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EL SISTEMA INMUNOLÓGICO DE LA NACIÓN EN PELIGRO: SITUACIÓN DE LA INTELIGENCIA DE ESTADO EN LA ARGENTINA

Marcelo Javier de los Reyes*

El sistema de Defensa Nacional, los diversos organismos de Seguridad y el Sistema de Inteligencia Nacional son a la Nación como el sistema inmunológico al cuerpo humano.

El sistema inmunológico es una red compleja de células, tejidos y órganos que ayudan al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades. La función de este sistema es defenderlo de agentes patógenos, es decir, de organismos que causan enfermedades, como por ejemplo los virus y las bacterias.

De manera similar, las Fuerzas Armadas, las Fuerzas de Seguridad y la Inteligencia trabajan con el mismo objetivo aunque cada una de estas instituciones tiene su objetivo.

Este diagnóstico será considerado desde dos puntos:

    • Institucional
    • Profesional

La Inteligencia Nacional es definida por la Ley 25.520 como «la actividad consistente en la obtención, reunión, sistematización y análisis de la información específica referida a los hechos, amenazas, riesgos y conflictos que afecten la seguridad exterior e interior de la Nación». La Ley 27.126, promulgada el 3 de marzo de 2015, considera a la Inteligencia Nacional como «la actividad consistente en la obtención, reunión, sistematización y análisis de la información específica referida a los hechos, riesgos y conflictos que afecten la Defensa Nacional y la seguridad interior de la Nación». Solo un cambio sutil pero importante, pues se han eliminado las «amenazas» respecto de la Ley 25.520. Mientras que la «amenaza» es una probabilidad de ocurrencia de un fenómeno potencialmente dañino en un lapso dado, el «riesgo»  sería la combinación de la probabilidad de que se produzca un evento y sus consecuencias negativas.

La Inteligencia es el conocimiento que favorece al decisor en la toma de decisiones, como así también en la reducción de los riesgos. En síntesis, la importancia es que es una herramienta fundamental para la toma de decisiones.

La Inteligencia es una herramienta fundamental para la toma de decisiones.

La actividad de Inteligencia, más precisamente la Inteligencia Estratégica, le permite al gobierno nacional comprender los conflictos regionales e internacionales con el objetivo anticipar las respuestas adecuadas a los mismos.

Del mismo modo, la Inteligencia le permite al gobierno tomar las medidas adecuadas para favorecer la inserción de nuestro país en el escenario internacional, tanto en el ámbito diplomático como económico.

A partir de esto se puede afirmar que, desde lo institucional, los organismos de Inteligencia deben estar en condiciones de dar respuestas a estas demandas.

La Agencia Federal de Inteligencia (AFI) es el organismo superior del Sistema de Inteligencia Nacional y, conforme a la ley, debería dirigir el Sistema de Inteligencia Nacional —que incluye a los demás organismos de Inteligencia del Estado que dependen del Ministerio de Defensa y del Ministerio de Seguridad— a los efectos de contribuir a la toma de decisiones en materia de seguridad exterior e interior de la Nación.

En función de ello pueden determinarse las siguientes anomalías que impiden que la Inteligencia Nacional cumpla con sus objetivos:

