones internacionales. Donde las cuestiones contemporáneas expresan un nuevo patrón intelectual y lo que se requiere es encontrar una filosofía ética desde una perspectiva puramente humana distinta a la perspectiva tradicional basada en la racionalidad en las relaciones internacionales. No es necesario, por ejemplo, que la literatura racional basada en las dimensiones de seguridad, políticas y económicas conduzca a la paz y la estabilidad mundiales, sino que puede conducir a un aumento de la propagación de las armas nucleares, la contaminación ambiental y el terrorismo. etc.

Lógicamente, la cuestión ética seguirá siendo una fuente de debate filosófico, político, jurídico, económico y cultural a nivel de conceptos, métodos, herramientas e implementación. Así, la metodología del enfoque filosófico ético puede ser capaz de cerrar la brecha entre las diversas ciencias, además de crear visiones multidimensionales que nos permitan formar teorías y definir conceptos y términos, que hoy se han convertido en una riqueza en sí mismas en una era que se basa en el conocimiento. En este contexto, y para comprender, interpretar y abordar el patrón de cambios y desafíos globales, es necesario:

    1. No confiar en las herramientas de la teorización clásica para comprender y enmarcar las variables globales aceleradas.
    2. Tratar el conocimiento como un proceso dinámico sin fin, límites ni tabúes.
    3. Prestar más atención a lo que es cultural en lugar de lo que es puramente económico y político.
    4. Formular un nuevo patrón en el análisis e interpretación de las relaciones internacionales, incluyendo sus complejidades éticas.

A la luz de lo anterior, y a partir del reconocimiento de la realidad de la ausencia de valores normativos y la difusión de corrientes intelectuales basadas en proposiciones del fin o muerte de la moral, se puede decir que el pensamiento político (en la era de la posverdad o la era de la poshumanidad) ya no es capaz de explicarse ni determinar su dirección. Por lo tanto, esto inevitablemente requiere hacer muchas preguntas políticas sobre las prioridades asociadas conmigo:

    • El problema de la contradicción o la inminente colisión entre la tecnología y la humanidad, que inevitablemente está llegando, especialmente a nivel de todos los desarrollos relacionados con la inteligencia artificial y la revolución biotécnica.
    • La dialéctica de los estándares éticos a través de los cuales se pueden establecer prioridades, especialmente a la luz del conflicto entre la ideología de la inevitabilidad del desarrollo tecnológico y las teorías de humanización de las relaciones internacionales.

Ciertamente, la definición de estas prioridades requiere, en primer lugar, una discusión de las razones de las diferencias en los estándares de acuerdo con la naturaleza de la sociedad, la cultura y los actores, sin mencionar las razones por las cuales la ética sigue siendo un campo de conflicto entre la ciencia y la filosofía. Tal vez la primera de estas prioridades radica en la importancia del compromiso de los estudiosos (es decir, la ciencia) con los límites de los hechos materiales, dejando la tarea de establecer y analizar los valores morales a los filósofos y pensadores (es decir, la filosofía y el pensamiento).

 

* Doctor en Filosofía en Ciencia Política y en Relaciones Internacionales. Actualmente preparando una segunda tesis doctoral: The Future of Europe and the Challenges of Demography and Migration, Universidad de Santiago de Compostela, España.

 

Artículo traducido al español por el Equipo de la SAEEG. Prohibida su reproducción. 

©2021-saeeg

 

LA GAUCHADA. LO QUE HOY LLAMARÍAMOS TENER AGALLAS.

Comandante Espuela (Revista Tiempo GNA*)

Formosa, 01 de diciembre de 1947

Visto: Esta causa Nro. 1401 por la presunta violación de los deberes de funcionario público, contra Victoriano Martín, argentino de 26 años de edad y Eusebio Alberto Mena, argentino de 26 años de edad, ambos de estado civil soltero y del personal de Gendarmería Nacional, Escuadrón de Las Lomitas, de la que RESULTA:

Considerando:

Primero: Las constancias de autos acreditan que el 12 de septiembre de 1946, el señor Ramón Zalazar debía cargar en la Estación Juan G. Bazán los veintiséis animales vacunos que figuran en la guía Nro. 269, expedida por el Juzgado de Paz de Las Lomitas. Pero como en el momento de embarcar observa que por error aparecía con marca distinta una de las vacas, puso el hecho en conocimiento de los gendarmes Eusebio Alberto Mena y Victoriano Martín, encargados del control, quienes para evitarle el trastorno que significaba suspender la carga mientras el interesado se trasladaba a Las Lomitas a rectificar el error, le permitieron modificar en la guía la marca de la vaca mencionada, reemplazándola por la marca de la vaca que correspondía embarcar, también de propiedad del cargador, según se prueba en el informe de fs. 32 Vta.