    • Los diversos gobiernos nacionales de las últimas décadas han transformado la Inteligencia Nacional en una herramienta para amedrentar jueces, políticos opositores y demás denunciantes a partir de lo que se denominan «carpetazos».
    • Como consecuencia de ello, los gobiernos nacionales (fundamentalmente los kirchneristas y el de Cambiemos) han realizado un uso perverso de la inteligencia interior pero desatendieron la Inteligencia Exterior y la Inteligencia Estratégica al punto que se puede afirmar que estas áreas están prácticamente desactivadas y sin rumbo. La Inteligencia Exterior ha perdido, virtualmente, contacto con los servicios de otros países, lo que implica una seria gravedad desde el punto de vista del intercambio de información y de la capacitación. Las delegaciones del exterior de la Secretaría de Inteligencia / AFI carecieron de rotación de sus delegados durante más de una década y su número ha sido seriamente reducido, al punto que fueron cerradas delegaciones en los principales países de Europa. Como los gobiernos actúan en este sentido con reciprocidad, varios servicios no destinan agentes a sus embajadas en la Argentina y algunos los han retirado reasignándolos en países de la región. La situación se ha visto sumamente agravada con las filtraciones a los medios de las Actas durante la gestión de la «fiscal interventora» Cristina Caamaño.
    • Respecto del tema de la capacitación, el sistema ha perdido el rumbo desde el gobierno de la Alianza (1999-2001), gobierno que el 7 de febrero de 2000 realizó una purga de 1.500 agentes, un hito lamentable que cortó la transferencia de conocimientos. La idea fue apelar a la contratación de «consultoras», lo que pone en evidencia la ignorancia de quienes estaban al frente de la Inteligencia Nacional. Los últimos gobiernos, sin excepción, han puesto al frente de la Escuela Nacional de Inteligencia (ENI) a funcionarios inexpertos, al igual que en el resto del organismo, y en la actualidad le ENI tiende más hacia un adoctrinamiento, no hacia una capacitación profesional, impartiendo «cursos de género», «Ley Micaela de Capacitación Obligatoria en Género para todas las personas que integran los Tres Poderes del Estado», etc. En este punto cabe destacar que el máximo responsable de la ENI de la gestión de Cambiemos llegó a manifestar a un medio «vamos a cambiar la cultura del espionaje»: es evidente que desconocía de qué se trata la Inteligencia[1].
    • Cabe recordar que en febrero de 2015 el gobierno de Cristina Kirchner disolvió la Secretaría de Inteligencia y creó una AFI debilitada, otorgándole un rol protagónico a la Dirección Nacional de Inteligencia Estratégica Militar pero llevando a cabo actividades ilegales, toda vez que esa área no debe, por ley, realizar inteligencia interior. Incluso el presupuesto destinado a ese órgano militar era mayor al que recibía la entonces Secretaría de Inteligencia.
    • Contrariamente a lo que especifica la Ley, la AFI, como es de conocimiento público, ha sido prácticamente marginada y no dirige el Sistema Nacional de Inteligencia. Aún peor, el proyecto de Ley de Inteligencia presentada al Congreso por la entonces interventora de la AFI Cristina Caamaño proponía que ese organismo dejara de ser la cabeza del sistema de Inteligencia. Varias delegaciones del interior han sido eliminadas o reducidas en su operatividad. Vale aquí recordar que la mencionada interventora desactivó la base de Trelew y cedió el edificio al Ministerio de Desarrollo Social de Nación, en una región con graves problemas derivados del problema de la nueva etnia autodenominada «mapuche», con tomas de tierras e incendios de propiedades privadas e iglesias.
    • Los organismos de inteligencia no mantienen contactos entre sí y, peligrosamente, se aprecia una competencia entre algunos de esos organismos.

Desde lo profesional, desde que asumió el gobierno del Frente para la Victoria, en la entonces Secretaria de Inteligencia se ha procedido a una «purga» de su personal, reduciéndola a su mínima expresión. Cierto es que hasta la creación de la AFI no ingresaron «militantes» y los cargos políticos fueron muy reducidos. Con sus limitaciones, el organismo continuó funcionando pero la «metodología» que se implementó produjo una fuerte desmotivación del personal, por falta de incentivos, bajos salarios y una persecución hacia algunos agentes que fueron destinados a «áreas de castigo». A ello debe sumarse la pérdida del rumbo del organismo lo que se traduce en un sin sentido de la actividad diaria del agente de inteligencia.

Si, debe reconocerse, que durante la gestión de Oscar Parrilli al frente del organismo se produjo un sustancial aumento de sueldos —el cual finalmente no se completó— pero con ello se favoreció el ingreso de numerosos «militantes» que no calificaban para cumplir con sus funciones.

Se procedió a una reestructuración, con un nuevo organigrama que incrementó notablemente los cargos directivos y eliminó las jefaturas intermedias lo que, al igual que en el ámbito privado, hace inviable cualquier gestión. Aún más grave fue la supresión de un área de «Análisis» cuando ésta es la tarea esencial de un organismo de inteligencia.

La gestión del organismo durante el gobierno del presidente Macri, teniendo la oportunidad de reconstruirlo, siguió la misma línea del gobierno kirchnerista y los cargos directivos fueron ocupados por gente inexperta, entre los cuales se encuentran quienes fueron los máximos responsables del organismo. Además debe mencionarse la incorporación de algunos ex comisarios con antecedentes de sumarios dentro de la propia policía. Es en ese momento que se crearon más delegaciones en el AMBA con una impronta inspirada en una comisaría.

Con respecto al personal, se despidió a los contratados por la gestión de Parrilli y se contrató a un número similar de personal, en su mayoría tampoco calificado para cumplir funciones en un organismo de Inteligencia. Además se contrató más personal con sueldos equivalentes a cargos directivos.

Del mismo modo, debe destacarse que los políticos tienden a confundir Inteligencia con «Seguridad», lo que lleva a una seria distorsión de la actividad.

Asimismo, la gestión del gobierno de Cambiemos continuó marginando al personal de carrera e igualando hacia abajo como lo hizo el gobierno del Frente para la Victoria, el cual desarmó su cuerpo profesional que otrora era considerado «Personal Superior». Desde entonces, numerosos cargos que deberían corresponder a ese cuadro pasó a estar en manos de personal auxiliar, desvirtuando la línea jerárquica y profesional que debe mantener un organismo de estas características. Es como si en las Fuerzas Armadas se colocara a un suboficial por encima de un oficial.

Por otra parte, la gestión política siempre hace uso de la «caja» del organismo con fines políticos, es decir, el uso de sus recursos que no son empleados para mantener la infraestructura y la operatividad del organismo.

En síntesis, hasta la llegada de la Alianza al gobierno, el organismo, a pesar del despido de algunos agentes durante el gobierno de Alfonsín, mantuvo un alto nivel profesional. En la ENI se dictaban cursos tanto destinados a personal de la Argentina como a personal extranjero. El nivel del cuerpo docente y de los cursos aún hoy es reconocido por agentes europeos que asistieron a los mismos en la década de 1990. La formación giraba en torno a inteligencia, al análisis de la información, de los medios de comunicación, a la geopolítica entre otros temas.

Del mismo modo, existía un curso denominado «Curso básico de Inteligencia para funcionarios del Estado» al que asistía personal de diferentes ámbitos, de la Justicia, de lo que hoy es la AFIP, de la Cancillería, de las Fuerzas Armadas, de las Fuerzas de Seguridad, de diversos organismos. Este curso era fundamental para establecer lazos informales en un agradable ambiente de camaradería.

Esto funcionó, por inercia, hasta aproximadamente el año 2002. En la actualidad nos encontramos con un organismo verdaderamente destruido, con personal que no ha recibido una buena capacitación, con una ENI carente de docentes, pero lo más difícil será reconstruir tanto el organismo como el instituto de formación debido a que durante décadas no se ha considerado la importancia que tiene la transferencia de conocimientos en una actividad cuyos conocimientos se adquieren con la práctica dentro de un servicio. Para hacer un paralelismo, un ingeniero se forma en una universidad pero la experiencia la obtiene en la obra, en un astillero, en una fábrica, según sea su especialidad.

Para completar el calamitoso cuadro en que se encuentra el Sistema de Inteligencia Nacional deben mencionarse dos proyectos de ley, uno presentado por la entonces diputada Elisa Carrió —que tenía la intención de cerrar el organismo y crear uno nuevo que coordinara las fuerzas de seguridad y pusiera la mira en el crimen organizado, el narcotráfico y el terrorismo— y otro el ya mencionado presentado por la que fuera interventora de la AFI, Cristina Caamaño. Ambos dan claras muestras del desconocimiento de la actividad de inteligencia o de un intento de seguir destruyendo el sistema inmunológico de la Nación y en esto coinciden quienes se definen a uno y otro lado de la grieta.