Segundo: Aun cuando contemplada desde el punto de vista estrictamente legal, la actuación de los procesados pueda censurarse, debe tenerse en cuenta para juzgarlos que, al consentir el cambio de marca en la guía obraron espontáneamente, sin esperar ningún beneficio, y animados sólo por el deseo de satisfacer la gauchada que les imploraba Zalazar, para resolver el inconveniente de forma que perjudicaba sus intereses.

Tercero: Que como lo expresan los señores defensores de los procesados, “la gauchada” es una modalidad argentina, fuertemente arraigada a nuestras costumbres y que honra a quien la realiza, porque arriesgando algo, casi siempre, se presta desinteresadamente a un amigo en apuros y a veces hasta un desconocido sin más finalidad que serle útil y sin recibir más recompensa que la satisfacción moral de haber practicado el bien, por amor al bien mismo.

Cuarto: Ajustándose a la cómoda posición que en materia del cumplimiento del deber rige las funciones burocráticas, los acusados Martín y Mena pudieron en la emergencia cruzarse los brazos, asumiendo una actitud impasible y dejarlo a Zalazar que solucionara sus dificultades por sus propios arbitrios. Pero la sensibilidad gaucha, que vive latente en algún lugar del corazón criollo, no les permite a los gendarmes (que al fin de cuentas son paisanos uniformados) adoptar la postura egoísta de “dejar a ese hombre en la estacada…” Comprometiendo su tranquilidad, cambian en la guía sin ningún titubeo la marca de uno de los animales, substituyéndola por otra, y de ese modo allanan el obstáculo que impide cargar la tropa.

Quinto: Que indudablemente, los procesados han cometido un acto no lícito, pasible de sanciones disciplinarias. Pero no se puede afirmar que haya incurrido en delito, desde que no han causado daño a nadie y actuaron bajo la inspiración de hacer solo “una gauchada”. El hecho, aunque aislado, nos revela que seguimos conservando las características raciales, como con tan profunda intuición lo anunciaba Sarmiento en “FACUNDO” hace más de un siglo, al decir: “Si levantáis la solapa del frac, con que el argentino se disfraza, encontraréis al gaucho”. Y la generosidad de la acción que motiva el proceso, está abonada por la opinión de un sabio como Darwin, quien después de recorrer la República Argentina en el año 1813, escribía en su libro “Viaje de un naturalista alrededor del mundo” estas alentadoras palabras: “En todas las circunstancias, el gaucho es un verdadero GENTLEMAN”.

Sexto: De todo lo dicho, surge la evidencia de que los encausados se condujeron honradamente en la inteligencia de hacer un favor que, por su índole, sólo son capaces de prestar los hombres de conciencia y carácter. Lejos de resultar punible, el hecho que origina esta causa encuadra por su naturaleza en las obras de misericordia cristiana y se ajusta a la norma del ideal rotario que manda “Dar de sí, antes que pensar en sí”.

Desde ahí que significaría incurrir en una herejía jurídica, condenar en nombre de la justicia a estos servidores del Estado y también de la sociedad, tan modestos y tan íntegros a la vez, que en las circunstancias anotadas, se comportaron no como dos pusilánimes, y menos como dos delincuentes, sino como dos cumplidos caballeros, y de quienes tienen sin duda mucho que aprender los funcionarios que, por comodidad o falta de criterio, deshumanizan el derecho aferrándose a la letra muerta de las leyes y de las reglamentaciones. Por todo lo expuesto, oídos el Ministerio Fiscal y la Defensa.

RESUELVO:

Absolver de culpa y cargo a los Gendarmes VICTORIANO MARTIN y EUSEBIO ALBERTO MENA y librar nota al señor Jefe de la Agrupación “FORMOSA” de Gendarmería Nacional, acompañando copia de esta resolución y solicitándole que, en mérito a la nobleza revelada por los encausados, contemple la posibilidad de eximirlos de la sanción disciplinaria que pudiera corresponderles. Notifíquese, regístrese y dese cumplimiento a la Ley 11.752 José R. Bergallo, Juez Letrado. Ante mí: Eustaquio Gaztazaga, Escribano Secretario.

Esta sentencia fue confirmada por la Cámara Federal de Paraná. Y el señor Jefe de la Agrupación Formosa de Gendarmería Nacional, Teniente Coronel don Ernesto Pedernera, en una conceptuosa resolución, eximió a los gendarmes procesados de toda sanción disciplinaria.

Del libro “Pilcomayo Abajo”, de José R. Bergallo, ex Juez Letrado de Formosa Época de Territorios Nacionales.

Por el “Cazador de Historias”

 

* Revista independiente para el personal de la GNA, Tiempo GNA, Nº 63, diciembre de 2021.