La propia Elisa Carrió pidió la eliminación de la AFI en diciembre de 2018[2] y Maximiliano Ferraro, también de la Coalición Cívica, propone nuevamente «crear en su lugar un organismo que solo coordine a las fuerzas de seguridad en la prevención y el combate especialmente del narcotráfico, del terrorismo y del crimen organizado en general». En primer lugar, demuestra su desconocimiento del Sistema de Inteligencia Nacional que incluye la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal y, de nuevo, se observa la confusión de Seguridad con Inteligencia. Pero lo paradójico es que su crítica se centró en oportunidad de que saliera a la luz el espionaje llevado a cabo por María Eugenia Vidal cuando era gobernadora, es decir, durante el gobierno de Cambiemos, del cual la Coalición Cívica fue parte. Según la ex interventora de la AFI Cristina Caamaño, durante su gestión halló una fotografía y un informe de seguimiento a Carrió durante un viaje a Paraguay en 2017, es decir, durante el gobierno de Cambiemos[3].

Los del Frente de Todos apuntan al espionaje durante el gobierno de Macri pero olvidan que durante el gobierno de Néstor Kirchner se procedió también a un espionaje de consideración tanto de opositores como de allegados, al punto que se difundió que mandó a pinchar 20.000 teléfonos[4]. También el presidente Menem acostumbraba a espiar hasta a sus propios funcionarios.

Para concluir, tampoco se debe confundir «espionaje» con «inteligencia» y no se debe responsabilizar al organismo ni a sus agentes por el uso que le dan los políticos a esa estructura.

Por otro lado, la Ley 25.520 es una ley que puede ser mantenida en vigencia, más aún cuando lo que han presentado últimamente es verdaderamente un adefesio.

Propuestas en materia de Inteligencia
    • Establecer los Objetivos Nacionales de corto, mediano y largo plazo en materia de Inteligencia, los cuales deberán ser acordes a una agenda de Seguridad Nacional diseñada a los efectos de salvaguardar los intereses de la República
    • La Inteligencia es un atributo de un Estado y no de un gobierno, por lo que debería volverse a recrear la Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE) con un Secretario con rango de Ministro. Por un lado, se volvería a jerarquizar la actividad de Inteligencia y, por otro, tanto la sociedad como los medios continúan denominando informalmente al organismo como «SIDE».
    • Dejar inmediatamente sin efecto el Decreto 1.311 y restablecer el organigrama existente hasta la modificación implementada por la gestión de Parrilli y «La Cámpora». Eso reduciría considerablemente las direcciones creadas por el kirchnerismo y el macrismo y restablecería las jefaturas de División y Departamento, cuya desaparición ha hecho ingobernable al organismo.
    • Reestructurar nuevamente las diferentes áreas de bajo la conducción de un Subsecretario de Inteligencia Estratégica.
    • Crear, al menos, una delegación en cada Provincia con la finalidad de actuar en coordinación con el Gobierno Provincial, la Policía Provincial y las Fuerzas de Seguridad Federales existentes en cada Provincia, como así también las unidades de las Fuerzas Armadas.
    • Crear delegaciones regionales de Inteligencia Estratégica que actuaran con las autoridades respectivas a los efectos de: a) recurrir a la Inteligencia Competitiva a los fines de analizar el mayor aprovechamiento de los recursos económicos regionales en favor de la producción y del empleo; b) analizar los medios de comunicación para favorecer la explotación económica regional y la integración regional y nacional, lo cual favorecerá, asimismo, a fortalecer la Soberanía Nacional.
    • Otorgarle a la ENI el lugar que le corresponde como máximo instituto de formación de la Inteligencia Nacional, la cual, en coordinación con un equipo idóneo de profesionales deberá reestructurar la forma de reclutamiento del personal, los cursos a dictarse y la carrera profesional, de modo tal que el organismo deje de ser una «agencia de empleo» a disposición del gobierno de turno.
    • La profesionalización del organismo debería evitar la intromisión del oportunismo político. La Inteligencia depende de la Presidencia de la Nación pero no de los antojos del Presidente o de funcionarios políticos designados por la máxima magistratura nacional.
    • Atento a que la intención es dinamizar la inserción de la Argentina en el mundo, el personal de inteligencia exterior deberá gozar de una alta capacitación con el objetivo de que sus miembros puedan ser incorporados circunstancialmente al Servicio Exterior de la Nación para cumplir sus funciones en nuestras representaciones diplomáticas.
    • Deben reconstruirse con urgencia las áreas de Reunión y Análisis, toda vez que la Inteligencia es el resultado del análisis de la información recolectada.
    • Por medidas de contrainteligencia, el organismo debe ser relocalizado en un lugar discreto a determinar y alejado de la zona céntrica. De la misma manera la ENI podrá mantener su sede actual a los efectos protocolares pero sería apropiado que cuente con otra sede donde desarrolle sus actividades con la discreción que amerita la profesión.
    • A los efectos de estimular al personal deberá establecerse una meritocracia que actuará como un filtro natural en la carrera profesional. Se evaluará una recomposición salarial escalonada a los efectos de equiparar al personal con el Servicio Exterior de la Nación o el Poder Judicial y no con el gremio Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) como en la actualidad.
    • Debería considerarse la incorporación de la Secretaría de Asuntos Estratégicos de la Presidencia de la Nación dentro del organismo de Inteligencia a los efectos de que la misma se beneficie de la información de inteligencia y evitar la duplicación de las actividades.
    • Finalmente, debería evaluarse la pertinencia de la creación de una Asociación Profesional del Personal Civil de Inteligencia con el propósito de defender los derechos del personal de Inteligencia, promover su jerarquización, su profesionalidad y el federalismo, como base para el desarrollo de una Inteligencia no politizada para la Argentina.

 

* Licenciado en Historia (UBA). Doctor en Relaciones Internacionales (AIU, Estados Unidos). Director ejecutivo de la Sociedad Argentina de Estudios Estratégicos y Globales (SAEEG). Profesor de Inteligencia de la Maestría en Inteligencia Estratégica Nacional de la Universidad Nacional de La Plata.

Autor del libro “Inteligencia y Relaciones Internacionales. Un vínculo antiguo y su revalorización actual para la toma de decisiones”, Buenos Aires: Editorial Almaluz, 2019.

Embajador Académico de la Fundación Internacionalista de Bolivia (FIB).

Investigador Senior del IGADI, Instituto Galego de Análise e Documentación Internacional, Pontevedra, España.

 

Referencias

[1] «Mendocino en la escuela de espías: “Vamos a cambiar la cultura del espionaje”». Sitio Andino, 06/08/2016, https://www.sitioandino.com.ar/n/207008-mendocino-en-la-escuela-de-espias-vamos-a-cambiar-la-cultura-del-espionaje.

[2] «Elisa Carrió pidió eliminar la AFI: “Hay que terminar con el oscuro mundo del espionaje y las operaciones”». La Nación, 28/12/2021, https://www.lanacion.com.ar/politica/elisa-carrio-pidio-eliminar-la-afi-hay-que-terminar-con-el-oscuro-mundo-del-espionaje-y-las-nid28122021/

[3] Luciana Bertoia. «Cómo la AFI de Macri espió a Elisa Carrió en Paraguay cuando se reunía con un carapintada». Página 12, 19/10/2022, https://www.pagina12.com.ar/490763-la-afi-macrista-siguio-a-elisa-carrio-en-paraguay.

[4] “Kirchner mandó a pinchar 20 mil teléfonos. La Política online, https://www.lapoliticaonline.com/nota/nota-55555/

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SOBERANÍA

Iris Speroni*

El divorcio del pueblo y de la élite es total.

Por suerte.

 

El 20 de noviembre es el Día de la Soberanía Nacional, aniversario de la batalla de la Vuelta de Obligado.

Actualmente, la Argentina está intervenida (1). 

A partir de 1983 la capitulación fue total, como consecuencia de perder la Guerra del Atlántico Sur. A partir de entonces, todos los gobiernos, sin distinción de banderías, se prestaron a bajar la agenda diseñada en el exterior y a ser los interventores que la implementen. A cambio, recibieron y reciben grandes beneficios económicos personales.

Las cesiones son algunas sutiles y otras descaradas.

Ejemplos:

  • La flota que conecta Buenos Aires con Colonia es uruguaya.
  • El 98% de la flota fluvial mercante en el Río Paraná es paraguaya.
  • Las empresas que explotan oro y tierras raras en los Andes son del Commonwealth (2).
  • La destrucción del FFCC, sustituido por los camiones (3) para la carga y por los micros para los pasajeros (4).

Durante el gobierno de Menem las empresas de servicios públicos pasaron a ser gerenciadas por empresas de estados de países que pertenecen a la OTAN (italianas, españolas y francesas) o en su defecto, por chilenos. De forma tal que si hubieran querido dejarnos sin luz o teléfono, hubieran podido. Una vez que se les pasó el susto de un Malvinas II, se deshicieron de ellas. Diseñado y promovido por el Banco Mundial (Plan Brady).

La destrucción de las FFAA fue implementada en pasos pero sin pausa. No era un tema menor para el exterior: desde Malvinas la Argentina se había convertido en una wild card, en una incógnita indomable. Alfonsín se destacó por: reconocer la deuda contraída durante el gobierno militar, destruir moralmente y dejar sin presupuesto a las FFAA, cerrar el proyecto del misil Cóndor y entrar al Mercosur con Sarney (5).

Menem continuó su política de bajo presupuesto para las FFAA, descabezó a gran parte de la oficialidad y perseveró en la desmalvinización. Desguazó Fabricaciones Militares e YPF, dejándonos sin productos estratégicos como aleaciones raras, químicos, explosivos, fertilizantes, plaguicidas, los cuales o bien dejaron de fabricarse localmente o fueron entregados a extranjeros. Le cedió la Fábrica Militar de Aviones a los ingleses (alto simbolismo: entregarla luego de que la FAA hiciera desastres con la flota inglesa).

El kirchnerato puso a Nilda Garré al frente de las FFAA primero, de la Seguridad Interior, después. Continuó con la política de bajo presupuesto y que el equipamiento cayera en la obsolescencia (6). Durante su ministerio, las áreas que decidían los ascensos estaban en manos de agentes de Amnistía Internacional sede Argentina. Como si ese filtro fuera insuficiente, luego el senado giraba los pliegos al CELS, al que le otorgaba poder de veto. Garré, además, es quien autorizó a Lewis construir una pista de aterrizaje apta para Boeings. Luego, a cargo de Seguridad Interior abandonó las fronteras bajo la excusa de llevar Gendarmería a la provincia de Buenos Aires.

Peor aún es la gestión de Macri, responsable del fallecimiento de 44 compatriotas que yacen en el lecho del Mar Argentino.

En 1994 se modifica la Constitución Nacional la cual se auto-subordina automáticamente al orden internacional. Jaque mate.

Deshuesados

Es como si cada gobierno, año a año, rompiera un hueso. 1983: fémur izquierdo, 1984: tibia derecha; 1985: clavícula derecha; …1994: parietal izquierdo; …1997: metatarso izquierdo;…2000: falanges mano derecha; 2001: cinco costillas; …2005: mandíbula; 2006: omóplato derecho;…;2014: coxis;…2021: pelvis. Hasta que quedamos reducidos a una masa informe y sanguinolenta sin posibilidad de movernos.

Hoy, 40 años después de finalizada la Guerra, seguimos bajo embargo de compra de armamento. ¿Tanto miedo nos tienen? Parece que sí.

El camino de la Liberación

Los pasos operativos son relativamente sencillos y se resume en: volver a la senda que nunca debimos abandonar.

Se trata de poner orden:

  • pertrechar a las FFAA que deben ocuparse únicamente de las amenazas externas, tema no menor cuando la Argentina tiene un tercio de su superficie ocupada por una potencia extranjera;
  • enviar a la Gendarmería a la frontera;
  • reconstruir la Policía Federal como …bueno, fuerza policial de la Nación;
  • reorganizar la inteligencia tal que se ocupe de las amenazas (terrorismo, narcotráfico internacional, corrupción, lavado de dinero, potencias extranjeras como Inglaterra).
  • exigir que Migraciones se ocupe de … las migraciones, que las escuelas eduquen y no sean fuente de propaganda de la Agenda 2030;
  • cerrar cientos de dependencias que sirven a la intervención y no al país;
  • rediseñar el Servicio Exterior;
  • reinvertir en infraestructura nacional;
    • Reconstruir la flota y los astilleros,
    • Autoabastecernos en energía eléctrica y combustibles;
  • recuperar la pesca;
  • generar las condiciones para que todas las familias construyan sus casas y puedan criar muchos hijos cada una;
  • crecer a 100 millones de personas;
  • cobijar a todos los cristianos perseguidos del mundo.

Acabar con la inseguridad. No es complicado si hay decisión política. Básicamente que la policía y el poder judicial trabajen. Echar a los hippies.

Tener un tipo de cambio alto, que favorezca a las economías regionales y el establecimiento de población en las provincias. Bajar la carga impositiva al 25% del PBI, de forma tal que las familias puedan reconstruir sus patrimonios. Cortar la sangría de los intereses de la deuda pública (es más fácil de lo que se cree).

En fin, área por área, volver al carril tradicional y dejar esta carrera demente a la que nos someten los interventores.

Paso previo ineludible

Si algo ha quedado claro es que el pueblo no se abraza a las imbecilidades que proponen desde el poder. No adhiere a la agenda 2030, LGTB, INADI, calentamiento global y otros delirios. La cantidad de gente que concurre a las carreras de Turismo Carretera y los cánticos de las hinchadas de fútbol lo confirma. El divorcio del pueblo y de la élite es total. Por suerte.

Este punto ha quedado firme. Si en diez años, a pesar del bombardeo mediático permanente, no han convencido al pueblo, ya no lo lograrán.

Sobre esta premisa debemos organizar la reconstrucción y la reconquista popular de la Nación Argentina.

Confieso que estos últimos días he recibido dos grandes alegrías: la primera, la arenga del capitán Messi a la Selección durante la Copa América y la segunda, el cántico de hinchas argentinos sobre la selección francesa de fútbol.

Pueblo Argentino 1 – Élites 0.

El problema máximo actual no es el hambre del pueblo, la desocupación, el subsidio a las importaciones, el castigo a las exportaciones, la succión de la industria por Brasil, el dineroducto a la banca o el cáncer que significa la industria automotriz.

No.

El principal problema es que no tenemos ninguna fuerza política que represente el deseo de salir de esa situación.

Nadie que represente los intereses del pueblo (ya sea de un obrero, un peón rural, una enfermera, un policía o un gran empresario exportador de maní).

Por lo tanto lo que debemos hacer es buscar la forma de tomar el poder y echarlos a todos.

En primer lugar a todas las fundaciones, asociaciones ONG’s extranjeras, las cuales sólo son representantes de potencias enemigas de la Argentina, en particular las que dependen del Foreign Office, de MI6 y del Departamento de Estado.

Luego, inhibir políticamente a todos los representantes de gobiernos extranjeros que actualmente se desempeñen en el gobierno argentino en cualquiera de los tres poderes.

Por último, desactivar todos los organismos estatales creados para implementar la agenda extranjera en nuestro país.

A partir de ahí podremos empezar la reconquista; a reconstruir nuestra nación.

En política internacional: entrar en los BRICS, ampliar el comercio con EEUU, quintuplicar las exportaciones, expulsar a los británicos del territorio nacional a como dé lugar. Llevarse bien con todos y no ser amigo de nadie. Ocupar nuestro lugar como potencia y líder mundial. A largo plazo, reconstruir el Virreinato del Río de la Plata. Invertir fuertemente en softpower en todo el mundo. Tenemos con qué.

En fin, buscar la prosperidad del pueblo, para su felicidad y la grandeza de la Nación.

De algo estoy convencida: somos la mayoría.

* Licenciada de Economía (UBA), Master en Finanzas (UCEMA), Posgrado Agronegocios, Agronomía (UBA).

 

Notas

(1) Por lo menos desde 1983, si bien se pueden plantear fechas anteriores como pérdidas parciales de soberanía. Podemos tomar 1955 y 1976 como posibles, si bien no las únicas. 

(2) Nada de esto es cedido gratis por los interventores. Las empresas mineras reservan una parte del paquete accionario (6%) para los políticos locales. Los uruguayos que explotan el ferry son testaferros de políticos argentinos.

(3) En Chile, tener el 100% del movimiento de carga en camión fue una estrategia de la CIA para paralizar el país en 1973 durante el gobierno de Allende.

(4) Las empresas de transportes de pasajeros son de políticos con o sin testaferros en el medio.

(5) Lo que produjo la desindustrialización argentina

(6) Ella sola es responsable de la muerte de varios oficiales de la Fuerza Aérea. Vidas valiosas de por sí, además de que es carísimo formar a un piloto.

Lecturas relacionadas

Nuestra tragedia: cancelar en 1982 nuestro proyecto de nación

http://iris-speroni.blogspot.com/2019/06/nuestra-tragedia-cancelar-en-1982.html

 

Artículo publicado el 19/11/2022 por Restaurar, http://restaurarg.blogspot.com/2022/11/soberania.html

FEMENINAS SIN FEMINISMO

Revista Tiempo GNA*

La llamada “ideología de género” es antinatural porque va contra la misma realidad y cae en la contradicción de pretender mostrar la igualdad subrayando la diferencia.

Esta gendarme, muy femenina pero no feminista, escribió lo siguiente:

“Somos GENDARMES. NO GENDARMAS. Gendarmería nos abrió la puerta y nos dio la posibilidad de formar parte de sus filas. Somos hombres y mujeres, formados como un solo escudo, unidos para defender el país cuando nos necesiten. Sabemos manejar diferentes armas, sabemos disparar bajo cualquier presión, tuvimos muchas supervivencias y no nos morimos por arrastrarnos en el agua bajo una gran helada. Estamos ORGULLOSAS DE PERTENECER A TAN MAJESTUOSA INSTITUCIÓN, no nos da vergüenza decirlo. Tuvimos la suerte que no todas tienen y muchas quieren. Sabemos lo que se siente tener miedo de cargar un arma, sabemos el cansancio después de cada maniobra después de cada caminata. Sabemos lo que es no bañarse por días, tener el pelo duro de la tierra o el barro y no nos avergüenza darlo a conocer, al contrario, lo contamos con mucho orgullo. Nos encanta rendir honores en cada formación.

Nos enorgullece rendir honores a nuestra BANDERA ARGENTINA y a nuestros Veteranos de Guerra. Si tan sólo supieran lo que sentimos cuando escuchamos las palabras ¡SUBORDINACIÓN Y VALOR! y en ese mismo instante sentir cómo tu piel se eriza al contestar a viva voz: ¡PARA DEFENDER A LA PATRIA!. Es un sentimiento que nos llena el alma y no podemos explicar con palabras lo que sentimos con el corazón. Esa sensación maravillosa al cantar con pura energía nuestra canción “AGUILAS DE LA FRONTERA”, asentando el taco con un violento giro de cabeza mirando a nuestro superior hasta el final de esos 50 metros en donde demostramos la energía que caracteriza al gendarme. La verdad nunca lo sentirán y me apena que así sea. Tenemos derechos y muchos, lo que no tenemos es derecho a cambiar la historia. ¿Se imaginan cambiar la marcha de San Lorenzo? ¿La de Malvinas? ¿Curupayti? ¿O que nos cambien nuestro Decálogo del Gendarme Argentino sólo por el hecho de que hace referencia a un género masculino y no incluya a una mujer? ¿O porque terminen en O y no en A, en E o en X? ¡Déjennos en paz! ¡Es nuestra historia! ¡Nuestro orgullo! ¿Hasta dónde llegarán? ¡A las feministas no las necesitamos!

¡No quieran cambiar nuestras raíces, nuestra historia, nuestro legado! ¡No nos representan y nunca lo podrán hacer!” Fuente: Autora anónima

NOTA: La lingüista María Marta García Negroni, doctora en Ciencias del lenguaje y profesora de la Universidad de San Andrés, explicó a LA NACION que la palabra “soldadas” no está admitida por la Real Academia Española (RAE) y su uso es incorrecto. “En el Diccionario de la RAE, ‘soldada’ quiere decir otra cosa: la paga que se da a los soldados”. El ejemplo es válido para el neologismo “gendarmas”.

* Artículo publicado en Revista Tiempo GNA 69, abril de 2022.